Mi pequeña ladrona

21. Ultimo capítulo

Alexander y yo nos llevamos horas dando vueltas por los pasillos del hospital sin tener claro que estaba pasando en aquella habitación, no paraban de entrar y salir médicos de la habitación de Katrina y ninguno nos decía nada del estado de la chica. Me estaba empezando a poner nervioso y por cómo veía a Alexander estaba pasando por lo mismo que yo.

No sabía si sacar la pistola y ponerme a pedir respeto a base de tiros, quería que alguien nos dijera que era aquella maldita situación. Jamás en mi vida había sentido nada por alguien así, le tenía cariño a aquella pequeña chica, me había salvado la vida después de todo. Y no quería perderla otra vez de aquella forma.

Si Sam o algún medico salía de la habitación y nos decía que Katrina había muerto mataría a balazos al desgraciado de Alexander, ella no se merecía esto y mucho menos por un desengaño amoroso.

Mire de reojo a Alexander que parecía que también me estaba mirando su expresión cansada me sorprendió. ¿Realmente era el monstruo que todos creíamos? Quizás era cierto que su forma de ser era más parecida a su identidad falsa ''Henry''. Pudiera ser lógico incluso que Alexander usara esa forma dura y brusca de ser para auto protegerse, quizás con la pequeña chica se había abierto.

Sam salió de la habitación de Katrina justo con el médico, ambos estaban serios y no sabría descifrar si realmente todo había ido bien o en cambio Katrina había muerto. Ambos nos acercamos a ellos esperando una respuesta. Sam alzo la vista y nos miró.

-Katrina ha despertado, no está en su mejor estado físico pero esta despierta, creemos que ha necesitado un estímulo externo para despertar. Y ese estimulo ha sido causado por la pelea que ambos habéis tenidos. Ella quiere veros, pero tanto el medico como yo pensamos que por hoy ha recibido bastantes estímulos y que debería descansar.

-¿Descansar? Lleva meses durmiendo.-Intente abrirme paso entre el médico y san pero sentí como una mano me agarraba del hombro y tiraba de mi hasta estamparme contra la pared.

-Hagamos caso al médico, o te matare aquí mismo. Esta despierta, es lo que importa. Me quedare en la sala de espera hasta mañana, vigilare que nadie entre y cuando pueda querré hablar con ella.-Mire a Alexander y me deshice de su agarre, parecía ser que Alexander no era el monstruo que todos creíamos.

1 AÑO DESPUES

Ya hace un año que desperté del coma y la verdad es que mi año no ha sido tan movido como el anterior, nada de mafia, de identidades falsas, y de esas cosas que tanto me han hecho daño. Sigo trabajando si, sigo siendo una ladrona de alto standing, pero la verdad es que ahora estoy mucho más acompañada.

Hemos fundado una especie de ''Empresa'', todos nos dedicamos a las misiones, haciéndolas más perfectas aun, todos ayudamos. James es nuestra fuerza bruta y tiene contactos en los barrios más bajos del país. Sam sabe de medicina y cura a cada uno de nosotros cuando nos abrimos heridas, que han sido más de una vez. Harvey es el sanguinario del grupo, la mayoría de las veces tenemos que pararle los pies para que no cometa una locura, pero en los momentos de tensión él y yo hacemos una pareja de lucha perfecta. Y Alexander, que decir de Alexander.

No voy a mentir, le guarde rencor durante mucho tiempo, me costó confiar en él pero finalmente me demostró que seguía sintiendo por mí, que lo que hizo fue un acto impulsivo. Sí, me secuestro, me retuvo, me disparo y me dejo en coma, y quería matarme de forma lenta, gracias a el tengo una bonita marca de bala en mi cuerpo. Pero en los últimos meses como grupo ha demostrado que realmente es alguien leal. Muchas veces pierde los estribos pero se pelea con Harvey y parece que así los dos se quitan estrés de encima.

Alexander no soporta en cierto modo que ahora Harvey tenga un puesto igual al suyo, antes era su jefe en la mafia y creo que le cuesta no mandarle. Pero en el fondo creo que están forjando una fuerte amistad, se pican constantemente y creo que no lo hacen a malas.

Obviamente Alexander en el grupo es el hacker, además de los contactos que tiene en la mafia.

¿Qué donde entro yo en todo esto? Soy la cabeza visible, soy quien entra, coge el dinero y sale. Tengo más habilidad para moverme que ellos, me puedo esconder mejor que ellos y demás. Aunque ellos siempre están pendientes de mí en todo momento para entrar en acción por si necesitaba ayuda.

Ahora había que repartirse el botín entre cinco personas, pero no me importa, realmente me gusta pasar tiempo con estos hombres.

Aunque ahora creo que va a ser hora de que me tome unas vacaciones del trabajo. Os he contado todo esto para que sepáis porque estos cuatro hombres están hoy sentados en el sofá de mi casa, mirándome. Esperando la tan grata noticia que les había dicho que tenía que comunicarles. Estaba segura de que todos se iban a alegrar, pero en concreto uno de esos hombres.

-Venga di ya por que nos has traído aquí, dices que quieres vacaciones ¿Pero es otra misión?-Dijo Sam mientras se estiraba en el sofá, realmente era el que menos hacía, ya que se había puesto a estudiar de nuevo medicina y solo tenía que curarnos en las ocasiones en las que nos herían.

-Cállate Sam. Bueno, quería traeros aquí porque tengo que daros una noticia importante, al menos para mí y para uno de vosotros lo será, nos cambiara la vida. Y los demás espero que os haga ilusión.

-Venga ya Katrina.-Dijo James mientras se removía en el asiento, estando ya nervioso seguramente por la noticia.

-Bueno, quería deciros que estoy embarazada.-Todos se quedaron mirándome como si hubiera hablado en árabe o en algún idioma que no fuera el nuestros, todos se quedaron serios intentando apechugar lo que había dicho. De repente las miradas de Sam y de James se posaron en Harvey y en Alexander, querían saber la reacción de ambos porque era a los que más les afectaba aquella noticia.

Harvey se levantó del sillón y se acercó a mí, parándose frente a mi cuerpo a centímetros, de repente su expresión cambio, comenzó a reír mientras me abrazaba y alzaba, feliz seguramente por la noticia de que íbamos a ser padres. Si Harvey es el padre de mi futuro hijo o hija, y espero que estemos juntos durante mucho tiempo. Me abrace a su cuello mientras reía junto a él queriendo mostrar que también estaba feliz.

Cuando me bajo me mantuvo pegada a su cuerpo, con las manos en mi cintura mientras mirábamos a los demás. Alexander se levantó y finalmente le dio un suave golpe en el hombro a Harvey.

-Has tenido suerte perro.-Harvey asintió mientras ambos se miraban fijamente, yo estaba preparada por si empezaban a pelear de nuevo.

Harvey estuvo a mi lado mientras me recuperaba, yo no deje que Alexander lo estuviera por el enfado que tenía con él y pienso que es lo normal. Yo descubrí que sí, que quería a Alexander, pero no como pareja y me costó bastante aceptarlo. Sin embargo con Harvey había descubierto una nueva forma de querer, ambos nos compenetrábamos, nos peleábamos, pero aun así éramos inseparables. Nos gustaban casi las mismas cosas y si no nos adaptábamos al otro en lo que no. Era divertido estar con él, no era tan frio como parecería en un principio. Si, seguía teniendo un toque bipolar y sádico, pero una vez que te acostumbras no es tan malo. Yo diría que amo esa bipolaridad suya.

Alexander y yo habíamos recuperado la relación de amigos que teníamos, pienso que aún le costaba un poco acostumbrarse verme con Harvey, pero creo que se daba cuenta de que me veía más bien como una hermana pequeña que como una pareja.

Y bueno, esta es la historia de cómo conocí al hombre de mi vida.