veintiuno

6K 284 3
                                    

-¿Qué hay ahí adentro?-le preguntó Louis a Peny, completamente serio.
-Hay... cosas.-murmuró mirando el piso.-Tío, por favor...
-¿Qué cosas?-la interrumpió.
-Droga, cigarrillos, preservativos...-dijo avergonzada.
-Filos, alcohol, cartas de Peet. Cartas en las que dice que te conviene aceptar acostarte con él por las buenas. Cartas en las que tiene registrados todos los movimientos. Cartas en las que te habla de Anna. Cartas en las que dice que se acostó con Anna. Cartas en las que Anna y él quieren obligarte a formar parte de un trío, en las que te preguntan cosas sobre el miembro de tu papá. Hay cartas, Peny, que dicen muchas cosas que tendrías que habernos contado. Demasiadas.
-¿Qué querías que hiciera?-preguntó en un susurro y se dejó caer en la cama.- Yo iba a... Tío...
-Que lo dijeras, Peny. Por el amor de Dios. Eso quería, que lo dijeras.
-¿A quién? ¿A las paredes?-preguntó ella enojada.- Además, ni siquiera abrí esas cartas. Estás reatándome por cartas que no abrí.

-¿No las abriste?-preguntó bajando su tono.

-¿Por qué lo haría? Eso no tiene sentido. ¿Por qué abriría esas cartas?
-Calmate, Louis.-dijo Liam.
-Armá tus valijas. -le dijo a Peny.- Mañana vamos a irnos, no vas a quedarte acá. ¡No voy a dejarte acá!
Peny salió del cuarto y corrió fuera, hacia su casita del árbol. Subió y ocultó la cabeza entre los almohades, llorando en silencio.
-Hija.-llamó Harry.
-Solo déjenme.-pidió.
-Peny, perdón. -dijo Louis.
Ella se apresuró a atrancar la puerta. Cayó sobre sus rodillas y solo miró la pared en silencio, haciendo oídos sordos a los llamados.
Fue Zayn quien entró por la pequeña ventana y se sentó junto a ella. La chica se sentó en sus piernas y lloró suavemente.
-No me pidas que no llore.-se apresuró a decir ella.- Ya no hagan eso.
-Tenes que llorar, Peny. Dejar salir todo lo que te lastima. Llorá, preciosa. Pero no voy a irme. Voy a quedarme acá.
-¿Podrías...?¿Podrías abrazarme con fuerza? -pidió en un susurro.
-¿Hasta juntar todas las partes rotas?-preguntó él y ella asintió.- Vení acá.
Mientras ella lloraba y él la sostenía con fuerza, comenzó a calmarse. Al abrir la puerta y bajar, comenzaba a lloviznar, pero todos estaban ahí. Su padre abrió los brazos y ella corrió hacia él, enterrando el rostro en su pecho.
-¿Te sentís mejor ahora? -preguntó él.
-Si, papi.
-Vamos adentro. -dijo, alzándola.- Tenes los ojitos todos colorados, bebé. Vamos a solucionarlo todo, juntos. Estás tan flaquita, débil, triste. -le acarició el rostro.- Mi chiquita. Te amo, ¿sabes? Te amo más de lo que voy a amar a alguien en toda mi vida.
-Yo también te amo, papi.-murmuró ella.- Te amo mucho.
-No quiero dejarte ir, Peny, pero creo que deberías ir a hablar con tu tío Louis.
Ella ajustó más los brazos a su alrededor y él le besó el rostro repetidas veces, como cuando era pequeña, entonces una suave risa salió de sus labios.
-Andá. Voy a estar armando tus valijas con el tío Zayn mientras tus tíos Niall y Liam preparan la cena.
Peny caminó hasta la sala, donde Louis estaba sentado con el rostro entre las manos.
-No lo sabía. -dijo ella.-No sabía de qué hablaban las cartas
-Peny.-dijo él, levantando la cara y extendiendo sus manos para tomarla.- Perdoname, mi vida. Yo no lo sabía. Nunca lo pensé. Supongo que me alteré demasiado por el contenido. Perdón. -dijo y ella le secó las lágrimas.- Te amo.
-Yo también te amo, tío. -dijo ella con una pequeña sonrisa.- Nunca lo dudes.
-No quiero castigarte llevándote con nosotros, pero así voy a sentirme mucho más tranquilo.
-Quiero ir con ustedes. -susurró ella y lo abrazó con fuerza.
-¿De verdad queres ir? -preguntó su tío. Ella asintió y él la abrazó con más fuerza.- Te amo mucho, princesita. Vamos a pasarla muy bien.
-¿Van a quedarse con nosotros hoy? -su tío asintió y le besó la mejilla.- Vamos con papi a armar las valijas.
Subieron las escaleras con rapidez y Peny se detuvo al otro lado de la puerta.
-Quiero que te comportes como un hombre de tu edad.-dijo Zayn.- Si volves a lastimar a Peny, voy a hacerlo.
-Ella no va a abandonarme.
-Le pidió a Louis si podía quedarse con él. Un error Harry, y vas a perderla para siempre. No quiero sacarte a tu hija pero no voy a dejar que la lastimes otra vez.
Peny abrió y comenzó a tomar su ropa para guardarla. Su padre y Zayn la miraron y luego a Louis.
"Los escuchó"-dijo sin emitir sonido alguno.
Peny se detuvo en el placard y lo abrió. Todo se había ido. Corrió una de las maderas y tomó un pilón de fotografías y la mochila con la que había llegado a esa casa. Guardó todo en una de las valijas ante la mirada de su padre y tíos y refregó sus ojos a la vez que bostezaba.
-Creo que alguien tiene sueño. -dijo Zayn con algo de temor al rechazo.
Peny levantó su mano y se sentó en el suelo, recostándose sobre la valija.
-Hay olor a quemado.-murmuró arrugando la nariz.
-Creo que vamos a tener que pedir pizzas.-rió su padre y la tomó en brazos.-¿Queres pizza?
Ella asintió con suavidad y su padre sonrió. Peny lo estaba intentando.

PapiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora