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Louis:

Maldito inicio de semana. Aparte de tener que soportar a mi maldito nuevo vecino (que tiempo después descubrí que se llamaba Harry Styles por mi madre) empecé con mi maldito celo que este día no había comenzado para nada normal con tan solo decir que al estar desayunando me empezó a dar un calor horrible.

- ¿Louis? ¿Estas bien?-. Mi madre me veía algo asustada.

- Sí... es solo... mi celo...-. Pude sentir como mi entrada empezaba a lubricar.

- Sube a tu cuarto ahora mismo-. Asentí y corrí escaleras arriba para ir directo a mi habitación-. Iré a por tus pastillas que ya no quedaron y como estarás solo le llamé a Harry si podía cuidarte-. Solo asentía pero al escuchar que iba por mis pastillas me quedé quieto.

- Pero... te tardarás casi... tres horas en... llegar allá-. Mi respiración empezaba a ser algo pesada ante la tensión y cada vez estaba más lubricado.

- Lo siento hijo, en seguida vuelvo-. Y salió, dejándome con mi dildo.

- Es tu turno-. Y empecé a introducirlo haciéndome gemir.

Harry:

¿Qué hacia yo en estos momentos hablando con la mamá de Louis? No tengo ni idea del cómo termine en esta situación y de lo único que me entere era que tenía que cuidad a su hijo.

- Gracias por encargarte de Louis y perdón si te moleste pero no hay nadie en casa y no quiero dejarlo solo.

- No tiene de que preocuparse señora, yo le cuido-. Sonreí y entre dejando a la señora Tomlinson en su auto. Lo primero que me encontré al entrar fue como escuchar unos pequeños gemidos que de inmediato identifique como de Louis-. ¿Pero qué..?-. Subí para ver lo que sucedía y al abrir la puerta de la habitación del pequeño castaño. Lo que vi me provocó una erección demasiado rápido y grande. Louis estaba acostado completamente desnudo con un dildo rosado en su trasero que se encontraba lleno de su lubricante natural y sus hormonas se podían oler desde lejos haciéndome sonreír por ese exquisito aroma a vainilla que desprendía.

- Ah...-. Louis empezó a gemir cuando sacaba el dildo de su entrada y de inmediato mi alfa empezó a gemir pidiendo ser él que entrara en ese hermoso culo.

- Louis...-. Susurré y pude ver como se quedaba quieto ante mi voz.

- Alfa...-. Su voz se escucho más aguda de lo normal-. Por favor...-. Y no lo pensé dos veces cuando ya estaba con Louis besándolo con desespero y deseo.

Poco a poco fui quitándome la ropa hasta quedar con un simple boxer peor yo me la pasaba jugando con el juguete de Louis que seguía en su culo.

- Al... fa-. Su voz empezaba a sonar ronca, con aquello había llegado a mi punto para quitar mi bóxer de un rasguño y con ello quitar el juguete, pude escuchar un jadeo por su parte y de inmediato posicione mi erección en su hermosa y redonda entrada que excurria.

- No debiste meterte con el alfa Lou-. Susurré y entré de golpe en él haciéndolo gemir muy alto.

- Ha... rry-. Pude sentir como sus paredes me apretaban haciendo que gimiera, maldito Louis y su sensual culo-. Me... voy a... correr-. Seguía dando embestidas rápidas y sentí como Louis se corría entre nuestros abdómenes pero de inmediato su dirección se volvió a endurecer haciendo que mi nudo empezara a crecer también.

- Ya casi Louis-. Y así llené por completo al castaño de mi semilla. De inmediato intenté separarme pero Louis me agarró de los hombros impidiéndome salir de él-. ¿Qué...?

- Ni se te ocurra dejarme así Styles-. Bueno, y así terminamos haciéndolo por lo menos dos veces más.

Louis:

Desperté más relajado después de haber hecho eso con Harry... Espera ¿HARRY?.
Salí de la cama buscando mi ropa para bajar y encontrarme a un Harry cocinando con un bóxer y una camisa mía.

- ¿Harry?-. Le llamé.

- Oh, hola Louis-. El chico se veía demasiado feliz como para estar en mi casa-. Espero que estés mejor.

- No entiendo como es que estas en mi casa-. Me senté en frente de él para ver como me daba un plato de pancakes.

- Debo decir que tu mamá me dejó a cargo de ti-. Él estaba empezando a comer.

- ¿Mi mamá te dejo a cargo de mí? Pero que madre tan responsable, dejando a su hijo omega en celo con un alfa que lo violó-. De inmediato Harry escupió un pedazo de comida.

- Yo no te viole-. Justificó alzando una ceja.

- ¿A no? Entonces ¿cómo me explicas el por qué me duele el culo y tú estas con una de mi camisas? Que por cierto te quedan pequeñas-. Yo también me sabia defender.

- Ah no, yo simplemente te quité un problema de encima-. Y sonrió, malditos dientes perfectos que tenia.

- ¡Yo puedo arreglarme solo mi problema! No es la primera vez que tengo un celo-. Me cabree hasta que sentí un leve pinchazo en mi vientre haciéndome soltar un jadeo.

- ¿Estas bien Louis?-. Harry se le veía con cara de preocupación.

- Sí... solo fue algo leve-. Me relaje y seguí comiendo, que sensación tan extraña.

*-*-*-*-*-*-*-*-*-*

- Bueno, espero y tu mamá no tarde mucho-. No sabia como habíamos terminado sentados en mi sofá viendo televisión con palomitas.

- Son tres horas de ida y tres de regreso más el tiempo que se tarde en comprarme todo-. Seguí bebiendo de mi jugo de manzana.

- ¿Qué cosas te comprara?.

- Mis suprisores, se me acabaron justo ayer en la mañana-. Hice una mueca de disgusto ante eso.

- ¿No tomaste supresores?-. Ahora sí parecía asustado.

- No y dejaré en claro que no eres mi alfa-. Sonreí y el rodó los ojos.

- Ya lo veremos pequeño omega, ya lo veremos.

Dos horas después entró mi madre diciéndole a Harry que ya se podía retirar y en la noche volví a mi habitación más relajado y bueno, sólo tuve que estar en cama dos días más hasta que mi celo pasara sin supresores.

No te metas con el alfa | Larry Stylinson.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora