"Harry, por favor..." me ruega Seth al teléfono.
"No quiero ir. Tengo trabajo que hacer," le explico por sexta vez.
"Harry, no seas así. Nos divertiremos muchísimo. Además, ¿no es esta la semana de cada mes que te emborrachas?" me recuerda el idiota de pelo castaño.
"Sí. Gracias por tu sensibilidad," le digo. "Nos vemos allá en una hora. No llegues tarde."
Cuelgo la llamada y ruedo los ojos. Me levanto de la cama por primera vez en el día y decido tomar una ducha. Me pongo una camisa manga larga gris y mis jeans negros. Decido tomar una coleta y amarrarme el pelo. Me echo mi colonia favorita solo porque estoy de mal humor y quiero follar con alguna muchacha guapa. Meto dos condones en el bolsillo de mis jeans y me voy.
(...)
"Muchachas, muchachos..." saludo al verlos esperándome en la barra del bar.
Todos están sentados con un trago en la mano. Me sorprendo al ver que Caroline tiene también un cigarro. Sydney está sobre Tristan y se están besando fogosamente. Subo las cejas y me carcajeo al ver la escena. Me siento al lado de Christina y pido un trago de Bourbon.
Comienzo a hablar con Christina y minutos después, estamos besándonos como si no hubiera un mañana. No puedo evitar que me gusten sus labios y sus tetas presionadas sobre mi pecho. ¡Esto es tan ardiente! Cuando Christina se sube a mi regazo y comienza a frotarse contra mí, pierdo todo mi control.
Della nos interrumpe al preguntarnos si sabemos hacia donde ha ido Caroline. Se ve preocupada y sé que esto no suena bien. Nadie se ha dado cuenta de cuando la de pelo negro se ha levantado y se ha ido. Della comienza a buscarla como loca y sé que ha de haber una razón para que se preocupe de esta manera. Christina –mientras buscamos a su amiga- me explica que durante estos días del mes, Caroline suele ponerse mal.
Igual que yo.
Después de veinte minutos, la encontramos afuera del bar con un muchacho. Ambos estan sentados en la acera mientras que el muchacho le habla y ella solo se dedica a fumar.
"¡Caroline! Pudiste avisar que te ibas," Sydney la regaña.
"Estaban muy ocupados comiéndose las bocas," responde Caroline con un tono burlón en su voz.
Todos rodamos los ojos y regresamos al bar con Caroline riéndose suavemente afuera. Lo que me ha dicho Christina me deja pensando. De repente, quiero saber por qué Caroline suele ponerse mal en estas épocas del mes. Quiero saber qué habrá pasado para que preocupe a sus amigas de lo que podría hacer.
Dejo el asunto de lado y me siento en la barra a beber y a buscar muchachas guapas dispuestas a follar esta noche. No hay ninguna que me llame la atención así que me dedico a observar a Della bailando con cualquier muchacho que se le acerca. Su baile es provocativo y extremadamente sensual. Observo cada uno de sus movimientos. Sus caderas se mueven de una manera deliciosa y su culo... ¡Dios, su culo!
"Hey, Harry, ¿cómo la estás pasando?" me pregunta Seth y se sienta a mi lado.
"Normal, ¿tú?" le contesto antes de tomar un trago de mi Bourbon.
"Feliz. Mira a Della. Me está provocando a propósito. Esa zorra... Se nota que quiere, desesperadamente, follar conmigo esta noche," comenta el imbécil de mi mejor amigo.
"O tal vez solo se está divirtiendo. No todo gira alrededor de tu pene," le digo, sacando mi lado feminista.
Seth se ríe. "Hey, ¿por qué andas malhumorado? ¿Es por Lina?"
Seth ha caído bajo y lo miro con ira. Con mi puño bien cerrado le pego un fuerte golpe en la mandíbula. Él se tambalea y no me devuelve el golpe. Sabe que lo merece. Le pago al bartender y me despido solo de Christina. Salgo del bar y me encuentro a Caroline fumándose el último cigarro de la caja mientras el muchacho de antes continúa hablándole de cosas que, estoy seguro, no le importan. Ella alza la mirada y yo le doy un asentimiento de cabeza como despedida. Ella me sonríe levemente y continúa fumando.
Se ve guapa hoy.
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Capítulo actualizado el 11/04/16
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Work Song
Fanfiction¿Alguna vez has leído una historia donde está la típica zorra que destruye una relación entre aquel muchacho guapo y aquella muchacha tímida? Si es así, entonces, ¿te has preguntado qué pasa con aquella zorra? ¿Cuándo será su turno de amar?