- ¿quien es este muchacho Freddy?, ¿no iba a venir tu novia?
- Si mama, Bryan es mi NOVIO – trate de sonreír al escuchar al idiota decir eso, pero mi cara de fastidio no quería abandonar mi rostro.
Si, este debe ser uno de los momentos más incómodos de mi vida. Yo, Bryan Mouque, haciéndome pasar por el novio de un chico que no conozco, todo por ayudar a un amigo. En una casa, que casa... una mansión, con ambos, padre y madre, observándome con los ojos abiertos y su boca acompañándolos.
- Hola Suegro, Suegra – dije con una sonrisa forzada al sentir como Freddy me abrazaba con su brazo derecho por encima de los hombros y me clavaba sus, ahora, molestos dedos.
Mis supuestos "suegros" solo me observaban de arriba abajo, pude notar como miraban mis tatuajes, luego mi piercing en el labio y después el de mi nariz. Podrían ser un poco más disimulados.
- y... ¿Que vamos a comer? – me atreví a preguntar con una sonrisa de oreja a oreja, mostrando mis dientes blancos por completo. Y es que, si me voy a hacer pasar por el novio, por lo menos voy a exprimir todo lo bueno que pueda de esta familia.
- Si quieres, me podes comer a mi – me susurro Freddy para que solo yo lo escuche.
- Aww... Fredd, eres tan dulce – le dije, girándome, quedando enfrente de el, mientras agarraba su rostro con mis dos manos y le daba un pequeño beso en los labios – si amor, quiero helado. Pero que sea de chocolate.
*Uno de los problemas de ser vegetariano es que cuando vienes a la casa de gente que tiene mucha plata, el 90% de la comida es CARNE. Carne de vaca, de cerdo, de caballo, de cordero, y hasta no me sorprendería que de gato o perro; por lo tanto, no comes una mierda.
Lo bueno de todo esto, es que como todavía no han asimilado que su hijo mayor, porque recuerdo que Alonso me dijo que los de Jos no sabían que era gay, tiene preferencia por el mismo genero. No saben que clase de preguntas hacer. Es bastante divertido, yo creo que lo más divertido va a ser cuando se enteren que su hijo menor también es gay. Quiero estar presente el día que se lo diga.
- Así, que Bryan – escuche decir al padre de Freddy, Donald creo que se llama – ¿estas Terminando la secundaria? – Claro, era sabido que el silencio no iba a ser por siempre eterno, pero era necesario que me hiciera semejante pregunta idiota.
- ¿Eh? – fue lo único que salio de mis labios, mientras alzaba una ceja - ¿Qué maldita edad cree que tengo? – Si... soy un mal hablado, no era necesario que pongan esa cara mis suegritos.
- 16 – dijo la mujer, tratando de sonreír amablemente, pero era obvio que era forzada.
- Termine la secundaria, tengo 18, cumplo 19 en octubre y estudio licenciatura en música – Dije de mala manera, mientras miraba para otro lado.
- Es que mi hermoso Bry parece tan pequeño.
Pequeño, Pequeño, Pequeño, Pequeño. Maldita palabra que hace eco en mi cabeza.
Lo quede mirando con furia y vi como me sonreía burlonamente, Claro, el estaba enfrente mío, al lado estaba su madre y en la punta de la mesa estaba su padre, en el que estaba enfrente de la madre, ósea, al lado mío, era donde se sentaba Mickey, pero como todavía no había vuelto, empezaron a cenar sin el.
- Mi dulce y "pequeñito" Bry
Maldito hijo de re mil puta, ¿queres jugar con fuego?, ¡juguemos!
- Mmmm... - hice un leve puchero mientras lo miraba – Perdón por la mala palabra – y mire a mis suegros, quienes al ver mi cara de niño angelical, sus facciones se habían relajado y hasta me miraban con un toque de ternura, claro, habrán olvidado de que era el novio de su hijo – a ti también amor por hacerte quedar mal – y ahí esta, sus facciones cambiaron al recordar que era el novio de su hijo mayor.
Acerque la silla mas a la mesa, mientras con ayuda de mi pie me quitaba la zapatilla de mi pie derecho.
- no, esta bien, perdónanos a nosotros. Tuvimos que preguntar tu edad – dijo Donna, la mama de Freddy, con una sonrisa, creo que ya se estaba acostumbrando, que aburrido – y, Byan, no has comido nada.
- Soy vegetariano, no como carne – dije con una sonrisa, mientras levantaba mi pie y acariciaba la rodilla de Freddy –
- Freddy, como no nos vas a decir que tu... Novio... es vegetariano – fue gracioso escuchar como le costaba decir la palabra novio, pero bueno, eso no va al caso.
- Si – dijo Freddy, mientras se mordía el labio inferior al sentir mi pie recorría su pierna, luego acariciar sus muslos con el dedo gordo de mi pie – Perdón...
- Espera un poco, le voy a decir a la cocinera que te haga algo – dijo Donna, levantándose y saliendo del comedor.
- no es necesario – dije, pero ella ya había salido, así que solo suspire y apreté mi pie en la entrepierna de Freddy, buscando que se le forme un gran y molesto bulto.
- Diablos – susurro Freddy, cuando apoye mi pie en aquel bulto y comencé a subir y bajar mi pie.
- Que es esa Boca en la mesa Alfredo!
- Perdón, es que creo que se me durmió la pierna.
- ¿Por que se tarda tanto mi suegra? – cambie drásticamente de tema y pude ver como mi suegro se sonrojaba, pero no de furia, sino, como si le diera vergüenza.
Lo único bueno que puedo rescatar de esta familia es que no son homofóbicos, solo no están acostumbrados o preparados para lidiar Con algo así, pero siendo honesto, ¿quien lo esta?
Sentí la mano de Freddy agarrando mi pierna, ejerciendo más presión en su bulto. Apretaba mi pie con fuerza, lo cual en un momento me fue muy molesto, ya que me choque contra la mesa y me golpeé la costilla, claro, eso no paso desapercibido por el padre de Freddy que me quedo mirando, sonreí forzadamente y pedí perdón, diciendo que había sentido un bicho caminar por mi pie, el solo asintió y miro hacia la puerta para ver si venia su mujer, mire nuevamente a Freddy, con ganas de matarlo pero al ver como respiraba pesadamente, lo deje pasar Al rato entro la madre de él, con una sonrisa, y se sentó al lado de su hijo nuevamente, cuando ella se acerco, dejo de hacer presión en la mesa, lo cual me dio una pequeña idea.
- Fredd... - Dije suavemente, sacándolo de aquel trance – ¿Donde esta el baño?
Y si hubieran visto la cara que puso, entenderían porque no puedo borrar la sonrisa que formaron mis labios. Claro, normalmente uno ve esto como una invitación a "Hacer cosas prohibidas", pero el problema era, que era tan notorio el bulto de Freddy, que si se paraba sus padres iban a notarlo. Y No hay mayor vergüenza que ver como tus padres se sonrojan y tratan de hacer que no vieron el gran bulto en el pantalón.
- ahí te llevo – y una sonrisa acompaño su rostro, mientras con cuidado tiraba una cuchara al costado – que torpe, se me callo – dijo el pelinegro, mientras se colocaba de espalda a sus padres y juntaba la cuchara – vamos mi amor – y se fue caminando, dándole la espalda a sus padres.
¿Y Yo? Yo vi un gran bulto en su pantalón, enorme, tentador, delicioso según lo recuerdo. Me dieron ganas de tirarme encima suyo y violarlo ahí mismo, sin importarme una mierda que sus padres nos vieran. Y ¿Por qué me iba a importar? Ellos no son mis suegros de verdad, y yo... yo solo me lo quiero coger, no es que me haya enamorado ni nada por el estilo. Es mas, el mismo lo dijo "Si no hay amor es solo Sexo".
- Bry, ¿Vamos? – me gire para verlo y ya estaba en la puerta que daba al living, aun de espalda, para que sus padres no vieran aquello que había provocado hace unos segundos debajo de la mesa. Sonreí, me había perdido en mis pensamientos, me levante, no sin antes ponerme la zapatilla y le sonreí a mis "Suegros" antes de irme caminando hacia donde estaba él.
Salimos del comedor, pasamos por el living, después fuimos por un pasillo, pensé que íbamos a subir las escaleras, pero no... seguimos caminando por aquel pasillo que tenia bastantes puertas, hasta llegar a una puerta de madera. Él tomo la perilla de la puerta y la abrió, me agarro del brazo y me metió adentro a la fuerza.
- ¿Qué diablos estabas pensado? – me dijo furioso, agarrando mis muñecas y apretándolas contra la puerta.
Tenia dos opciones, la primera era decirle la verdad y la segunda cambiar de tema, y aunque soy muy partidario de decir la verdad, en estos momentos mi cabeza no estaba carburando como debería hacerlo.
- Métemela – le susurre, mientras levantaba mi pierna izquierda y la colocaba alrededor de la cintura de el, comenzando a hacer movimientos suaves para que nuestros bultos se rocen.
Si, había sucumbido ante el placer, un placer que después de un tiempo me iba a ser difícil olvidar.
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¿Las personas cambian?// Breddy
FanficHistoria 100% mía Puro BREDDY :3 Así que si eres homofóbico retírate