El sonido estruendoso de un celular despertó a los dos detectives. Sherlock abrió los ojos y al ver que Anna estaba aún sobre su hombro saltó gritando y mandó a la detective lejos, él terminó en el piso de sentón.
─ ¡Dios!─ se quejó Anna buscando entre la cama su celular, pero era el de Sherlock el que sonaba. El detective lo alcanzó debajo de la cama a donde había ido a parar y contestó.
─ ¡Bueno!
─ ¿Sherlock? ¿Por qué suenas como si hubieses corrido un maratón?
─Cosa que no te importa, Graham, ¿qué pasa?
─ ¡Gregory, maldición!─ Lestrade tomó un respiro ─Voy a pasar por ti en media hora para el interrogatorio a Mrs. Hyde ¿De acuerdo? Avísale a Daniels que le llevo los dibujos que pidió.
─Ok, yo le digo.─ el detective se levantó del piso y guardó su celular en su saco. Anna lo miró con una ceja arriba, Sherlock notó su nerviosismo y lo incómodo que había resultado la situación anterior para ambos, así que se aclaró la garganta, se arregló el saco y salió de la habitación. Anna se quedó mirándose los nudillos. Cuando el detective volvió ya estaba más animado. ─Lestrade vendrá en media hora, te traerá los dibujos del pequeño asesino y a mí me llevará con Mrs. Hyde.
─Genial.─ sonrió Anna.
─ ¿Tienes hambre?─ preguntó Sherlock como quien no quiere la cosa. Anna le miró por un segundo y negó. ─Ah, qué bueno, pensé que podíamos bajar a Speedy's y comer algo, ya sabes... En lo que viene Graham, pero no tienes hambre, mejor ¿Sabes? Comer es algo tonto...
─Ya cambié de opinión, tengo antojo de un sándwich...
─ ¡Genial! Iré por mi abrigo.─ el detective salió de la habitación y Anna sonrió por la pronta ilusión que le había hecho que Sherlock la invitara a comer, de una manera no muy romántica, pero la había invitado. ¿Eso significaba algo? ¿O sólo eran imaginaciones suyas? Se recostó y cerró los ojos sonriendo aún. ─ ¡No lo puedo creer! ¿Ya te volviste a dormir? ¡Tú pareces foca, te la vives durmiendo!─ reclamó Sherlock apareciendo por la puerta, Anna abrió los ojos de golpe y se sentó riendo.
─No me dormí sólo estaba pensando....
─ ¿Tú piensas?─ se burló Sherlock, Anna le aventó una almohada y el detective la esquivó riendo. ─Bueno, vámonos...─ Anna asintió sonriendo y se arrastró hasta su silla de ruedas al pie de la cama, se sentó y Sherlock la empujó hasta las escaleras, de nuevo aventó su silla provocando que la señora Hudson apareciera por el rellano con uno de sus ganchos de tejer en alto.
─ ¡¿Qué pasó?!─ gritó la casera.
─ ¡Somos nosotros, señora Hudson!─ gritó Anna. La casera bajó su gancho y miró ceñuda a sus inquilinos.
─Un día de estos me van a matar de un susto, ¿a dónde van?
─Vamos a comer...─ dijo Sherlock bajando con Anna en brazos, la puso en su silla de ruedas y la señora Hudson levantó una ceja.
─ ¿A comer?
─Sí, Sherlock lo propuso.─ aclaró la detective.
─Sherlock, ¿te sientes bien, querido?─ preguntó la señora Hudson contrariada.
─ ¿Qué preguntas son esas Hudders? ¡Estoy más que bien!─ Anna se sonrojó un poco y abrió la puerta para empujarse fuera, Sherlock la siguió. La señora Hudson se quedó confundida, y queriendo respuestas le marcó a John.
─ ¿Señora Hudson, está bien?
─John, cariño, ¿qué le pasa a Sherlock?
─ ¿Por qué lo dice, qué pasó?
ESTÁS LEYENDO
Rivales [Fanfic de Sherlock BBC]
FanfictionEnviada desde Norte América a Inglaterra, Anna Daniels se tendrá que enfrentar al duro carácter de Sherlock Holmes. Ambos tratarán de no matarse entre ellos. ¿Podrán? ><><><><><><><><><><...