Siempre Juntos.

23

Ya había amanecido y era hermoso despertarme y ver la misma pared que había visto muchos años de mi vida.

Eran las 8 de la mañana. Me levanté y mire por mi ventana el hermoso jardín que teníamos, un gran camino de rocas, un hermoso césped, unos pinos enormes llenos de rocío de la noche anterior, esas pequeñas gotitas que brillaban como lucecitas cuando le daba los débiles rayos del sol del amanecer.

Veía como los pájaros iban y venían árbol tras árbol, la piscina llena, pero de hojas de árboles.

Fui hasta el baño y tome una ducha larga. Cuando salí me seque el cabello con el secador y empecé a ver en todo el desorden de mi ropero que ropa podría ponerme para ir.

Me puse unos pantalones vaqueros celeste claro, una remera blanca y un pañuelo rosa colgando de mi cuello y en los pies mis Vans grises.

Me quede ya vestida y a las 9:30 salíamos, eran las 8:48 así que salí a ver si mis padres ya se despertaron y de hecho ya estaban listos. Desayunamos y luego subimos al auto para irnos al colegio.
En el camino me fije en los mensajes de mi celular y había uno de Rocio

"TE ESTUVE ESPERANDO TODA LA PUTA MAÑANA PARA IRNOS JUNTAS AL COLEGIO Y NUNCA APARECISTE. NI SIQUIERA SE SI DE VERDAD VOLVISTE DE CALIFORNIA. TODO MAL."

Creo que se me había olvidado avisarle que iba con mis padres...
Cuando llegamos todas las miradas cayeron sobre mi. Me sentía más incómoda que nunca.

Entramos a la dirección y mi padre lo convenció al director que me vuelvan a inscribir ya que tenia la libreta de las profesoras que iban por la tarde a mi casa en California no tendría que rendir todas las materias.

-solo hace falta de nuevo la fotocopia de esta libreta- dice y mis padres me miran

-Si quiere voy a la fotocopiadora y la saco...-

-Está bien, vaya y luego ya esta todo. La esperamos aquí.-

Tome la fotocopia y empecé a caminar por los pasillos del colegio que rodean el patio.

Mientras iba distraída abrieron fuerte una puerta de un salón y me volteo.

-OOOHH PERDON NO M...-
Cuando levante la mirada me di cuenta porque paro de hablar. Estaba ahí, parado tan hermoso como siempre, como las miles de veces que me espero en la esquina de mi casa, en la esquina del colegio. Estaba ahí como si hubiera visto a la mismísima muerte en persona, pálido y con lágrimas en los ojos.

Me levanté ya que el solo se quedo paralizado ahí sin hacer nada.
Levante la mirada y lo mire fijamente, también con ya lágrimas en los ojos.

-A- A- Ant-- Antonella?- tartamudeo

No sabia que decir, solo asenti limpiandome una lágrima que caía por mi mejilla mientras la de el ya habían rebalsado y caían sin parar sin ni siquiera pestañear. Trago duro y cuando estaba a punto de hablar salió una morocha de ojos verdes y largo pelo lacio y lo abrazo por la espalda.

-Por que te demoras tanto amor?- su mirada se dirigió a mi y lo soltó de su agarre- Ooh querida, estas bien?- Dijo dirigiéndose a mi pero su expresión cambio cuando vio que Benjamin no apartó ni un segundo la mirada de mi y sus lágrimas todavía caían.- Que esta pasando?-

Lo mire por última vez y empecé a caminar directo a la fotocopiadora mientras escuchaba como ella le preguntaba una y otra vez que le pasaba, que quien era yo y ya no escuche más...

Era su novia... quien sabe de cuantos meses? Posiblemente estaba con ella desde la próxima semana que cortamos y así.
Pero si ya esta con ella, por que reaccionó así? Creía que me había muerto o que?

Llegue a la fotocopiadora y saque las páginas, luego mientras volvía me iba aguantando las lágrimas para llegar tranquila a la dirección. Trate de pasar lo más lejos posible del salón de Benjamin y sin darme cuenta choque con un chico que al verme me miró confundido, su cara se me hacia tan familiar...

-Oye estas bien? - luego me observó bien - Ah tu eres...-

-Antonella, no tenemos todo el día! Que estas esperando?- la voz de mi padre lo interrumpio.

-Perdon!- Dije y camine hacia el pero por alguna razón me volteé a verlo, era familiar, lo había visto en algún lado pero estaba segura que era nuevo en el colegio porque no lo vi antes.

-Perdon padre, unos amigos de antes me vieron y me quede a hablar con ellos-

-Está bien ahora entreguemos eso y vamos a casa que hay mucho que hacer-

-Bueno-

Después de tanto lo volví a ver. Y estaba con otra. Yo tantos meses estuve pensando en el y el ya tenia otro amor.

Cuando llegamos a casa no aguantaba más, entre a mi habitación y revente en llanto.

-Hija ven tenemos que hacer el aseo de la casa-

-Ya voy- Dije como pude. Me levanté de mi cama y fui hacia mi baño y lave mi rostro y me maquille un poco para que no se notarán los ojos rojos por el llanto. Me puse una ropa más casual y sali y nos pusimos a limpiar todo. Fue divertido jugar así con ellos, nos tirabamos las hojas de viejas que había en la piscina, nos mojamos y nos divertimos como nunca. Ojala siempre hubiera sido así.

A la mitad de la limpieza comimos unos sándwiches que habíamos encargado para luego seguir limpiando todo.

Cuando terminamos eran por ahí de las 8 de la noche y yo no daba más, estaba cansadisima.

-Ve a ducharte y luego prepara la mochila que yo ya te plancho el uniforme y te lo dejo allí-

-Está bien má, buenas noches a los dos-

-Buenas noches hija-

Me diriji a mi habitación, puse a calentar un poco de agua ya que estaba un poco fresco y luego prepare la mochila con mis viejas carpetas, me duché cuando ya estaba el agua y ya fuera seque mi cabello y me recosté.