Manual para padres [Larry Stylinson] [M-preg]

Capítulo 29 "Intentos"

El sonido de pasos alertó al pequeño que alguien se acercaba. Como había aprendido, se sentó en su cuna y esperó a que alguien entrara y cuando vio a la figura que conocía muy bien, alzó sus bracitos y comenzó a balbucear una serie de 'pa, pa, pa' haciendo que el hombre que acababa de entrar sonriera.

—Veo que alguien ya estaba despierto —dijo Harry levantando es sus brazos al pequeño— ¿Tienes hambre?

—Pa —Harry sonrió a su pequeño y lo llevó hasta la cocina, en donde Louis estaba haciendo el desayuno.

—No sé cuánto tiempo llevaría despierto, pero cuando entre a su cuarto estaba sentado en su cuna.

—Desde que aprendió a sentarse y comenzó a dormir en su propio cuarto se ha hecho todo un pequeño independiente —dijo Louis dándole un beso en la frente a su hijo y uno a su novio en la mejilla —no quiero que crezca

—Ni yo. Y pensar que hace unos meses era un pequeño bebé, aún es un bebé, pero ya no es tan pequeño...

Kyle dejó de ser un pequeño bebé cuando aprendió a sentarse, o al menos así lo sentían Louis y Harry. Con casi un año de edad, Kyle había aprendido a gatear, a sentarse, estaba aprendiendo a pararse sostenido de alguna base sólida y sabía algunas cortas palabras. Louis siempre dijo que su hijo era un niño muy inteligente para su edad y siempre solía sorprenderlo.

Kyle tenía la habilidad de saber cuándo Louis quería que comiera la papilla de zanahoria que a el pequeño no le gustaba, en esos casos siempre comenzaba a gritar 'pa' hasta que Harry llegaba y le preguntaba a Louis que pasaba y por lo general terminaba convenciéndolo sobre que intentaran la papilla de zanahoria otro día, a lo cual Louis rodaba los ojos y Kyle sonreía a Harry como si hubiese un secreto entre ellos.

Además de su inteligencia, Kyle sabía comportarse mejor que muchos adultos –según Louis- a su corta edad. Cuando Louis tenía que hacer algo en la cocina y Harry no estaba, Louis dejaba a Kyle en la sala con sus juguetes y le decía que no se moviera del lugar, y como si el pequeño entendiera todo sonreía y volvía a jugar; cuando Louis regresaba, Kyle seguía en el mismo lugar jugando y Louis no podía sentirse más orgulloso de su pequeño.

—No puedo creer que ya va a cumplir un año —suspiró Louis.

—Ya no crezcas Ky —dijo Harry al pequeño que como si supiera que su padre necesitara un abrazo, se acurruco en su pecho, escondiendo su cabecita en el cuello de su papá. Louis se acercó a su pequeña familia y Harry envolvió su brazo libre en sus hombros, uniéndolo al abrazo.

—Te amamos Kyle —y una vez más, como si Kyle entendiera cada palabra que sus padres decían, con una manita se aferró a la camisa de Harry y con la otra tocó la mejilla de Louis.

***

—No puedo creer que en menos de un mes mi sobrino va a cumplir un año —dijo Liam entrando a la oficina de Harry— vi la fecha en el calendario y me acordé de todo; desde tu ataque de pánico, el accidente, Kyle llegando antes de tiempo, tu no sabiendo como cambiar un pañal, el cumpleaños de Louis, el de Zayn, el tuyo el mío, todo pasa tan rápido...

—Ni me lo digas; mi bebé va a cumplir un año y dejará de ser el pequeño que solo dice 'pa' y cortas palabras y aprenderá a decir palabras más grandes y después oraciones y luego irá a la guardería y conocerá más niños y se olvidará de mi y...

—¡Alto ahí vaquero! —dijo Liam haciendo callar a Harry— vayamos año por año, aún faltan algunos para que vaya a la guardería y nunca se va a olvidar de ti ¡Eres como el súper papá del siglo! Y no lo digo yo, lo dice ese artículo en esa revista de negocios.