Bloodstream - Ed Sheeran

XXVIII. All about you.

Mike's POV:

Marqué el número de Alice rápidamente, me lo sabía de memoria. Timbró unas cuantas veces antes de que ella contestara. Su voz sonaba ronca, como si hubiese gritado toda la noche.

+¿Mike?

-¡Hola, Alice! ¿Cómo estás?

+Bien, ¿Y tú?

-¡Excelente! -omití el hecho de que su voz sonaba algo cansada- ¿Sabes que día es hoy?.

+¿Sábado?.

-Sí. ¿Y? -se escuchó un silencio al otro lado de la línea-. ¿Tu, la diva de Luke, yo? ¿No recuerdas? ¡Noche de películas!

+Ah, ya lo recuerdo-suspiró pesadamente- . Sobre eso, Mike, temo que no voy a poder ir a tu casa esta noche.

-¿Porqué? -Al ya me estaba empezando a preocupar.

+No me siento muy bien -mintió.

-Ya salgo para tu casa -afirmé. Ella suspiró. Podía verla negando con la cabeza.

+No vengas, Gordon.

-Está bien -dije, y colgó.

¿No se había despedido de mí? Y...¿Me había llamado Gordon? La conocía lo suficiente como para saber que no estaba bien. ¡Y ella creía que no iba a ir a su casa! Se notaba que no me conocía tan bien como yo a ella. Me levanté del sofá, apagué el televisor y salí. Alice vivía muy cerca mío, lo que me hacía las cosas más fáciles cuando de joderle la vida se trataba. Apenas llegué saque de mi bolsillo trasero una copia de la llave original de la casa. La tenía desde el año pasado; cuando por un error casi pierdo a mi mejor amiga.

Entre silenciosamente y subí las escaleras. Abrí la puerta del cuarto de Al y la vi. Contrario a lo que había creído (y esperado que no pasare), no se estaba cortando. Estaba acostada, mirando fijamente al techo, escuchando música en un volumen que hasta yo podía saber qué canción escuchaba. Lithium, de Evanescence. Miles de veces le había dicho que esa era una canción muy depresiva, pero ella sólo se había encogido de hombros. Y por lo visto aún ignoraba mi presencia. Me senté en su cama y ella se levantó de un brinco.

-¡Mike! Dios, por poco me matas de un susto -se llevó una mano a su pecho, y no pude ignorar el hecho de que llevaba manga larga. Dejó los audífonos a su lado y me miró.

-Hola,Alice. Yo también estoy muy bien, gracias por interesarte en mí -dije sarcástico, ella sólo rió apagadamente.

-¿Qué haces aquí?. Hola, Mike -agregó al ver mi expresión.

-Vine a ver cómo estaba la persona más preciosa del mundo.

-Ya, enserio, Clifford.

-Estaba preocupado por ti -suspiré-. No muchas veces me has llamado Gordon, y siempre te despides de mí. Además, sé todo sobre ti. Todo. -recalqué la última palabra. Ella sólo suspiró y miró hacia el otro lado.

-Nick...

-¿Qué pasó? ¿Te hizo algo?-le interrumpí.

-¿Me vas a dejar hablar? -enarcó una ceja y asentí con la cabeza- Iba de regreso del aeropuerto, cuando vi a Nick besándose con una chica -no pude reprimir la sonrisa que se formó en mis labios-. Después, terminé con él por mensajes de texto.