Capítulo 3

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Y ahí estábamos cual, George Clooney, Brad Pitt y toda su banda en la gran película "Ocean's Twelve" aunque a  diferencia de ellos, nosotros no teníamos a la Madre de Matt Damon para que nos salvara. Y esos éramos nosotros...todos en una celda, mientras Isabel lloraba y Leo trataba-sin lograrlo-de calmarla un poco. Por otro lado Alex acariciaba el cabello de una Maca profundamente dormida sobre su regazo. Camilo y Thiago daban vueltas como unos locos por la celda de 2x2 y le echaban miradas asesinas a Juan-quien fue el causante de que estemos en este hotel de lujo- Tomas y Nacho estaban sentados en el piso mientras escuchaban como Agus les contaba algo de cómo iba a hacerse líder de una banda para sobrevivir "el duro drama de la cárcel"-según ella- Y acá estoy yo agarrada de los barrotes mirando con carita de cachorrito desamparado al policía que nos miraba ¿Divertido? Si, seguro para él era re gracioso pero para mí no. 

Ya eran las 4am. cuando se acerca un oficial y dice:

— ¿Agustina y Tomás Villanueva?

—Acá—dijo Tomás levantándose del piso cual resorte.

—Vinieron a buscarlos.

—Ashh... ¡No! —dijo mi mejor amiga—Yo me quiero quedar un rato más.

—María Agustina Villanueva salí ya de ahí...¡¡AHORA!! —la voz de su padre resonó en toda la celda.

—Dale vamos—le dijo Tomas agarrándola de la muñeca.

Y así se fueron yendo uno por uno, hasta que solo quedamos mis hermanos y yo, aunque Thiago era mayor y estaba ahí porque le rogo al oficial para no dejarnos solos. Todos nos ofrecieron sus abogados para ayudarnos a salir pero el oficial les dijo que tenía que venir nuestro padre-"Voy a cumplir los 30 antes que eso pase" pensé para mis adentros.  

A eso de las 10 de la mañana aparece un abogado y nos dice que nos podemos ir, que él ya había arreglado todo.

—Bueno—le digo a Alex mientras salimos agarrados del brazo—Por lo menos no vino Lorenzo.

—Hablaste muy rápido enana—me dijo Thiago mientras pasaba un brazo por mis hombros

— ¿¡¿Qué?!? —dije con terror, porque nuestro padre aunque era un padre ausente, las contadas veces que aparecía era súper estricto.

"Mierda, mierda y más mierda" grité en mi interior cuando vi al BMW serie 6 coupé negro estacionado afuera de la comisaría.

—Suban—fue lo único que dijo el hombre en su interior mientras abría la puerta. Lorenzo era un hombre muy guapo con sus 41 años. Era portador de unos ojos azules y un cabello rubio envidiable. Alex es igual a él, mientras Thiago solo comparte el color de sus ojos, ya que tiene el cabello negro. Yo en cambio soy igual a mi progenitora-cabello negro azabache y unos profundos ojos grises. 

En el camino a la casa nadie se atrevió a decir una palabra. Cuando llegamos Lorenzo estacionó el auto y todos bajamos en absoluto silencio. Pero ni bien entramos se vino el sermón

— ¡¿Ustedes están locos o que les pasa?! —gritaba nuestro padre. Alex se acomodó en un sillón y ahí se quedó con la mirada perdida, no prestando atención a nada. — ¿Se dan cuenta que no hacen nada bien? ¡¡Dos días, solo dos días se fue Rosa y miren lo que hacen!!

— ¿Vos te crees con el derecho de aparecer un día y gritarnos como un loco?? —dije ya muy fuera de mí, Thiago solo me agarraba la mano <en un gesto muy lindo de su parte debo decir>

— ¡¡A mí no me grites niña malcriada!!

—Seré malcriada, pero lo que es seguro es que no fue por vos Lorenzo—yo nunca le decía papá como mis hermanos hacían, para mi ese es un título que se gana y ese señor no se lo merece.

Si pudiera ser parte de Ti © (#1) ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora