Miro esos ojos color miel extrañada, no tiene que estar aquí, no debería estar aquí, miro en dirección donde está mi padre, él solo me mira con su típica seriedad, parece no importarle que Karim, un agente del FBI, esté de pié junto a mi dentro de la fortaleza.
- escucha, Darío te quiere fuera de aquí, está preocupado por ti - dice hablando lo suficientemente bajo como para que solo yo pueda oirlo - no te preocupes por tu madre, él ya pagó los siguientes tres meses y lo seguirá haciendo - dice ayudándome a levantarme.
Frunzo el ceño, eso es lo último que necesito ahora, mi orgullo me impide aceptar nada de él ni de nadie, siempre me he tenido que valer por mí misma y eso no va a cambiar ahora y no después de que me delatara frente a todo, algún día tenia que pasar pero realmente no necesito su caridad ni mucho menos. Furiosa cojo mi móvil y llamo a la clínica.
- señorita Hoax, ya hemos recibido el adelanto de los próximos tres meses- me informa la doctora Green con alegría.
Me rasco la sien exasperada, en el fondo tenia la esperanza de que no lo hubiera hecho, es mucho dinero, me da igual que sea asquerosamente rico, no por ello tiene derecho de gastar esa cantidad de dinero en mi madre, es solo mía y mi deber como tal es hacerme cargo de ella, cuidarla como lo he estado haciendo desde la muerte de mi hermana.
- devuelva el adelanto - le digo sonando decidida - mire, cuando llegue el momento de pagar, yo misma iré personalmente, mientras tanto no reciba ningún dólar que no le den mis manos- ordeno.
Karim abre los ojos en plato, no se cree que haya sido capaz de hacerlo, es cuestión de orgullo e independencia, espero la confirmación de la doctora y cuelgo, me acerco a mi padre, por primera vez en años me abraza como si de verdad hubiera deseado que volviera, acepto el abrazo algo extrañada pero de buena gana, la edad le pasa factura, está mas delgado y con mas arrugas.
- que hace ella aquí?.
Escucho el rugido de Kris, me separo de mi padre, detrás de mi hermano está su novia, Anna, que ahora no se atreve a mirarme o quizás es por el gruñido amenazador que les lanza mi adorada pitbull.
- alegrate hijo, tu hermana regresó para ser mi sucesora - dice mi padre con una gran sonrisa.
Todos lo miran sorprendidos, yo más que ellos, nunca hablamos de eso, Karim niega con la cabeza un poco impactado por la noticia, Anna palidece y Kris parece enfurecerse aún más, el esperaba ser el próximo gran Evans pero no lo será, mi padre sabe que no tiene madera de narcotraficante.
Sin decir mas nada me coge de la mano y me arrastra al interior de la mansión, todos los sirvientes nos saludan agachando la cabeza en señal de respeto, me padre me arrastra a la sala de reuniones, al parecer el sabía que iba a a venir pues aquí están todos sus amigos de diferentes países, grandes narcotraficantes, mexicanos, árabes, marroquíes, colombianos...etc.
El mexicano Rafael Caro Quintero, apodado el "Narco de los Narcos", Colombiana nacida en Medellin, María Teresa Osorio de la Serna, el jefe narco pakistaní Haji Ehai Ibrahim, Carlos Lehder, dueño de una isla en las Bahamas, que usó como centro de distribución de cocaína, creía que estaba en la cárcel pero al parecer logró escapar, también hay un grupo terrorista llamado El grupo yihadista Estado Islámico de Irak y el Levante (EIIL), y por último otro grupo terrorista, Boko Haram, el líder de cada grupo se encuentra en ésta sala, si el FBI decide atacar con todo su ejercito ganaría la lotería, aquí están los peores de traficantes y terroristas del mundo, los las ricos y mas buscados, antes y después de "chapo" Guzman aún no hay noticias, tengo entendido que lo detuvieron y no opuso resistencia cosa que es muy sospechoso, algo trama. Mi padre encabeza la lista de los mas buscados, y si tomo su lugar yo encabezaré esa lista, la recompensa por su cabeza es extremadamente elevada.
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Dangerous
ChickLitEn su vida se había encontrado tantas veces en peligro que ya no le temía a nadie, luchaba para sobrevivir en un mundo donde si alguien triunfaba, lo único que hacían era intentar destruir, ella era una mujer importante, en tan solo año y medio habí...