My secret {el final}.

Capítulo 3.

My Secret.

Tara.

La hora de las copas llegó; Vanessa y Dakota estaban en mi dormitorio sirviéndose el champagne. Me sorprendía de veras la forma en que ellas siempre querían hacerme olvidar el tema de Codd y siempre trataban de sacarme una sonrisa y yo, por supuesto, ponía de mi parte planeando salidas y pasatiempos para no pensar tanto en aquello, para no hundirme más, para no meter más el dedo en la llaga.

No conocía mucho a Grace, pero en esos dos meses donde habíamos hablado, ella solía actuar bien y luego parecía que estuviese fuera de la órbita humana. Nunca quise hablar con ella aparte, porque siempre supuse que eso le molestaría. Ella era amable con Dakota y conmigo, pero a veces solía frustrarse y encerrarse en cualquier cubículo hasta "calmarse" y luego actuaba más cortante que nunca.

Desde que llegó a Winstonk, siempre tuve un concepto de Bledel idealizado en una chica buena, amistosa, alegre. Pero parecía todo lo contrario o quizás yo no la llegué a conocer en su mejor momento.

Dakota se acercó a una cómoda que estaba justo al lado de la ventana para servir champagne en las copas mientras Vanessa y yo estábamos recostadas a la pared, platicando un poco sobre la amistad de Mike y Chaz mientras nos reíamos de ciertas cosas; oímos una copa caer al suelo y romperse, Vanessa y yo observamos estupefactas a Dakota, que totalmente perdida, observaba vagamente el campus desde la ventana, sus manos comenzaron a temblar y parecía que buscaba a tientas algo sobre la cómoda, observó la cómoda y luego señaló a la ventana, supe que quería gritar por la forma en que abrió su boca pero no emitió sonido alguno, parecía que se ahogaba entre sus propias palabras, en un afán de expulsarlas pero como si a la vez quisiera tragárselas. Corrí hacia la ventana a ver que señalaba ella, mientras Vanessa la sentó en mi cama tratando de calmarla; no vi nada interesante, solo parejas besuqueándose en la fuente, lo único fuera de lo normal era una silueta en las paredes de las habitaciones de nuestro edificio, en planta baja, pero podía ser cualquier persona, así que cerré la ventana.

Dakota estaba temblando y parecía increíble, pero aunque no tuviésemos la calefacción encendida, ella estaba sudando como si hubiese corrido un maratón. Cuando me detuve enfrente de ella, me observó con desespero, como si viese en mí a alguien más. Colocó sus manos bruscamente sobre mis hombros y me empujó hacia la pared y gritó enfrente de mí "¡Codd está vivo!", esas palabras chocaron contra mi rostro como si fuese veneno, mi corazón dio un vuelco y sentí como me ahogaba, ¿por qué decía que él estaba vivo? Parte de mí lo creyó, pero parte de mí recordó como lo enterraban, así que evité creerle. Vanessa quitó a Dakota de encima de mí, y trató de calmarla, pero Dakota comenzó a taparse los oídos y a gritar eufóricamente, sus ojos comenzaron a voltearse y de un minuto a otro, estalló. Pero no estalló de forma grave, si no que se mantuvo en silencio, observando la ventana cerrada, balbuceando, casi para sí misma, "Codd está vivo"

***

Llamamos a Mike, Chaz, Harry, Jules y Grace. Ellos no tardaron en llegar, aunque Harry, Chaz y Jules parecían estar pasados de tragos, traté de evitarlo. Dakota estaba acostada, estaba fría y pálida. Temía que estuviese volviéndose loca, quizás había visto a alguien que se parecía sumamente a Codd en el campus o simplemente se lo había imaginado, pero Codd no estaba vivo y ella podría gritármelo las veces que quisiera en la cara, pero simplemente él no estaba vivo.

Vanessa acariciaba el cabello de Dakota, en una forma tranquila de tratar de calmarle. Los chicos, sobre todo Grace, observaban a Dakota de una forma estupefacta, nadie, por supuesto, nadie, esperaba que ella reaccionara así cuando ya todos estaban superando la muerte de mi hermano.