"Sometimes I love you... sometimes I hate you"
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Miro a Harry con el ceño fruncido.
—No me pondré eso, Harry—objeto mirando el conjunto de ropa ordenadamente en mi cama, él ríe.
—No le llames eso, Lucy. Es tu nuevo uniforme escolar—habla tocando el jumper celeste.
—¿Por qué una escuela religiosa, Harry?—Pregunto mirando el vestuario, en mi antigua escuela no usábamos uniformes, tal vez porque era una pública y no una escuela privada y religiosa.
—Porque era el único lugar con bacante, Lucy, estamos casi a mitad de año. Deberías agradecerme—refunfuña mientras hace un adorable puchero, sonrío, tiene razón, estoy actuando de manera muy desagradecida.
—Lo siento, no estoy acostumbrada a los uniformes. Pero tranquilo, una escuela es una escuela—él sonríe.
—Bien, ahora vístete o se nos hará tarde. Te esperare abajo con tu mochila—asiento y cuando se va miro la vestimenta, suspiro.
Me saco mi pijama azul con ositos y me pongo primero la blanca remera con unos short negros y luego el celeste jumper, unas medias que me llegan a la rodilla y unos negros zapatos. Me miro al espejo y mi reflejo no me gusta. No me veo para nada bien, la remera es algo grande y contando que el jumper es largo y las medias igual no se ven mis piernas y mi cabello... ni hablar.
Salgo de mi cuarto y bajo las escaleras, en la cocina me encuentro con Lily que a verme aguanta la risa, hago un puchero.
—Oh, cariño, ven aquí—dice y me acerco, sus manos tocan mi cabello desatando mi intento de colita y dejándome suelto. Se agacha y dobla mis medias para luego remangar un poco mi holgada remera, ella sonríe satisfecha—. Lista—termina y se que no debo verme a un espejo para comprobar que ahora me veo mejor.
—Gracias, Lily—agradezco mientras beso su mejilla, ella sonríe y me tiende mi caja de almuerzo, la tomo con timidez y voy a la sala de estar en donde Harry me llama.
—Se nos hará tarde, vamos—informa tomando mi mano y observo mi mochila rosada brillante en su hombro, una sonrisa divertida pinta mis labios. Harry con traje y mochila rosada es igual a risa.
Nos subimos en un elegante auto negro—. Es un bonito auto—comento mientras me pongo el cinturón de seguridad, Harry sonríe orgulloso.
—Lo sé, es un audi—explica alegre.
—Ya veo...—digo con falso interés, sinceramente no sé mucho de autos, menos de audis... lo que sea, pero a Harry parecen gustarles por lo que simplemente sonrío.
El camino a la escuela es largo pero me deja más tiempo de observar los altos edificios y el nublado cielo. Harry habla por un aparato en la oreja y parece enojado, yo observo mi lonchera. Mi caja de almuerzo es de Bob Esponja lo que hace que arrugue mi ceño. No es que Bob Esponja no me guste, más bien, soy algo grande para una caja de almuerzo. Aunque lo entiendo, Harry no sabe nada de mí. La idea de verlo tener que elegir entre una caja de almuerzo de Bob Eponja o Scooby Doo me resulta divertida.
La escuela es grande, muy grande y más niñas con el mismo uniforme caminan tranquilamente hacia la entrada. Al parecer mi jumper no era el único largo. Una mujer de cabello rojo y ojos mieles habla animadamente con uno de los padres. Lleva un vestido más abajo de sus rodillas de color crema y su cabello recogido con múltiples horquillas para el cabello con pequeñas flores, además de que tiene una radiante sonrisa pero eso no es lo que más me llama la atención de ella.
Me acomodo la mochila, con una mano tomo mi caja de almuerzo y con la otra la mano de Harry. Caminamos hacia adentro y en vez de dirigirnos a los salones nos vamos a la oficina del director, lo sé por el pequeño cartelito al lado de la puerta. Al entrar una señora algo mayor y con ojos casi oscuros empieza a hablar con Harry, no presto atención y observo su vestimenta de monja y la cruz de madera que cuelga de su cuello. El cuarto esta rodeado de cuadros con imágenes de santos y oraciones, aprieto la mano de Harry y él me devuelve el apretón. Unas palabras proveniente de sus labios hacen que preste atención.
—Lucy Styles, once años—miro a Harry, ¿quién es Lucy Styles? Porque yo estoy segurísima de que me apellido Wexler. La monja saca de un cajón una carpeta y al abrirla asiente, la puerta se abre mostrando a la antigua mujer de cabello rojo.
—Oh, perdone. No he tocado antes de entrar, no pensé que habría... gente—dice mirando a Harry, ¿por qué lo mira tanto?
—No te preocupes, Rose. Llegas en el momento justo, ¿podrías enseñarle al señor Styles y a su hija su nueva aula?—La moja pregunta y yo parpadeo, ¿hija? Harry trata de remediarlo y decir que no es mi verdadero padre pero la tal Rose lo interrumpe.
—No hay problema, señor Harry, acompáñeme—su tono de voz cambia, sonando amable y servicial.
Salimos del cuarto al pasillo y mientras camino detrás de Rose hablo entre susurros a Harry.
—¿Por qué le dijiste que me apellido Styles...?—Mientras caminamos por la ventana veo aulas llenos de niñas, sólo niñas—. ¿Y por qué hay tantas niñas?—Él sonríe.
—Eres Lucy Styles desde antes que lleguemos aquí, y hay muchas niñas debido a que éste es un instituto de chicas—explica risueño y creo que es debido a mi reacción, mi boca esta abierta en una perfecta 'o' y no se si enojarme o pensarlo y luego reaccionar.
Me enojo.
—¿Por qué cambiaste mi apellido? Me gustaba Wexler, ay, Harry. Podrías habérmelo preguntado aunque sea—suelto su mano y me cruzo como puedo de brazos, él parece sorprendido ante mi reacción—. Además, ¿una escuela de niñas? Dios...—él suspira.
—No podía sacarte de Estados Unidos sin mi apellido y repito, ésta era la única escuela con lugar—él también se cruza de brazos y un concurso de miradas comienza.
—Emm, ya hemos llegado—avisa Rose, me había olvidado por un momento de su presencia, encima de la puerta observo un cartel sobresaliente que dice 5-B.
Como imán mi mano busca la mano de Harry quien se deshizo del cruce de brazos y me mira con diversión—. ¿Qué no te gustaba la escuela?—Bufo, claro, escuelas que no sean religiosas y en dónde también hay chicos y en dónde no llevo un ridículo jumper incómodo...
—Lucy, necesito comenzar la clase, ya me he retrasado—miro a la tal Rose, ¿por qué me dice Lucy tan confianzudamente? Por razón desconocida eso me enoja.
Asiento y Harry suelta mi mano, me lo quedo mirando y él a mi—. Nos vemos a la salida, Lucy. Cuídate—dice antes de besar mi frente a lo que cierro mis ojos—. Rose—saluda y se da la vuelta, verlo alejarse me causa una sensación fea en mi pecho.
—Momento de entrar, Lucy—ruedo los ojos y Rose me abre la puerta, antes de entrar doy un rápido vistazo a Harry que también me mira, él me sonríe, una sonrisa cálida, lástima que no le devuelvo el gesto...
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He is my daddy!
Fiksi PenggemarNos queríamos con amor prematuro, con la violencia que a menudo destruye vidas adultas.