"¡Ya cuéntanos!, ¡No la hagas de emoción!, ¡Desembucha!"
Y ahí estaban como una de tantas noches conversando por teléfono con los demás miembros. Leo tenía el celular en mano y se carcajeaba a lo bajo al escuchar las voces expectantes de los chicos y la forma en cómo se peleaban por tener el control absoluto del teléfono.
-¡Dame esa cosa! -grito Ravi, que intentaba por todos los medios arrebatarle el celular a su novio.
-¡No amor! yo soy el líder y me vas a obedecer -frunció el ceño y elevo su mano.
-¡Ups! ¡Lo tengo! -Hongbin aprovecho el movimiento del brazo del moreno, y tomo el celular de los frágiles dedos de N.
-¡Oye ven acá! -El líder se levanto del sillón y comenzó a perseguir al castaño, que había corrido rumbo a la cocina.
-¡Ya Leo! Dime qué es eso tan importante que debes decirnos. El área está despejada -exclamo Hongbin, mientras se ocultaba tras una silla del comedor.
Los vocalistas fruncieron el ceño y se miraron entre sí. Al parecer se estaba suscitando una batalla campal en aquel departamento. El líder por fin pudo atrapar a Hongbin y lo jalo de su suave y castaño cabello hasta regresar a la sala. Tenía el ceño fruncido y las mejillas infladas. Se encontraba muy molesto. El pequeño lo sentó de nuevo a su lado y lo abrazo de la cintura. Le acaricio de forma delicada su cabellera y lo miro a los ojos.
-Tienes que calmar tu temperamento. Debes respetar a N -negó con la cabeza.
-¡Pero es que es muy egoísta Hyuk! -se cruzo de brazos y mantuvo el ceño fruncido.
-Qué más da quien tenga el teléfono. Lo que verdaderamente importa es saber que noticias nos tiene Leo -Hongbin suspiro y coloco su cabeza en el hombro del pequeño. Al parecer ya había aceptado la situación. Hyuk siempre lograba tranquilizarlo. No importaba cual fuera el problema.
-Woow. Me sorprende escuchar hablar así a nuestro pequeño -dijo Ken. Después de haber escuchado el alboroto que se traían N y Hongbin -. Creo que en nuestra ausencia Hyuk ha madurado mucho.
-Tengo mis momentos Ken -respondió alegre.
-¡Bueno ya!, se están desviando del tema principal -dijo N molesto. Aun estaba aturdido por lo de hace segundos -. Por lo que más quieran, ¡Ya hablen!
Los vocalistas rieron ante esa voz suplicante, y decidieron terminar con ese suspenso.
-Ken y yo... ¡Ya somos novios! -exclamó emocionado.
Un silencio abrumador se poso del otro lado del teléfono. No se escuchaba nada, ni las respiraciones de los miembros. Los vocalistas se miraron alarmados y acercaron el celular a sus oídos.
-¿Siguen ahí? ¿Qué sucede? -pregunto Ken.
Justo después de pronunciar eso. Se escucharon gritos de emoción del otro lado. Los vocalistas alejaron el teléfono de sus oídos y cerraron los ojos. Se habían aturdido con el escándalo.
-¡Felicidades! -chillo N -. No imagino lo tiernos que son juntos.
-¡Lo hiciste Ken! ¡Leo es tuyo! -grito Hyuk.
-¡Ya se estaban tardando! -menciono Ravi.
-Me alegra saber que ya no lloraras por Ken como lo hacías cada noche -dijo Hongbin con un tono burlón.
El pequeño giro su rostro de inmediato, y le lanzo un golpe certero justo en la cabeza. El castaño chillo y se sobo con la mano.
-¡¿Por qué me pegas?! -lo observo con rabia.
-Dudo que Leo quiera recordar esos momentos -el pequeño negó con la cabeza.
-¡Ya bueno! Lo siento -hizo puchero.
-No te preocupes Hongbin. Esas cosas siempre sirven de aprendizaje -menciono Leo.
-Ahora Leo y yo lucharemos por nuestro amor en contra del manager y cualquiera que se interponga -dijo Ken.
-Y hablando del manager... -interrumpió N. Su voz tenía un ligero tono de preocupación.
-¡¿Les hizo algo?! -exclamó Leo.
-No. Tranquilízate. Solo que hoy regresamos a los ensayos, y Jaeseop fue presentado como el nuevo miembro de VIXX.
El corazón de los vocalistas se paralizo, y un creciente dolor les invadió todo el pecho. Dolía aceptar que cada vez estaban más fuera del grupo. No era fácil asimilar que el manager no contaba con ellos para los futuros planes. Les preocupaba el saber que ese viejo aun tenía en sus manos a los chicos. Nada estaba solucionado, y cada vez parecía más lejano su encuentro. Anhelaban ver los rostros de sus amigos. Abrazarlos y decirles cuantos significaban para ellos. Molestarse por pequeñeces sin sentido. Reír en los ensayos, comer juntos. Ahora todos los recuerdos caían en forma de cascada por sus mentes y les llenaban el alma.
-Ese maldito de Kim Jaeseop. Tengan mucho cuidado con él -dijo Leo.
-Recuerden las cosas horribles que hizo. Esta de su lado, así que no le confíen nada -añadió Ken.
-Ustedes tranquilos. Yo me encargo de eso -respondió el líder.
-Aunque sé que no fue bueno, me da lástima. Todos fuimos algo groseros con él -menciono Hyuk.
-¡Hey!, No hay tiempo para ser amables. Ni se te ocurra acercarte a él Hyukie -amenazo Hongbin. Que como cualquier hombre enamorado se preocupaba por su chico.
-¡Bha!, Ya estoy grandecito y se cuidarme solo. Además tú no eres nadie para darme órdenes -frunció el ceño y se cruzo de brazos.
-¡Pero qué dices!, tu eres todo para mí. Sabes que te amo -Hongbin lo tomo de los hombros y lo miro directo a los ojos.
Esas últimas palabras le habían llegado. Le dolieron, le alteraron el corazón. El pequeño sabía lo que para él significaba, comprendía a la perfección sus sentimientos. Y esa repentina reacción lo desconcertó por completo.
-No pienso discutir contigo. Espero hablar con ustedes luego chicos, los quiero -el pequeño se levanto de su lugar y subió las escaleras. Los demás se quedaron serios y se observaron entre sí.
-Déjalo por ahora Hongbin -dijo Leo -. Han pasado muchas cosas últimamente.
-Pero es que no comprendo su actitud -Hongbin estaba más que preocupado por el pequeño.
-Dale un respiro -añadió Ken.
Pero más que enojo, lo que el pequeño sentía era melancolía.
Hyuk cerró la puerta de un portazo y se lanzo boca abajo en la cama. Estaba molesto por lo frágil que podía ser. Estaba molesto de estar celoso por la relación de Leo y Ken. Era fácil de asimilar para él lo que sentía, pero tal vez los demás no lo comprenderían.
Hyuk era un chico realmente tierno y cursi. Soñaba con una declaración de amor al estilo de las películas. Anhelaba que fueran amoroso y tierno con él. Pero nada de eso estaba viviendo con Hongbin. Ya le había entregado su cuerpo, y lo mínimo que esperaba era que el castaño le pidiese que fueran novios. Ya había pasado un largo tiempo de esa noche en la que estuvieron juntos, y Hongbin no le había dicho nada. No había hecho realmente oficial lo que sentían.
¿Cómo alguien tan exigente en esos aspectos, había aceptado una relación así?
Porque lo que estaba viviendo con Hongbin era algo realmente liberal. No había compromiso, no existían ataduras.
La llamada con los chicos termino. Ravi, N, y Hongbin; se quedaron en la sala viendo un poco de televisión. Hongbin quería escuchar los consejos de sus amigos y dejar solo por un tiempo a Hyuk para que se le pasara el enojo. Pero la verdad es que estaba demasiado inquieto. No dejaba de mover su pie y frotarse las manos. El líder noto la creciente ansiedad que invadía el cuerpo del castaño, así que tomo el control remoto y apago la televisión.
El rapero giro su rostro y observo al líder con el ceño fruncido. Hongbin ni siquiera se digno a voltear, estaba realmente perdido en sus pensamientos.
-Hongbin... -el líder lo llamo. Pero el castaño no le dio una respuesta. Seguía observando el piso de madera. -.¡HONGBIN! -intento de nuevo, pero ahora con un tono de voz elevado. El castaño giro su rostro y lo observo.
-¿Qué sucede? -lo miro desinteresado.
-¿Ya te pusiste a analizar el por qué Hyuk actuó de esa forma? -el líder lo observo serio.
-No he dejado de darle vueltas en mi mente a ese asunto. Pero simplemente no encuentro la razón -se rasco la cabeza.
-Bueno para mí es bastante obvio -agrego Ravi. El moreno y el castaño lo observaron con atención.
-¿De qué hablas Ravi? -pregunto muy intrigado Hongbin.
-Bueno... creo que Hyuk está algo sentimental porque tu no le has pedido que sea tu novio -el rapero encogió los hombros.
-¡¿Tú crees?!, me parece una estupidez -Hongbin blanqueo los ojos.
-Concuerdo con Ravi. Y para nada es una estupidez. Hyuk es un chico romántico, y estoy seguro que anhela desde hace tiempo que se lo pidas. ¿Qué estas esperando? ¿Qué alguien más llegue y lo haga? -el líder arqueo la ceja.
-¡Cállate! Me muero si eso pasa -el castaño se cubrió el rostro con ambas manos y se tallo con fuerza los ojos. Estaba muy confundido.
-Yo creo que ya es momento de que lo hagas. Y por supuesto de una manera tierna, no algo sin chiste y poca creatividad. Tu bien sabes lo amoroso que es Hyuk, y estoy seguro que tiene grandes expectativas para cuando llegue ese momento. Creo que debes culpar a las películas de drama por eso -el líder sonrió al terminar de hablar.
-Mmmm... ¡Maldición! ¡No se qué hacer! -se jalo de los cabellos.
-Yo difiero un poco de mi querido N. Para mi Hyuk no necesita gran cosa, pero si espera que tú seas tierno y sincero. Que le hables directamente del corazón, que te acerques a él y lo mires a los ojos. Que con una mirada pueda descifrar todos tus sentimientos -el rapero suspiro -. Sonara cursi pero esa es mi opinión -Ravi desvió el rostro para que no pudieran notar el evidente sonrojo en sus mejillas oscuras.
-Mi amor que bonito lo que dices -el líder lo abrazo sobre su pecho -. Yo hago todo eso por ti, ¿Verdad?, o ¿Acaso soy un mal novio? -el moreno hizo puchero.
-Claro que lo haces. Y porque se lo hermoso que se siente es que le aconsejo esto a Hongbin -el rapero tomo el rostro de N entre sus manos y le beso los labios de forma delicada.
-Esta noche lo consultare con mi almohada. Se me tiene que ocurrir algo -Hongbin se mordió el labio inferior con ansias -. Creo que ya me iré a dormir -Hongbin recogió su vaso de té y lo deposito en la loza sucia de la cocina. Mañana temprano lo lavaría.
"Nosotros también iremos a descansar" Fue lo que dijo el líder, mientras subía con Ravi las escaleras. Hongbin camino hasta la sala y apago el último interruptor. Subió las escaleras y entro a su habitación. Camino lentamente hasta llegar a la cama que compartía con Hyuk, y lo aprecio con mucho detenimiento en la oscuridad.
El pequeño yacía dormido de lado con una de sus manos apoyada en su mejilla, y tenía el cabello un poco húmedo, se había bañado antes de dormir. Hongbin se acomodo entre las sabanas y se acerco al pequeño. Coloco su codo en la cama para recargarse en su mano y poder apreciar el bello rostro de Hyuk. Esos labios tan carnosos y rojizos que le pedían a gritos un beso. Su delicada y suave piel, tan blanca como la nieve. Y esos ligeros mechones rubios que caían en su frente.
El castaño sonrío, al observar la belleza resplandeciente de su amor. La ternura acumulada en ese pequeño risueño que lo hacía estremecer.
"Te amo", susurro mientras le acariciaba con delicadeza la mejilla.
Hongbin estaba hipnotizado con la hermosura de Hyuk.
"Sé que a veces soy un tonto y no te demuestro lo importante que eres para mi"
Se acerco a los labios del rubio.
"Pero tienes que saber que eres lo más bello de mi vida, te voy amar con todas mis fuerzas Hyuk"
Hongbin le acaricio el cabello y deposito un suave beso en sus labios. Se acomodo en su almohada y atrapo la cintura del pequeño con su brazo para quedarse dormidos de cucharita. El castaño abrió su corazón en las penumbras de esa habitación, se atrevió a decir cosas tan bellas pensando que el pequeño estaba dormido. Deseando que sus palabras llegaran a su mente y se colaran en su sueño.
Pero Hongbin no contaba con el hecho de que Hyuk no estaba dormido. Solo estaba fingiendo. No quería hablar, no quería discutir. Las palabras y la cercanía de Hongbin de verdad lo helaron por dentro. Quería darse la vuelta y atrapar al castaño entre sus brazos. Anhelaba decirle que todo estaba bien y que cada segundo a su lado era único e inigualable. Quería besarlo y mostrarle su mejor sonrisa. Pero la nostalgia y el orgullo pudieron más que cualquier sentimiento. La frustración de un corazón herido lo cegó. Sabía que no iba a poder contener sus lágrimas. Y él no quería ser más el chico débil, no deseaba mostrar esa faceta.
......
Se levantaron como cada mañana haciendo la misma rutina de siempre. Preparándose para partir a los ensayos en la empresa. Los días agotadores habían regresado y con un peso más; Kim Jaeseop. Los miembros de verdad que no podían aceptar que tendrían que ver ese rostro de gato todos los días. Apenas sería el segundo día trabajando con él, pero ya no podían lidiar más con eso. Cada vez que veían su rostro, recordaban la tristeza y sufrimiento que habían pasado sus amigos. Ese chico, ese traidor envuelto en la piel de un gato, no era más que un tipo ambicioso y sin corazón. No querían verle más, no querían que fuera parte de VIXX.
Todos los miembros se encontraban en la empresa, a excepción de Hongbin, que fingió sentir molestia y mareos como pretexto para tener el día libre. Estaba dispuesto a organizar algo para pedirle a Hyuk que fuera su novio. En la mañana, cuando el pequeño se estaba alistando para partir, le dirigió solo algunas pequeñas palabras. No se porto cariñoso como todos los días, ni le dio un beso de despedida. A pesar de esa indiferencia, Hongbin pudo notar un cierto brillo de preocupación en Hyuk al tener que dejarlo solo y "Enfermo". Pero el tenía que ir con los demás a la empresa, el manager no permitiría que alguien más faltara.
Hongbin estaba en el suelo de su habitación decorando y pintando una manta en un gran trozo de tela. Le había colocado una infinidad de colores y con pintura escribió un mensaje que decía: "Se mío por siempre. ¿Quieres ser mi novio? , ya todo estaba listo y sus manos eran un desastre, tenían brillo y pintura por todos lados. Hongbin se levanto del suelo y puso a secar la manta. Después tomo lápiz y papel y comenzó a escribir un mensaje en una nota. También se había encargado de comprar los chocolates favoritos de Hyuk y un ramo de flores.
El castaño se volvió a meter a bañar y se puso un poco de ropa cómoda. Los miembros llegarían tarde y a Hyuk nunca le había importado realmente la forma en cómo estuviera vestido Hongbin. Para el pequeño, Hongbin siempre lucia hermoso con cualquier cosa. Traía puesta una camiseta de tirantes que dejaba al descubierto sus fuertes y marcados brazos, y un pantalón algo entallado de seda color negro.
El castaño se acostó en su cama y se puso a ver un poco de televisión. Sentía mucha ansiedad y deseaba que las horas pasaran lo más rápido posible. Quería ver la reacción de Hyuk al encontrarse con semejante sorpresa en el cuarto. Después de esperar un buen rato, Hongbin coloco en una pared del cuarto la manta y apago las luces. Esperaría en la oscuridad a Hyuk y de esa forma cuando encendiera las luces se encontraría con todo. Hongbin se quedo iluminado únicamente por la luz de la pantalla de la televisión. Realmente desesperado por hablar con el pequeño.
......
9:30 pm.
Los ojos de Hongbin ya se estaban cerrando por el cansancio. Jamás pensó que hacer una manta fuera tan agotador. Además que camino varias cuadras para encontrar todo lo que necesitaba. Observo la hora en su celular y se tallo los ojos. "Ya debe faltar poco" , pensó. El castaño se levanto de la cama y se puso un poco de perfume en el cuello. Justo después escucho murmullos y ruidos en el pasillo, fue ahí cuando su corazón se acelero y sus manos comenzaron a temblar. Hongbin tomo el control remoto y apago la televisión. Se coloco justo a un lado de la cama y se tapo la boca, no quería hacer ruido.
"Que descanse chicos" se escucho la voz de Hyuk al abrir la puerta de la recamara.
"Hongbin ¿Estás aquí? ¡No me asustes!" El pequeño encendió el interruptor y se quedo boquiabierto.
En la orilla de una de las camas estaban unas flores y una caja enorme de chocolates. Camino hasta llegar a ella y sonrió complacido. "Mis favoritos". Después observo la pared, justo al lado del buro y se quedo perplejo. Hyuk comenzó a temblar y llevo sus manos a la boca. Lo que decía la manta era algo que él había esperado durante mucho tiempo.
"¡Hongbin! ¿Dónde estás?" grito desesperado, hasta que observo el cuerpo de su amado salir por la otra cama.
El castaño le brindo una sonrisa de oreja a oreja, y se acerco al pequeño. Lo tomo de las manos y lo miro finamente a los ojos.
-¿Qué es todo esto? ¿No es una broma verdad? -los ojos del pequeño comenzaron a brillar.
-¡Claro que no lo es!, En verdad quiero pedirte que seas mi novio Hyuk. No quiero que te sientas menos, no quiero que pienses que no te amo. Lo único que deseo es presumirle al mundo entero que tu eres el hombre de mi vida -Hongbin elevo sus manos y las poso en las mejillas del rubio.
-Hongbin... yo... he estado esperando este momento durante mucho tiempo -bajo el rostro sonrojado. El castaño lo tomo de la barbilla y volvió a levantar su rostro para que lo observara.
-Entonces... ¿Es un sí? -Hongbin se mordió el labio inferior esperando una respuesta.
-¡SIII!, Te amo y quiero ser tu novio -el pequeño se aferro a su cuello y comenzó a llorar como un bebe. Hongbin lo cargo y le dio varias vueltas sosteniéndolo de la cintura.
-¡Gracias mi pequeño! Prometo hacerte muy feliz y mejorar en mis inseguridades -lo tomo del rostro y lo beso. Un beso apasionado, lleno de amor y furor. Se alejaron de sus labios unos instantes, pegaron sus frentes, y se observaron fijamente.
-Eres realmente lindo. Aun no puedo creer que seas mío -dijo el pequeño con una gran sonrisa en su rostro. Las lágrimas no dejaban de correr por sus mejillas.
-Soy lindo porque desde que tu estas a mi lado todos los días despierto con una sonrisa en mi rostro -llevo sus manos a las mejillas del chico y con su dedo pulgar limpio las gruesas y saladas lágrimas del pequeño. -. Me alegra saber que estas lágrimas son de felicidad. No podría soportar hacerte sufrir de nuevo. He sido realmente estúpido contigo -el castaño bajo la mirada.
-Olvídate de eso -le acaricio el cabello -. Tú eres todo lo que quiero. Me das la felicidad exacta que mi corazón necesita para seguir palpitando.
Hongbin hizo puchero al escuchar las palabras de Hyuk. De verdad que había estremecido cada fibra en su interior. El castaño tomo la mano del rubio y lo sentó junto a él en la cama. Le entrego las rosas, los chocolates, y saco una nota de su pantalón.
-Toma -le puso la nota en sus manos -. Lo escribí para ti. Solo espero que no sea realmente malo -arrugo la boca.
Hyuk tomo la nota con mucha felicidad y la abrió ansioso.
Mi pequeño...
"Cuantas veces no te despertaste con el pensamiento firme de si encontrarías a la persona indicada. Sé muy bien que en tu mente existe un mundo de fantasía y amor eterno, que es muy probable solo veas en las películas. Me gustaría tanto poder descifrar todos tus pensamientos, desearía ser el hombre perfecto que tú te mereces. Pero no estoy siquiera cerca de serlo. He cometido muchos errores, y en ocasiones he sido realmente grosero y cruel con tus sentimientos. Pero antes la vida era muy distinta para mí, tenía un rumbo completamente diferente. Pero tus caricias, tu sonrisa y ternura. Provocaron un derrumbe en mi interior. Transformaron todos y cada uno de mis sentimientos. Ahora me veo al espejo y siento que soy la persona más fuerte y decidida. Porque tú amor es el motivo de mi lucha. Porque tu corazón es lo que me mueve cada día, y el brillo de tus ojos es mi brújula. No me importa en donde este, no me importa lo que pueda suceder el día de mañana. Si lo he de vivir a tu lado se que será lo mejor. Sé que yo podre sonreír si puedo vivir eternamente entre tus brazos y en tus labios. Te amo con todo mí ser. Te amo simplemente por ser tú... el hombre que me altera el corazón.
El destino ya se confeso, y tu eres el dueño de mi alma y corazón"
El pequeño abrazo la nota. Se lanzo a los brazos de Hongbin, y comenzó a acariciarle el cabello mientras lloraba. El mayor lo estrujo con fuerza escondiéndolo en sus brazos y lo alejo de su pecho para observarlo a los ojos. Tenía las mejillas sonrojadas y las lágrimas no dejaban de brotar por sus ojos. El castaño enredo sus brazos a la cintura del pequeño y lo beso. El cuerpo del rubio no dejaba de temblar y estremecerse en los brazos ajenos. Sentía un ardor recorrerle todo el pecho.
-Gracias Hongbin. Quisiera poder encontrar las palabras adecuadas para describir lo que estoy sintiendo en estos momentos. No necesito que tú intentes ser perfecto. Para mí ya lo eres -Hyuk se limpio unas cuantas lagrimas con su mano y le sonrió.
-¿Cómo puedes ser tan dulce siempre? -Hongbin lo abrazo de nuevo con más fuerza.
-Es que tú me haces muy feliz -Hyuk enredo sus brazos al cuello de Hongbin y lo observo a los ojos.
Los dos se brindaron una gran sonrisa y se acostaron en la cama a comer algunos chocolates y ver televisión. Sus corazones latían con fuerza y sus pulsos no lograban controlarse. Sentían la felicidad más grande. Y esperaban que ese cosquilleo del amor nunca desapareciera de sus vidas.
.....

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Broken Arrow
Fanfiction-Esta historia no es mía, por lo tanto le doy créditos a la escritora. En lo personal, es una historia que me gusta muchísimo y no puedo parar de leer. Espero y les guste esta historia tanto como a mi. Pueden encontrarla también en LiveJournal. Sin...