*Narra Vero*
A la mañana siguiente nos despertamos todas allá a las 10 debido a un WhatsApp en el grupo que teníamos con los chicos.
*WhatsApp*
Dani: ¡Chicas! Despertar que ya es hora y bajar a la piscina con nosotros. Ya estamos aquí esperándoos.
Nos cambiamos y nos pusimos los bikinis y preparamos las toallas. Después bajamos las tres a desayunar y ya subimos a por las toallas y bajamos a la piscina.
Al llegar a la piscina, ahí estaban los cinco ya en bañador. Algunos por el césped y otros por el agua. No pude evitar fijarme en Carlos, y a la vez, como Aza tenía la vista clavada en… ¿Carlos? Joder, miraba a todos, pero en especial a Carlos y Álvaro, y claro, los dos le devolvían las miradas. Y Nazaret tenía la vista fija en David, aunque Blas también la miraba a ella.
Las tres nos acercamos al césped donde estaban Blas y Dani y empezamos a hablar con ellos, aunque estaba un poco triste porque esas miraditas entre Carlos y Aza no me acababan de gustar.
*Narra Nazaret*
Empezamos a hablar con Dani y Blas y al poco salieron Carlos, David y Álvaro del agua. Nos dijeron de entrar al agua, pero creo que a ninguna nos apetecía en esa momento, entonces vimos como se ponían a hablar entre ellos. Nosotras no les hicimos caso y empezamos a hablar entre nosotras.
Cuando nos quisimos dar cuenta, estaban los cinco rodeándonos y entre todos empezaron a cogernos y nos tiraron al agua con ropa incluida. Entre Dani y Carlos consiguieron tirar a Vero, Álvaro se encargó de Aza y a mí me cogieron entre Blas y David.
Nazaret: ¡Os voy a matar!
Azahara: Ya veremos quién ríe último.
Vero: ¡Os vais a cagar!
Nos pusimos a hablar entre nosotras y salimos corriendo detrás de los chicos, cada una detrás de quien le había tirado. Estaba en un sueño, me encontraba persiguiendo a Blas y David, a mis ídolos. Se pusieron a correr por la parte trasera del hotel, así que les seguí por allí. Vero vi como perseguía a Carlos y a Dani por la sala de juegos del hotel, mientras que a Aza le había perdido la pista persiguiendo a Álvaro por el césped, alrededor de la piscina.
Me costó un rato, pero al final conseguí que Blas y David se cansaran y acabamos sentados en la recepción del hotel hablando los tres. Y al rato ya iríamos hacía la piscina de nuevo.
*Narra Vero*
Estaba persiguiendo a Carlos y Dani por toda la sala de juegos hasta que conseguí pillar a Carlos, y ahí nos encontrábamos el uno frente al otro, a penas a milímetros, pero entonces Dani apareció por medio y nos empujo a los dos. Carlos y yo nos miramos y decidimos salir corriendo los dos detrás de Dani. Después de unos cinco minutos corriendo conseguimos atraparlo. Ese chico nunca se cansaba. Después decidimos echarnos una partidita al futbolín. Cuando acabaríamos ya iríamos a la piscina.
*Narra Azahara*
Me puse a perseguir a Álvaro por toda la piscina entre risas y miradas desafiantes para picarnos aún más. Iba persiguiéndolo y estaba a punto de atraparlo cuando me resbalé porque el suelo estaba mojado de la piscina con tan mala suerte que caí de cruces contra el suelo y me golpeé la cabeza. Estaba mareada, pero pude ver como Álvaro se acercó corriendo hacia mí.
Álvaro: ¡Madre mía! ¿Estás bien?
Azahara: Esto emm… sí, creo.
Álvaro: Menuda ostia te has dado. Que susto joder.
Azahara: Anda, ayúdame a levantarme porfa.
Álvaro: Claro, ven.
Álvaro me tendió la mano para ayudarme, me fui a levantar y al apoyar el tobillo me di cuenta del daño que me había hecho.
Azahara: ¡Ah!
Álvaro: ¿Qué te pasa?
Azahara: Mi tobillo.
Álvaro: Será mejor que te lleve al médico. Además del golpe en la cabeza estás sangrando.
Azahara: Lo siento.
Álvaro: ¿Tú? Lo siento yo, ha sido culpa mía.
Azahara: No te preocupes, estábamos jugando.
Después de eso me cogió a brazos y me llevó a la recepción del hotel. Allí nos encontramos con Nazaret, Blas y David.
