El chico de la camiseta blanca.

Capítulo 8.

Regreso a casa y estoy más que cansada. Espero poder retomar la preparatoria, algun día, pero por ahora solo quiero conseguir un trabajo y ver la forma de conseguir comida para cuando vuelva Nathan, pagué todo lo que tenía que pagar, servicios básicos. Tengo algo de dinero, pero no lo voy a gastar, lo guardaré, sí no lo hago no comeremos en toda la semana. Evan esta entendiendo la situación y muchas veces me ofrecio dinero, pero lo rechaze.

Lo veré esta tarde, falta poco para que Nathan llegue del trabajo, tengo que hacer la cena.

El tono de mi télefono hace que salte de mi lugar.

--Noa, te espero en el parque que esta por la avenida Jheferson, por la calle numero 2--.Suena más seco que otras veces.--Voy para aya no te muevas.

Tengo que ir caminando a todas partes, Nathan usa el auto que era de Emma y vendío el mio hace como unas 3 semanas.

Mi estado es neutral no estoy triste pero tampoco soy feliz, es decir, tengo un hermano que esta dando todo porque yo salga a adelante y un novio que me ama pero yo necesito a Emma más que a nadie.

Gracias a Dios el parque no esta muy lejos y solo tengo que caminar unas 14 cuadras.

Últimamente eso es lo minímo que he caminado desde que no tengo auto.

Llego al parque y miro a Evan esta recargado en un arbol.

Mi cara se ilumina en pensar que lo voy a tener cerca de mi.

Su cara esta desencajada y su mandibula apretada. Esta mira enojado.

--¿Para qué querías verme?--.Le digo dandolé un beso en la mejilla.

--Noa, esto es serio, yo...

Hace una pausa y no me agrada nada, es una mala noticia.

--Me voy a terminar la universidad al extranjero.

El no podía irse, no podía dejarme, simplemente, no puede.
El aire me falta, los ojos se me llenan de lágrimas.

--Harémos que funcione, juntos.--Le digo tomando su mano.--Noa, no es solo hacer que funcione, necesito pensar.

Dice y aparta mi mano.

--Creo que me precipíte al decirte que te amaba--.
No puede ser cierto, ¿porque a mi?, ¿porque él?.

Trago saliba y me limpió las lágrimas con las mangas de mi sudadera.

--Noa, estoy muy confundido, además mis padres quieren que me vaya al extranjero a terminar la universidad, creo que es lo mejor--.Dice con un nudo en la gargata.--Dijiste que me amabas.

--Y tu nunca me lo dijiste.

Pero lo he soñado, pensado y vivido.

--Pero no puedes dejarme, yo, yo...

"Te amo"

--Te quiero.

--No puedo seguir así, Noa, si tú no sientes lo mismo yo, no puedo esperar cosas de personas que no van a dar nada, tengo muchas cosas que pensar y Ohio no es el lugar correcto para hacerlo.

--¿Te vas?,¿así?, ¿sin más?.
¿Sabes?--.Tomo una respiración profunda y grito antes de que pueda abrir la boca--.¡Eres un cretino, un idiota y un hijo de puta y te odio porque lo único que querías era acostarte conmigo, eso le decías a todas, pudréte en el infierno del que saliste y jámas regreses!, ¡esto se termino, ve y cojete a tu madre sí quieres, pero cuando te canses de ser un idiota no vengas a buscarme porque no voy a estar y mucho menos para tí!.