No estas sola... [Inazuma Eleven | Xavier Foster]

Capítulo 10: No quiero 3:

- No lo voy a hacer Xavier.

- Pero, ¿por qué?

- Porque a) no nos conocemos tanto como para dormir juntos, b) quizás que cosas me querrás hacer mientras duerma.

- ¡PERO SI ME VOY A CONTROLAR! - dice él, histérico - y sólo lo hago como una cábala.

- ¿Cábala, de qué? - me cruce de brazos y Xavier se puso a pensar.

- Bueno, mañana volvemos al instituto, y para que todo salga bien, vamos a dormir juntos - dice sonriente como si hubiese dicho la mejor idea de todas.

- Claro, como compartir contigo la misma cama me va a cambiar la vida, lo voy a hacer - comencé a guiñar.

- ¡Te puede servir, Kayla! - dice para darse la vuelta y dejándome ver su fuerte espalda - además, deberías sentirte afortunada.

- ¿Eh? ¿Y por qué debería de sentirme "afortunada"? - dije ya sentada en mi cama.

- Porque dormirías con el chico más sensual y sexy de todo el instituto y, ¡ojo con esto! No todas tienen ese privilegio - dice con la cara brillante y llena de emoción.

- ¿Por eso? Tremendo motivo, pensé que sería uno más... Más mejor que ése - él poco más y se me desmaya.

Lo sé, ustedes deberán de pensar: «Pero Kayla, ¿eres gilipollas? Tienes al chico más sexy de todo el instituto, del mundo o de la misma galaxia. Hay, pidiendo que duerman juntos ¡y a ti se la ocurre decirle que no! Eso sólo lo haría Kayla, porque yo no» ¿verdad?

¡Y NO ME MIENTAN! Porque yo sé que es así. Porque yo también me lo diría, porque es la verdad.

¡Peroooo claro, como yo soy Kayla, la mayor estúpida del mundo le digo que no siempre!

Pero, ¿pueden ponerse en mí lugar? Yo sólo trato de proteger mi frágil corazón. No quiero que me lastimen más. No lo quiero.

Esta conversación que tuve con Xavier fue en la mañana, a eso de las ocho y pico. Pero él, de tan especial que es, me insistió todo el día.

En la mesa:

- Kayla, ¡duerme conmigo, no va a pasar nada! Amenos que tú quieras que algo pase - su cara era: 7v7 - yo no me voy a negar...

Respuesta:

- No.

En la biblioteca, a eso del medio día:

- Vale, no va a pasar nada. ¡Pero duerme conmigo! Sólo compartamos el mismo espacio para dormir y ya. Pero insisto, si quieres que algo suceda, sólo avisa - nuevamente tenía esa cara: 7u7.

Respuesta:

- No Xavier.

¡Si hasta cuando estaba en el baño me molestaba, el muy hijo de su madre!

- Vamos, duerme conmigo. Te puedo contar muchas cosas, miles de historias lo mar de interesantes, ¡pero Dejame dormir contigo! Por cierto, aquí tienes papel...

Respuesta:

- ¡QUE NO XAVIER!

Y como éste hombre es tan testarudo, siguió, siguió todo el bendito día hasta que, cansada de que me siguiera a todas partes y que no me dejara tranquila le dije:

- Vale, vamos a compartir la misma cama y ya ¿okay?

En ese mismo momento, Xavier comienza a realizar una especie de baile antiguo. ¡Porque no sabia que vergas hacia! Movía los brazos súper rápido pero, las piernas como momia.