SEGUNDA PARTE

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Capítulo 1 

Habían pasado ya dos meses, mis notas habían subido, los chicos en la escuela poco a poco se fueron aburriendo del video de la pelea y finalmente me dejaron en paz.

Olivia y yo nos reuníamos cada sábado en la biblioteca con Nicolas para estudiar y hacer tareas; con Blake las cosas iban mejorando, existían momentos incómodos por supuesto, pero Olivia estaba ahí siempre para aliviar la tensión. Él se había comportado como siempre lo había hecho conmigo: de maravilla; aunque sabía que aún tenía la esperanza de tener algo conmigo, nunca me presionó.

Respecto a Alex... esa era otra historia, lo veía en clases obviamente pero siempre lo ignoraba, a veces lo atrapaba mirándome y simplemente desviaba la vista a otro lado; fue difícil verlo coqueteando con otras chicas, pero siempre tenía en la mente que eso no importaba y que tenía que sacármelo de la mente y de mi estúpido corazón (oh si, ya había aceptado que ese imbécil se había colado dentro de él).

Alexander y la arpía rubia casi siempre estaban juntos, solo cuando Brittany no estaba con su "flamante" novio Brant con el que Alex parecía llevarse de maravilla; era gracioso que ninguno de ellos recordara lo que sucedió en mi casa, supuse que decidieron que ese insignificante problema no impediría su gran amistad.

No entendía que es lo que Alex estaba haciendo, siempre lo sentía ahí, cerca de mi como esperando algo y a la vez lo notaba tan distante y frio; detestaba notar tanto sus actitudes y acciones, era como si estuviera programada para inconscientemente notar todo lo que hacía. Me sentía como un robot con un rayo detector de movimiento-Alexanderniano.

Por otro lado, las cosas con Olivia estaban más que perfectas, ella estaba muy entusiasmada con Nicolas que por su lado... no parecía notar a la llama de fuego roja que se sentaba a su lado todos los días. Yo hacia mi trabajo como amiga apoyando a Olivia cada vez que se sentía triste por la indiferencia de Nicolas; es decir, ella no se lanzó sobre él y le dijo: te amo, cabalguemos hacia el amanecer. No, ella estaba siendo su amiga primero, pero el muy tonto ni siquiera parecía preocupado por su amistad.

Luego estaba mi mamá que se encontraba... bien, había días en los que la escuchaba llorando en su habitación, pero cuando la noche caía, salía de ella en un bello vestido luciendo como una estrella de cine, sonriendo y corriendo por todos lados buscando sus pendientes para luego salir entusiasmada al encuentro de Mark. Y sí, yo le había contado a mi madre lo que había sucedido con Alex y su padre y ella no reacciono de la manera en la que imagine, ella me dijo que todo padre tiene sus métodos y que a veces hay que implementar mano dura para corregir a los hijos; no le dije que eso era pura basura, pero si le exprese claramente que Mark no me agradaba y le pedí que tuviera mucho cuidado.

Grace era más rara cada día, se encerraba en su habitación o en el baño, no iba a la escuela porque se quedaba dormida, lo único que la veía hacer era ir por comida y subir a su habitación sin decir palabra; mi mamá pensaba que ella estaba deprimida, yo pensaba que solo trataba de llamar la atención.

Era sábado en la tarde, me encontraba con Olivia y Nicolas en la biblioteca, faltaba poco tiempo para que terminemos cuando Olivia se levantó de su asiento y me susurro que iría al baño.

Me concentré de nuevo en mi tarea cuando escuche a Nicolas aclarándose la voy obviamente pidiendo mi atención.

- ¿Qué sucede? - pregunté

-Bueno, quería aprovechar este momento a solas para invitarte a salir- Me tomó totalmente desprevenida.

-Ah...- no sabía cómo decirle que no en tan poco tiempo sin parecer una perra, porque sabía que Olivia llegaría en cualquier momento... y así fue. Pronto la vi saliendo del baño, miré una vez más a Nicolas y regresé a mi libro.

Estupidamente EnamoradaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora