Capítulo 25

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10 AM.

En el departamento de los Usami, Akihiko y Taishi estaban sentados en la mesa desayunando, en cuanto a Misaki, él estaba preparando el desayuno.
Al darse cuenta que faltaba uno de sus hijos en la cocina miró hacia la puerta de la habitación de Sayumi que estaba cerrada y en la perilla había un letrero colgando con el mensaje "No molestar" escrito en él centro.

-¡Sayumi! ¡Llegarás tarde!-Misaki le estaba gritando a su hija mientras que dejaba un plato de tostadas en la mesa.

-¡En seguida voy!-Se escuchó a la ojiesmeralda y unos cuantos golpes secos-¡Ahhh! ¡Maldición! ¡Momo deja mi zapatilla! ¡No es un juguete!

-De nuevo ese perro...-Akihiko se llevó el borde de la taza de café a los labios-Era mejor que lo dejemos en Okinawa.

-Pero...me daba pena dejarlo solo de nuevo-Le respondió Misaki sentándose en la mesa.

-A mi también-Dijo Taishi dándole una mordida a la tostada que acababa de levantar del plato.

Misaki le había pedido a Akihiko llevarse a Momo con ellos y este aceptó a duras penas con la única condición de mantener al perro alejado del cuarto donde estaba su colección de Suzuki's.
El peliplata suspiró ante el comentario de su hijo y su esposo, tan sólo atinó a levantar una tostada del plato y estaba a punto de echárselo a la boca.

-¡Ya me voy!-Sayumi bajó a la cocina rápidamente, le arrebató la tostada a Akihiko quien al no darse cuenta que su tostada había desaparecido se mordió la mano.

-¡Que te vaya bien!-Le dijo Misaki antes de escuchar el portazo proveniente de la puerta principal.

-¿Dónde quedó mi tostada?-Preguntó Akihiko extrañado.

-Sayumi se la llevó Usagi-san.

-Ahhh...-Suspira cansado-Bueno ni modo-Se saca otra tostada y cuando se la iba a comer Momo se apareció y le arrebató el bocadillo con el hocico-¡MOMO!

-*¿Qué?...tenía hambre*-Se traga la tostada dejando al peliplata con un aura oscura.

-Nomas no te estoy haciendo nada por que Misaki y mi hijo están aquí...-Masculló.

-¿Por qué le estás hablando al perro?

-Nada Misaki, no me hagas caso.

-*Y yo nomas no estoy mordiendo tus peluches por que la puerta tiene sensores de rayos láser...*-El beagle fue a sentarse al sofá.

Fuera del edificio Sayumi corría como podía por la acera, se le había hecho tarde y la casa de Zuki quedaba bastante lejos. Se detuvo en semáforo verde trotando en su lugar, después de que los autos pasaran la luz del semáforo cambió a rojo dando comienzo a la carrera de la ojiesmeralda. Esta por poco y choca contra un poste por prestar atención a la dirección que estaba escrita en un papelito que le dió la pelinegra.

Al llegar al departamento de Zuki presionó el botón del timbre, esperó casi un minuto y abrieron la puerta encontrándose con una chica que se aproximaba a los 25 años de edad, de cabello castaño claro y ojos achocolatados, tenía una sonrisa cálida y una manera de mirar muy tierna que a la vez también madura. Estaba vestida de un traje de Kendo y con el cabello recogido en una cola de caballo.

-Hola, tú debes ser Sayumi ¿verdad?

-Buenos días-Hizo una pequeña reverencia-Etto...sí, soy yo ¿está Zuki?

-Sí, ella te está esperando en su habitación, puedes pasar-Se dirije a la reja y la abre dejando pasar a la ojiesmeralda.

El departamento estaba muy ordenado, se sentía en un ambiente más tranquilo que el de su propia casa. Le echó un ojo disimuladamente a todo el lugar para luego mirar a la chica.

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