A la mierda.

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Me empezó a besar como si no existiera un mañana.
Tenía miedo.
Lo admito, tenía miedo de mi propio marido, pero mi "marido" era un demonio, por lo tanto siempre tendré miedo a que se descontrole y llegue ha hacerme daño.

Mientras aquellos pensamientos rondaban por mi cabeza, Eyden seguía besandome. Una lágrima brotó de mi ojo derecho, así, tal cual, aquella iba bajando por me mejilla.

Eyden lo notó al instante. Pero prosiguió besandome.
¿Qué estaba pasando? Iba a... ¿Hacer el amor con Eyden? ¿A tan temprana edad?

En verdad... No me importaba. Era difícil pero ya no tenía solución.
Es mi marido, me casé con él.
Ya no me importaba nada.
Le quité la camiseta. Pero él se paró.

—Lena no me puedo apropiar de ti así como así.

—¿Por qué? Eres mi marido, debo complacerte.-Le exigí.

—Princesa, esto no está bien. Yo te quiero y quiero que esto funcione y aún no estás preparada para... Lo que viene después del beso. Al menos no lo estás conmigo-Prosiguió hablando.

—No es cierto-Negué.

—Sí que lo es, sabes que tengo razón-insistió.

—¿Sabes qué? ¡Que te folle tu puta madre!

Salí de aquella habitación y me fui a la terraza.
Pensé en ver a Kail, ya que a Eyden le causaría celos y envidia. ¿Por qué no jugar un poco con sus sentimientos? Ahora me tocaba a mí ser la mala.
Pero... No podía, los sentimientos en aquel instante me cegaban y solo podía sentir la rabia que había en mí.
Volví a entrar a casa, Eyden no estaba, se había ido.
Hice lo normal, me puse a leer en mi móvil mientras que veía la televisión, todo el mundo lo hace, mal gastar electricidad por puro capricho.

*Llamada entrante de Kail*

—¿Hola?-Conteste.
—Sal a fuera, te estoy viendo.
Salí en ese momento a fuera, al portal y me lo encontré con un ramo de flores en frente mía, yo estaba mirando su brazo extendido con el ramo en la mano y alce la mirada así viéndole la pequeña sonrisa que echó.

—Te has peleado con Eyden, yo estoy aquí.
En ese momento solo podía llorar, mientras que Kail era un detallista Eyden se había ido y yo... Yo estaba aquí sola y con ganas de tener a alguien el cual me abrazara y me repitiera, "todo va a salir bien"

Abracé a Kail con todas mis fuerzas, el puso las manos en mi cadera y al cuerno... Le besé, me besó, nos besamos.
Eyden se había comportado como un idiota y sabes que? Que yo me podría comportar como una hija de puta.

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⏰ Última actualización: Feb 17, 2016 ⏰

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Destinada a estar con un demonio.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora