16.Sonrisas y lágrimas

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Despertarse cada mañana rodeada de tanta calidez era el mayor deseo de Asuna,aún cuando,por el momento,era imposible.Sin embargo,algún día,no muy lejano si Dios se lo permitía,estaba segura que iba a ser una realidad.

Abrió los ojos muy despacio,encontrando el rostro dormido de Kazuto muy cerca suya.En cualquier otra situación,hubiera saltado lejos,muerta de vergüenza,pero,ahora,lo único que le apetecía era observarle durante un rato antes de que despertara.

Mucho tiempo había pasado desde la última vez que habían podido pasar juntos la noche,despertar juntos,como tiempo atrás en su inolvidable luna de miel.Para Asuna,aunque pensara que para Kazuto no había sido de tanta importancia,ese tiempo había sido un tiempo muy valioso que había significado mucho más que cualquier otra cosa en toda su vida.

Se dejó abrazar tranquilamente,sin tener ninguna intención de levantarse todavía.

Y así,de quedó dormida de nuevo,deseando estar así durante toda la eternidad,aún cuando sabía que tenía mucho que hacer antes de que ese momento llegara,momento en el que ambos estuvieran unidos para siempre.

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Pasados unos cuantos minutos más,él regresó del mundo de los sueños tras soñar con su amada,de nuevo en su adorada,casados y unidos para siempre.Si pudiera desear algo,estaba seguro de que el único deseo que pasaría por su mente sería vivir una vida feliz al lado de la pelirroja que acababa de descubrir entre sus brazos.

Aunque en ese momento sólo había sido un sueño,estaba seguro de que,en un futuro no muy lejano,sería una realidad.Estaba decidido,y nadie podría interponerse.

Pasó los dedos por el largo cabello mandarina que caía con gracia por la espalda de Asuna,mientras que varios mechones descansaban a ambos lados de su cara,cubriendola ligeramente.

Paseó su mano por su frente,liberándola de su largo flequillo por un momento para poder aplastar sus labios contra ella.
Era en días como estos en los que se arrepentía de no haber hecho ese tipo de gestos cariñosos más a menudo en aquellas dos semanas.

--Asuna...Asuna...vamos,despierta--susurró suavemente,viendo como comenzaba a reaccionar poco a poco,hasta que pudo ver esos intensos orbes avellana que le habían enamorado--Buenos días,bella durmiente.

Asuna soltó un suave bostezo que no llegó a pode tapar con la mano,por lo que,al darse cuenta de que los ojos negros de Kazuto estaban posados sobre ella,enrojeció hasta las orejas.

--P-Perdón...--murmuró mientras subía la sabana hasta su nariz.Kazuto rió abiertamente,haciendo que Asuna se sintiera aún más tonta.

--No recordaba como era verte despertar,lo echaba de menos.Aunque es diferente en un VRMMO,es un importante avance--besó nuevamente la frente de Asuna y se quedó observando a la avergonzada muchacha que todavía no se atrevía a mirarle a la cara.

--Si...es distinto,creo que muy pocas veces hemos despertado juntos en la realidad¿no?de hecho...creo que sólo fue una vez.

--Si,cuando despertamos en el hospital cuando regresaste de ALO.

--Hace más de un año ya eeh...--recordó con mucha nostalgia.Quien hubiera pensado que ese año que pasaron juntos pasaría tan rápido y esos seis meses separados tan lentos.

--Echo de menos aquellos días...hubiera sido genial poder seguir un tiempo más en ese lugar.

--Eso fue culpa tuya--puso un puchero,fingiendo estar enfadada--acabaste el juego antes de que pudiéramos regresar a la cabaña como te dije.Siempre haces las cosas sin pensar,idiota.

aléjateDonde viven las historias. Descúbrelo ahora