El Encuentro Secreto ∘ [harugou]

ᴅɪᴇᴢ

No puedo dormir. Estoy demasiado ansiosa.

Creo que fue la mejor sesión de estudio que he tenido en toda mi vida escolar. Pensé que me iba a mantener distraída por el simple hecho de que es Haru el que dictaba, pero en la realidad, había logrado terminar en menos de lo esperado, por lo cual decidimos ir a hacer otra cosa para matar el tiempo.

El recuerdo me sigue invadiendo la memoria.

−Bueno... terminamos− dijo él estirándose.

−Sí...− murmuré, −Muchas gracias por la ayuda, Haruka-senpai.

Él mantuvo su mirada distante, −¿Te parece si hacemos algo?

Levanté una ceja, −¿Cómo qué?

Él miró su reloj en la mano, −Son las ocho y media. Tengo una idea.

−¿Cuál?

Me miró con una media sonrisa, −Acompáñame.

Me sentí algo aturdida con la respuesta. Llegué a la conclusión de que Haru quería que confiara en él, ya que soy consiente de que probablemente no va a decirme a dónde vamos. Sin embargo, sólo la idea me emocionaba.

Se puso de pie y me ofreció su mano, la tomé con confianza total, y a penas lo hice, me llevó hasta la salida. Al salir de su casa, empezó a correr.

Solté una carcajada, −¡E-Espera! ¡Haruka-senpai!

−¡Se hará más tarde si no nos damos prisa!

Me dolía el estómago de tanto reírme. No sabía por qué lo estaba haciendo de forma exagerada, supongo que estaba sintiendo una alegría extrema... era una sensación muy agradable.

Mis mejillas se habían puesto rojas al darme cuenta que seguía sosteniendo mi mano. Miré como nuestros dedos estaban entrelazados y en reacción mi corazón dio un vuelco. Encajaban perfectamente...

Al volver a la realidad, me di cuenta que estábamos frente al mar. La noche estrellada hacía juego con el agua transparente, era una vista hermosa.

−Makoto y yo solemos pasar por aquí cuando vamos a la escuela− soltó.

−Es muy bonito− comenté sin poder quitar mi vista.

Él soltó una risita, −Otra vez esos comentarios... no tenía idea que fueras tan cursi.

−¡¿Ehh?!− exclamé mirándolo.

Acabo de sonar como Nagisa.

Me miró de vuelta, −Está bien... me gusta, de hecho.

El corazón me empezó a latir mucho más rápido que de costumbre. Creí que se me iba a parar en cualquier momento.

−En fin...− continuó, aparentemente un poco apenado por el comentario, −A lo que vinimos.

−¿No vinimos para mirar el mar?− pregunté algo confusa.

Noté como se quitó su camisa, −No, eso hubiera sido muy aburrido, ¿no crees?

Levanté una ceja, −Entonces, ¿qué piensas hacer?

Se quitó el pantalón, mostrando su común traje de baño negro con líneas púrpuras. Luego, unió nuestras miradas y sonrió pícaramente.

−Lo siento por adelantado, Señorita Matsouka.

Mi ceño se frunció, −¿Eh-?− musité antes de ser interrumpida por Haru cargándome.

Grité al ver como entraba sus pies al agua, todavía conmigo en brazos. Comencé a pegarle en el pecho para que me soltara, puesto que al tener un hermano mayor ya sé hacia dónde va esto.