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Capítulo 10: Creí que teníamos un futuro escrito.

~ Grant ~

7:20 AM

- Hola -. Murmure abriendo con gran sigilo la puerta.
- Hola, Grant -. Contesto la madre de Alan tomando de mi mano.
Tome asiento a un lado de ella, mis ojos solo podían observarlo a él, me encantaba verlo cuando dormía, hacía pucheros y su rostro permanecía intacto.
- ¿Cómo se encuentra él? -. Pregunte con un suave murmuro.
- Bien, por el momento se encuentra bien -. Susurro.
- Y, ¿cómo reaccionó Alan al verte?
- Muy mal -. Acaricio su rostro -. Ni siquiera me observaba al rostro.
Suspire resignado.
- ¿A qué te presentas por aquí? No creo que sea para ver a Andrew -. Tomo de mi mano.
- No, bueno también vine a saber como se encuentra él, pero... -. Suspire -. Necesito hablar con Alan.
- Despiertalo, valorará el hecho de que te hayas presentado -. Soltó una sonrisa.
- De acuerdo -. Murmure acercándome a él.
Mi temor por saber como reaccionaría, realmente me atemorizaba, pero era mejor tener en mente que por lo menos lo intente, a decir, no tuve el valor de hablarle.
- Alan, amor despierta -. Lo agite con precaución -. Amor -. Murmure.
Tallo sus ojos y me observo, le tomo un momento darse cuenta de con quien estaba hablando.
- ¿Grant que haces aquí? -. Frunció el ceño tomando asiento.
- Ven conmigo, quiero mostrarte algo -. Insistí tomando su mano.
- Lárgate, no quiero que vengas aquí -. Dijo con enfado apartando se de mí.
- ¡Chicos! -. Murmuro -. Mejor hablen afuera.
Alan me tomo con crueldad de la mano llevándome hacía afuera.
- Antes de que me grites o me golpees, ven conmigo -. Nuevamente insistí.
- ¿Por qué querría ir contigo a alguna parte? -. Pregunto con sarcasmo.
Tome de su mano colocándola en mi pecho.
- Porque me amas, porque te gusto y sé que no te arrepentirás si me das otra oportunidad -. Murmure.
- No te amo y no me gustas, pero te acompañaré -. Dijo tratando de ser firme o tratar de que su mentira luciera ser verdadera.
- Gracias -. Besé sus labios.
- Oye -. Frunció el ceño -. Si lo vuelves a hacer, me iré.
Asentí con la cabeza.
No sabía que era realmente lo que estaba haciendo, pero, él me estaba siguiendo, no se negó en seguirme y eso me agrado escuchar.

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- ¿A dónde me llevas? -. Pregunto Alan confundido mientras observaba la carretera desde la ventanilla del coche.
- Pues -. Tome su mano -. Es una sorpresa.
Soltó una sonrisa.
- Si no te conociera, creería que pretendes raptarme -. Dijo con sarcasmo.
Detuve el auto a un lado de la carretera, literalmente, en medio de la nada, del bosque que todos pasan e ignoran cuando viajan.
- Bien, vamos allá -. Agregue bajando del auto.
Podía notar que su mirada tenía miedo, no miedo de mí, si no, miedo en equivocarse, miedo en cometer una completa estupidez y podía comprenderlo; tome de su mano y murmure.
- Yo también tengo miedo.
Me sujeto con fuerza, siguiendo cada paso que yo daba, hasta finalmente, llegar a la cascada.
Su mirada se iluminó al ver el mundo entero que nosotros ignoramos a diario.
- ¡Oh! -. Cubrió sus labios con sus frías manos.
- ¿Confías en mí? -. Pregunte al pararme en un tronco caído que cruzaba parte del lago.
Asintió con la cabeza, terminando finalmente, sentados a la mirad del tronco caído.
- Es hermoso -. Murmuro.
- Lo sé, es mí lugar favorito -. Conteste.
Lo observe un momento, sus ojos no paraban de observar cada parte del lugar, extendí mi mano, tocando con suavidad la suya.
- Grant -. Dijo observándome fijamente a los ojos.
- ¿Si, Alan? -. Pregunte.
- Te veo -. Murmuro.
- Te veo -. Murmure derramando mis labios contra los suyos.
- Lo siento -. Cayo en llanto.
- Tranquilo, yo debo ser el que se disculpe -. Limpié sus lágrimas.
- ¿Por qué es tan difícil dejar de amarte? Lo intenté, juro que lo intenté, pero terminé muy mal, a mitad de perder la vida -. Murmuro con dolor.
Lo abracé con fuerza cayendo en llanto al igual que él.
- No vuelvas a hacerlo, no lo hagas -. Susurre.
- Mi piaci -. Beso mi mejilla.
- ¿Perdón? -. Lo observe confuso, con la mirada perdida.
- Me gustas -. Beso mis labios con suavidad.
- ¡¿Grant, estás aquí?! -. Grito Russell desde el otro extremo del lago.
- Mierda -. Murmure apartando me de Alan.
- ¿Qué hace él aquí? -. Pregunto Alan con enfado.
- Ven, vámonos -. Tome de su mano alejándonos del tronco y acercándonos con Russell.
- Hola, amor -. Beso mis labios.
Me aparte de él preocupado y observe avergonzado el rostro de Alan.
- Claro, debí suponerlo -. Abofeteo mi rostro -. ¡Te odio, Grant! -. Grito -. ¡Te odio!
- ¡Oye basta! -. Grite tomando sus manos derramandolo con gran cuidado hacia el suelo.
- ¡No me toques! -. Grito con desesperación golpeando mi abdomen.
Sé que hice mal, pero sabía que Alan no era capas de lastimarme, ni siquiera con su estado más máximo de enfado. Alan se puso de pie y se alejo de mí.
- Llévame a casa -. Agrego subiendo al auto.
- Bien, yo te sigo -. Murmuro Russell acariciando mi espalda.
- ¡Basta! -. Golpee su mano -. Ahora no.
Caminé con enfado al coche, Alan estaba en silencio sentado, observando por la ventana.
- Háblame -. Murmure.
El silencio era desesperante, me estaba consumiendo vivo.
- Estábamos bien -. Tome su mano.
- ¿Bien? -. Golpeo mi mano -. ¿Crees que engañar a tú pareja es estar bien?
Asentí con la cabeza.
- Dijiste que yo te gustaba -. Susurre con la voz pastosa.
- Ahora veo mi gran error -. Encendió la radio para lograr menos tensión, pero lo que hizo fue aumentarlo más.
- ¡Basta! -. Apague el estero y apague el motor del auto.
- ¿Qué haces? -. Frunció el ceño.
- Alan -. Murmure -. Cásate conmigo.
Cayó en llanto y negó con la cabeza manteniéndose cabizbajo.
- No, Grant -. Suspiro -. Perdón, pero no lo haré.
Abrió la puerta del auto, beso mi mejilla y dijo.
- Caminaré y es mejor que no me esperes, tú novio te esta esperando.
Me rompía el corazón su gran rechazo, sé que me equivoqué, se que cometí un gran error, pero soy un ser humano y lo mejor que sé hacer es equivocarme.