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Al día siguiente armamos una cena con nuestras familias, bah con Marta y Benjamin, y mis padres y yo. 

Cuando el llegaron ellos dos nosotros ya habíamos preparado todo. Lo recibí y los hice pasar hasta el patio trasero.

-Mamá, Papá- mire a mi gran amor, a la persona que más quería en este mundo y me tranquilizó su sonrisa- El es Benjamín mi novio-

-Hola- se acercó a mis padres y los saludo

-Marcela- dijo mi madre sonriendole y dejando un beso en su mejilla

Cuando se acercó a mi padre el le estiró la mano en forma de saludo.

-Alvaro- dijo mi padre que luego de que Benjamín lo mirara y sonriera lo abrazo.

-Y ella es Marta...- dije pero antes de terminar Benjamín me interrumpió

-Mi madre- dijo el orgulloso provocando una grande sonrisa en el rostro de Marta

Ya comiendo comenzó la charla comenzó

-Y para que estas estudiando?- pregunto mi padre mirando a Benjamín

-Ingeniero técnico, mi padre tiene una gran empresa por la cual viaja a distintos lugares armando los mejores edificios y creando otras cosas..-

Mi padre asintió

-Menos mal que tienes un buen futuro- el sonrio- eso me agrada para ustedes.

Nos sonrió y luego de rato volvió a hablar Benjamín.

-Señor y señora Casacci...- ellos lo miraron y el sonrió nervioso- No se como decir esto... Emm si tengo su apoyo en serio me gustaría que Antonella a mitad del otro año cuando terminemos los estudios se vaya a vivir conmigo en mi casa- mis ojo se abrieron como platos pero la emoción que sentía en la pecho era inigualable.

-Creo que esa pregunta se la tendrías que hacer a ella no?- dijo mi padre volteando la mirada

-Y que dices?- pregunto Benjamín
-Me encantariaaaa!- lo abrace fuertemente y el dejo un beso en mi mejilla

Y así pasó la tarde mientras hablábamos y reíamos todos, Marta estaba emocionada y yo era la persona mas feliz del mundo.


3 meses después.

Ya era 14 de febrero y yo estaba en la casa de Benjamín.  Desde que le pregunto a mis padres si podíamos vivir juntos empecé a venir para quedarme varios días aquí. Mire para la parte de mis pies y un hermoso vestido negro hizo presencia ante mis ojos. Luego vi una nota que cayó del vestido.

"Espero te guste mi reina, sigue los petalos"

Vi los miles de pétalos que se dirigían hacia la cocina y Marta estaba ahí con un gran desayuno y una nota en sus manos.

-Buenos días señorita Antonella- me señaló la silla y luego dejo la carta cerca de mi- esto es para usted...-

Abrí el sobre que me dio Marta y luego leí la nota que estaba adentro

"Tengo que hacer muchas cosas hoy, pero por favor a las 20:00 te estaré esperando en el bar de la vuelta. Te amo -B"

Sonreí ante eso. El era lo mejor que me estaba pasando.

****

-Martaaaaaa- grite desde la habitación de Benjamín que ya era la nuestra.

-Pasa algo señorita?- me voltee a verla

-Me ayudas a prender la parte de atrás del vestido... por fis- ella rió  y cuando terminó de hacerlo me miró por el espejo

-Se ve hermosa niña Antonella- sonreí y la abrace

-Gracias Marta- me mire de nuevo al espejo, pero algo faltaba... lleve la mano a mi cuello e hice un gesto

-Espere un segundo- asentí y me seguía mirando. Marta volvió a entrar y mis ojos se iluminaron al ver tan hermoso collar que ella traía en sus manos- esto es para completar su atuendo- me recogí el pelo y ella me lo prendió en mi nuca.

-Es perfecto!- dije.

Cuando ya estuve lista me puse mis tacones y empecé a caminar hacia el bar del vuelta. Era un lindo bar italiano que a mi parecer era demasiado caro hasta el agua.

Cuando fui llegando un señor me sonrió y abrió la puerta.

-Puedo dirigirla a su mesa?- asentí y el señor me llevo hacia un lugar separado de todos. Y allí estaba una linda mesa con un hermoso chico esperando por mi allí.

-Buenas noches...- me sonrió el señor y cerró la puerta del gran salón que había allí

Mire a Benjamín, tome aire y empecé a caminar hacia el

-Hola...- dije totalmente nerviosa

El suspiro -Hola- sonreí como nunca

El tiro de una silla para atrás y yo me senté. Luego el se sentó en frente de mi

-Te ves hermosa- me miró y luego bajo la mirada

-Vos igual- sonreí

Entraron unos mozos y dejaron unos espaguetis con salsa en frente a nosotros y aunque no era tan refinado una botella de Coca-Cola en medio de nosotros.

Cuando se fueron empezamos a comer.

-Menos mal que no hablan Italiano- me reí y el también lo hizo

-Es un bar de comida italiana, no de personas italianas Antonella...- el Río. Su sonrisa era perfecta.

Cuando terminamos de comer mirábamos por la gran ventana que había a todas las personas pasar, miles de enamorados abrazados, llenos de flores y regalos.
Cuando voltee mi mirada hasta Benjamín ya no estaba en su silla. Estaba en frente de mi de Rodillas.

-Se que somos muy jóvenes, que tal vez esto sea muy rápido. Pero estoy seguro que no quiero conocer a nadie mas en mi vida, solo quiero conocerte en una y miles de facetas más en lo que me resta de ella. Y por eso, mi amada, hoy quería pedirte que compartamos todo el resto de nuestras vidas juntos.
Celeste Antonella Casacci ¿Quieres casarte conmigo?-

Mis lágrimas empezaron a caer y me lance sobre el abrazandolo. 
Nos levantamos juntos

-Eso es un si?- sonrió

-Si, Si quiero casarme con vos Benjamín- lo volví a abrazar y el empezó a llenarme de besos.
Tomó mi mano izquierda y puso un hermoso anillo en mi dedo anular.

-Sabes por qué se pone el anillo en este dedo?- sonrió y me miró cuando terminó de ponerlo en mi dedo.

-No, por que?- pregunté intrigada

-Porque este es el único dedo que tiene conexión con el corazón... Y ahora tu corazón está conectado con el mio- me mostro su anillo en su dedo y sonreí como nunca.

El era todo lo que algún día había soñado. El era todo lo que un día me prometí no sentir por alguien. El era mi todo.

Siempre Juntos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora