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Harry:

Al día siguiente tuvimos que ir a la escuela y eso significaba tener que hablar con el rubio por haberle preguntado cual era el sitio favorito de Tomlinson.

- ¡Styles!-. Escuché el fuerte grito del rubio detrás de mí y a mi lado Zayn me veía algo extrañado.

- ¿No le dijiste?-. Negué y ahí fue donde Niall llegó a darme una buena cachetada.

- ¡Eres un idiota Styles! Tú eres como todos los alfas sin cabeza que cuando encuentran a un pobre omega en celo no logran controlar sus estúpidas hormonas-. Niall parecía que le quería explotar la cabeza de lo enojado que se encontraba.

- Oye, no es mi culpa que su mamá me haya dejado con él en el momento de su celo-. Yo seguía sobando mi mejilla.

- Bueno, en eso no te lo puedo negar pero por lo menos hubieras tranquilizado un poco tus hormonas-. Detrás de él venía Liam demasiado feliz.

- ¿Me vas a golpear?-. Pregunté a Liam.

- No, con Niall tienes suficiente-. Y se encogió de hombros.

- ¿Me podrás ayudar a encontrar Louis? Necesito encontrarlo-. Niall me veía con cara de estar en broma.

- Ni siquiera sus padres saben donde se encuentran ¿Y crees que después de mi descubrimiento te ayudaré? Eres un idiota rizos.

- Eres su mejor amigo, por favor, él tiene que tener mucho cuidado en su estado y tengo miedo-. Pude ver como Zayn arrugaba su nariz ante el aroma que mi cuerpo desprendía. Temor.

- No es normal que un alfa tenga miedo amigo, será mejor que intentes tranquilizarte-. Zayn puso una mano en mi hombro en señal de apoyo y suspire.

- Veo que si estas preocupado por él, después de clases te veré en la entrada para intentar ir a verle-. Y salió rumbo a sus clases dejandome algo confundido.

Las horas pasaban demasiado lentas para mí y mi ansiedad de querer ir a ver a Louis, la maldita pregunta de saber cómo se encontraban me carcomina el cerebro y yo simplemente no podía hacer nada o por lo menos todavía no. Terminando la última hora salí rumbo a mi auto y ahí estaba el rubio recargado.

- ¿Cómo es que saliste tan rápido?-. Pregunté estando a su lado.

- Mi maestro no se presentó y nos dejaron salir pero cómo no podía irme a mi hogar por tener que esperarte me quedé aquí en tu auto-. Respondió y entró al auto.

Durante el trayecto al sitio yo me mantenía con la cabeza ocupada en el chico castaño y el cómo sería con su pequeña barriguita aunque apenia tuviese unos días.

- Es aquí-. Señaló Niall a una pequeña cabaña en donde se podían ver unas luces encendidas.

- ¿Estás seguro que es aquí?-. Pregunté algo confundido.

- Éste es el único lugar que yo recuerde al que él venga-. De sus bolsillos sacó una pequeña llave-. Me la dio un día que estaba mal y sólo quería verme a mí.

Salimos del auto y nos dirigimos a la puerta, Niall abrió la puerta y una cálida sensación y un dulce olor a omega llegó a mi nariz.

- ¿Louis?-. Habló alto Niall y pudimos escuchar unos pasos hasta ver la cabellera del castaño.

- ¿Qué hacen ustedes dos aquí?-. Sus ojos se abrieron sorprendido y yo sólo pude verle con deseo.

- ¡Enano!-. Niall corrió hasta él y lo envolvió en sus brazos y Louis de inmediato puso una mano en su pequeño vientre que al parecer ya empezaba a ser un poco notorio-. Y por cierto, felicidades idiota.

- Perdón rubia, pero no quería que me vieran mal por quedar embarazado sin tener un alfa-. Al escuchar lo ultimo miré sus ojos y tenia rabia pero a la vez temor.

- Lo sé, éste idiota me dijo que quería saber en donde te encontrabas pero ni siquiera sabía que estabas esperando a un pequeñin-. Niall le vio y él asintió dejándole tocar su estómago.

- Louis, ¿Puedo hablar contigo?-. Mis nervios empezaban a notarse y sólo era el inicio.

Louis:

El ver a Harry y a Niall en la cabaña hizo que me temblar y el pensar que Harry me encontró cuando en realidad quería esconderme de él hizo que temiera por el bebé.

- ¿Qué quieres Harry?-. Él me veía triste pero no me dejaría caer.

- ¿Podemos hablar a escondidas? Por favor-. Suspire y asentó dejando a Niall en el sofá.

- ¿Qué planeas ahora Harry?-. Decidimos salir a la parte trasera aunque prácticamente todo el jardín era alrededor.

- Quiero estar contigo y el bebé Louis-. Soltó de la nada haciéndome reír.

- Claro, ahora vienes a pedir a tu hijo ¿verdad? No te dejaré acercarte-. Sobé el pequeño bulto que tenia.

- Por favor, quiero estar aquí contigo-. Sus ojos desprendían suplica pero no quería hacerme ver débil ni frágil.

- Por favor Louis, sólo pido poder estar con ustedes dos-. Sus ojos empezaron a cristalizarse y yo solo negué. Puede que sea el padre del bebé pero no quiero que esté aquí solo por ello.

- Después hablamos de eso, vamos con Niall.

Unas dos horas después de platicar y de ver como Harry intentaba acercarse a mí y como Niall se volvía loco por ver mi pequeña barriga por fin se habían retirado para dejarme descansar pero con la condición de no decirle a nadie donde me encontraba.
Me senté en la cama y me quité la camiseta sobando a ese pequeño ser que crecía adentro.

- Puede que la gente nos llegue a ver mal pero no me importa, tú serás mi futuro-. Volví a colocarmela y me quedé dormido al instante.

Harry:

De regreso a casa Niall se veía más contento pero yo seguía teniendo la preocupación en la cabeza así que me prometí el volver a verle aunque sea en las noches. La llave se la había pedido a Niall y él gustoso aceptó. No pienso perderme el crecimiento de mi hijo.

A las once de la noche salí lo más silencioso posible para no despertar a mi madre ni mi a hermana. Llegué al auto y salí rápidamente de allí para llegar a su casa, abrí despacio y subí las escaleras y la vista que me encontré fue lo mejor. Louis estaba dormido hecho un ovillo y con una mano en su estómago, me acerqué y lo acomode en el sitio para que no se sintiera mal al día siguiente aunque de seguro él estaría acostumbrado.

- Te ves muy tierno así enano-. Coloqué un mechón de su cabello y le puse las colchas encima ya que hacia un poco de frío-. Cuida bien de él hasta que seas capaz de permitirme verles-. Besé su barriga y salí de allí. Esta noche seria inolvidable.

No te metas con el alfa | Larry Stylinson.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora