31. You make me Strong.

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Tiana los miraba fijamente mientras el detective Le Brun hablaba sobre la situación en la que estaban metidos. Harry a la vez, miraba al piso mientras apretaba con fuerza la mano derecha de Louis.

El castaño realmente no sabía cómo debía sentirse con todo aquello que le contaban; Arnaud había arruinado su vida por un largo periodo de tiempo y todavía tenía secuelas de aquellas horribles semanas en las que debía hacer trabajos con su boca y luego terminaba vomitando lo que había comido en el día. Y ahora nadie podía encontrarlo. Nadie podía decir con exactitud dónde se encontraba y qué era lo que hacía o planeaba.

La situación le aterraba. No por él; Por Harry y Electra.

Le parecía obvio que a Arnaud le molestaría que hubiese seguido adelante con su vida creando una familia, haciendo de su trabajo parte de él. Sabía que eso le molestaría porque también sabía que lo había destruido. ¿Quién no lo hacía ya? Arnaud había destruido a Louis por un largo tiempo. Pero él había podido recuperarse con la ayuda de su medicina preferida – Harry –, y ahora seguía caminando por la vida con una sonrisa y encontrando nuevas cosas por hacer o decir.

-¿Louis? – Llamó el detective - ¿Has entendido? – Asintió – Entonces es mi momento de retirarme –

En cuanto el hombre se retiró de la habitación, Tiana habló de inmediato: -Louis, dime... ¿Qué pensabas? Te conozco lo bastante como para saber que estuviste en tú mundo y no has prestado ni una milésima de atención – Harry levantó el rostro y lo miró neutral –

-Yo... Yo no tengo miedo de que me haga algo. No quiero que lastime a Electra – contestó él apretando la mano de Harry, intentando no decir las demás cosas que sentía. Intentando guardar la mayoría de sus pensamientos, para que su prometido no se preocupase más de lo que ya lo hacía –

Harry frunció el seño: -No lo hará. No lo dejaré – Louis rió sin mucha gracia. Esta vez era él quien miraba hacia el suelo - ¿Qué? ¿Qué pasa? –

-No tienes fuerza – murmuró sin muchas ganas – y yo que si la tengo, no pude zafarme de él – lo miró directo a los ojos levantando su vista: acuosos se veían aquellos dos luceros que Harry llamaba hogar – Y no. No puedes decirme que tendrá un guardaespaldas. Queremos que sea una niña normal dentro de todo. Tener un maldito guardaespaldas no es normal para una chica de siete años –

-Está bien cariño. Haremos todo lo que quieras hacer – y ese fue el momento en que por fin Louis pudo sentir los brazos de Harry alrededor de sus hombros haciéndolo poder volver a respirar y pensar con claridad. Estar más de veinte minutos sin Harry tocándolo por completo cuando estaban en la misma habitación le era asfixiante, sin duda alguna –

-Lo que quiero hacer es irme a Londres, estar con mi familia, la tuya, mi hija, estar en la maravillosa boda de tú hermana, y bailar para vivir. Es lo único que quiero –

Harry le sonrió de lado, olvidándose por completo que Tiana aún seguía delante suyo: -Lo que tú quieras mi amor – susurró –

Sus labios por fin se volvieron a unir en un baile sincronizado, dejándose notar lo necesitados que estaban el uno por el otro. Y para Tiana era inevitable sentirse sola, pues ver a Harry amar a Louis de esa forma tan pasional, dándolo todo por el bailarín, dejándose llevar por cualquier cosa que diga, era un golpe al corazón. Uno duro, de verdad. Tan doloroso que hacía que elevaras tus estándares hasta los cielos. Pero era casi imposible encontrar un Harry Styles para cada persona en el mundo, pues nadie era Louis Tomlinson.

Se separaron con sonrisas sin ser conscientes de la mirada enamoradiza de Tiana dirigida hacia ellos.

-Te amo – susurró Louis abrazando a su bello prometido –

Shake a Leg and Model. [Larry Stylinson]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora