Ahí está él, mirándome desde el otro lado del jardín, yo estoy en mi puerta con solo una larga camisa y calcetines, pero no me importa porque sus ojos penetrantes hacen que me olvide de todo. De pronto un resorte salta en mi cabeza activando mis pensamientos, lleva la ropa de invierno como es normal en estas fechas, pero la maleta no me produce una buena sensación. Me acerco corriendo para abrazarle provocando que la bolsa que llevaba colgada del hombro caiga al suelo, me envuelve entre sus brazos como si él fuera la mamá oso y yo la cría.
- Olympia, me voy a pasar las navidades a Madrid con mi familia -me tiende un pequeño paquete con un lazo rojo y acto seguido me besa de una forma pasional y a la vez tierna para poco después despeinar aún más mi pelo como despido y subirse al coche.
Genial, primero se va Karina por trabajo, luego Ele vuelve a Alemania con sus padres por las fiestas y ahora él. Pienso entrando a casa ya que me estoy empezando a helar.
Cojo mi maleta dispuesta a irme a casa de Sura para pasar las vacaciones allí ya que su madre suele estar muy ocupada y no quiere quedarse sola en su gran casa con su hermano y su padre florero, sí, tiene un padre rico mantenido por su madre que solo tiene que ir al gimnasio y quedar con sus amigos del club. Justo antes de salir por la puerta Lucas baja corriendo las escaleras con su equipaje a grito de ¡Espérame!
- Tete, por mucho que seas el tardón no te voy a dejar tirado, recuerda que conduces tú.
Llegamos a la casa de Sura, que más que casa yo llamaría caserón. El jardín delantero ya es más grande que toda mi parcela, la casa de estilo victoriano que se alza ante mí me dice que le voy a tener que pedir explicaciones. Pero la sorpresa llega al entrar donde todo está decorado muy navideño, los techos altos y la decoración de lujo en colores neutros hacen sentir relajación a la vez que te hacen sentir como una verdadera princesa. ¡No puedo esperar a ver el resto de la casa! Sura nos recibe con un cálido abrazo y dejamos las maletas en la entrada. Nos coge de las muñecas y ¡Que empiece el tour! grita.
La primera sala que vemos es el salón donde una chimenea junto a una gran alfombra y un par de sofás presiden la sala, los últimos con un color rojo que saltan a la vista. La cocina sin embargo es de colores negros, blancos y grises, todo está a la última. Junto a la gran ventana que tiene vistas al jardín hay una extensa mesa en la que cabrán sin apenas esfuerzo veinte personas.
Cuando llegamos al pie de las escaleras, simplemente nos señala lo que hay detrás de las puertas y nos conduce hacia arriba, donde abre la habitación de su hermano que está toda a oscuras y encima de la cama se distingue una sombra que contesta, Sura cierra la puerta, justo después de que su hermana diga, eso de ahí es Víctor.
Se para delante de diferentes puertas, dice lo que hay dentro y pasa a la siguiente. Deduzco que la única puerta que queda es la suya por la E gigante fucsia con purpurina clarita encima, al abrir la puerta veo una gran cama matrimonial parecida a la de una princesa acompañada por un dosel rosado, los demás muebles como las mesitas, el escritorio y la cómo daban a juego con la cama, una gran alfombra blanca de pelo largo situada al lado de la cama conduce a una gran puerta pendular y otra normal.
La primera es un vestidor de tamaño vertiginoso todo en tonos pastel con un pequeño sofá redondo en el centro, en la segunda puerta se encuentra el baño, al fondo una gran bañera hidromasaje acompaña por un ventanal translúcido con vistas a los prominentes árboles del bosque privado, a la derecha una pequeña ducha junto al inodoro, en la parte de enfrente un gran espejo predominaba sobre el resto y bajo había un largo lavabo. Wow, es lo único que puedo decir cuando volvemos a su habitación.
- Si...Es lo que tiene que tu madre sea la alcaldesa -dice mientras se encoge de hombros.
- ¿¡Que!? ¿¡Que!? -digo medio alucinando.
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Sonrisa diluida
Fiksi RemajaEl día que Olympia se enteró que tenía que dejar su ciudad fue desgarrador para ella. No sabía que era el descontrol, y lo que el alcohol y el amor eran capaces de hacerle a su mente... Al principio Olympia se notaba insegura y tímida, desconocía qu...