Al despertar a la mañana siguiente decidí llevar a pasear a Sasha, hace tiempo que no lo hago, además necesito distraerme, como era de esperar, mi edificio estaba atestado de paparazzi, todos me hacían tantas preguntas a la vez que no lograba entender lo que decían, gracias a los gruñidos de Sasha los periodistas y reporteros se alejaron a una distancia segura, lejos de los dientes de mi amada pitbull.
- señorita Hoax, es cierto que su padre es el famoso Christopher Evans? - pregunta una reportera.
Acerca el micro lo mas que puede a mis labios, sonrío como si no fuera la gran cosa, en realidad no lo es, llevo su sangre en mis venas, no veo lo malo en eso, nadie elige en que familia nacer, ni que padres tener.
- claro que si - hablo orgullosa.
Mi padre no será el mejor padre del mundo, nunca trató bien a Sarah ni a mi madre, a Kris lo trata con crueldad pero conmigo siempre fue un padre excepcional, me enseñó todo lo que el personalmente aprendió de la vida, se encargaba de decirme todas las noches que yo era su princesa y me decía lo orgulloso que se sentía de mí, hasta que abandoné esa pelea y lo decepcioné.
- eso quiere decir que usted forma parte de esa cadena de asesinatos y red de tráfico de drogas en los que la organización de su padre participa?- pregunta otro.
Estoy cansada Dr que por ser hija suya, den por sentado que yo hago lo que el hace.
Estoy por volver a entrar a mi edificio cuando un 4x4 se detiene y empieza a tocar el claxon sin parar hasta que los periodistas se alejan y empiezan a sacar fotos, la ventanilla polarizada se baja y en el asiento del piloto aparece Karim, con un movimiento de cabeza me pide que suba, abre la puerta y Sasha automáticamente entra y se va al asiento trasero, con un suspiro entro, tras cerrar la puerta apreta el acelerador y me aleja de los periodistas entrometidos.
- no entiendo por que me ayudas- murmuro.
Sasha se asoma por entre los asientos y empieza a olfatearlo intentando averiguar si es de fiar o no.
- porque quiero evitar que cometas una locura -enarco una ceja extrañada, no me conoce como para saber si soy capaz de cometer una locura o no - tu padre es un hombre que no le importa dañar hasta su propia sangre y no quiero verte muerta - dice como si se sintiera obligado a hacerlo.
- para el coche - ordeno.
El no va a ser un obstáculo para cumplir mi cometido, Karim ignora mi orden, en su lugar acelera mas y mas.
- para el coche!!!- grito.
Entonces frena de golpe, mi cuerpo se inclina hacia delante a la vez que coloca su mano en mi pecho impidiendo que mi frente golpee el cristal del parachoques, mi corazón empieza a latir con demasiada fuerza, cuando logro asimilar el hecho de que tengo el rostro a un centímetro del cristal, retiro de un manotazo su mano de mi pecho, cojo en un puño su polo negro y tiro de él acercando su cara a la mía.
- deberías preocuparte por tu amigo, la locura lo puede cometer él- le aconsejo.
Dicho eso me bajo del coche con Sasha siguiéndome por detrás, reconozco ésta calle, por aquí vive Byron, camino hacia su casa, sujeto la correa de Sasha, toco el timbre de su casa y espero a que abra.
No puedo evitar sentirme presionada, debería estar buscando otro trabajo para poder pagar los gastos de mi madre para su recuperación, debería dejar de sentir como mi corazón se rompe cada vez un poco más al recordar todos esos momentos junto a Darío, debería dejar de sentirme como la peor persona, no debí enamorarme del amor de la vida de mi hermana, ésto no está bien, estoy perdiendo la poca cordura que me queda y no es algo bueno.
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Dangerous
ChickLitEn su vida se había encontrado tantas veces en peligro que ya no le temía a nadie, luchaba para sobrevivir en un mundo donde si alguien triunfaba, lo único que hacían era intentar destruir, ella era una mujer importante, en tan solo año y medio habí...