El chico de la camiseta blanca.

Capítulo 14.

--¡¿Familiares de la señorita Noa James?!

Aurora se quedo dormida en mi hombro así que opto por levantar la mano, el doctor se acerca con una cara de frustración y dice:

--Muchacho, todo indica que tu novia.--Lo interrumpo inmediatamente.

--No es mi novia, perdón continue.

Tengo tanto miedo de lo pueda decir.

--La chica tuvo una infección de riñon.--La frustración del doctor ahora se filtra en mi.--¿Eso es tan malo?

--Significa qué si la chica vuelve a probar una gota del alcohol lamentablemente no volvera a ver la luz del sol.

Por un segundo no puedo respirar, siento como la sala de espera se hace más pequeña y mi espina dorsal ya no me responde.

--Lo siento mucho--.Dice el doctor y se retira.

Aurora se levanta, se estira y me mira.--¿Ese era el doctor?, ¿te dijo algo sobre Noa?.

Mis ojos estan rojos y ella nota que no estoy del todo bien.

--Si Noa sigue así la voy a perder.
Digo sin poder aguantar las ganas que tengo llorar.

Aurora me abraza y dice.--Esta bien niño, no la vas a perder, no la vamos a perder.

Correspondo a su gesto, se levanta y dice.

--Voy a ver a mi niña,¿vienes conmigo?--.Dice extendiendo su mano.

--Me lavaré los dientes puedes hablar con ella mientras lo hago.

Caminamos a los cuartos, el hospital huele a muerte, a medicamento y a un llanto interminable.

Entramos,Noa esta cruzada de brazos, no esta feliz, pero su expresión cambia completamente cuando ve a Aurora, ella corre y la abraza.

--No me vuelvas a hacer una cosa así, no quiero perderte--.Dice y besa su frente.

Entro a lavarme los dientes, una enfermera, nos dio cepillo de dientes y una manta.

Enjuago mi boca, me dispongo a salir, pero cuando toco la perilla Noa comienza a hablar.

--Me hubieras dejado morir, sería más fácil, para todos.

Soy un idiota por orillarla a quitarse la vida, soy un idiota, yo debería estar en esa cama.

--Pelirroja, esto es serio, ¿que paso con todas las veces que me dijiste que lo ibas a intentar?, ya no eres una niña.

--Soy tu niña--.Aurora hace una aspiración profunda.--Y por eso mismo no quiero perderte, no de esta forma.

--¿Quien pagará todo esto?, no tenemos dinero.

--Evan, ya se encargo de eso, Noa, ese chico te quiere y mucho, se nota que no puede vivir sin ti.

--¿Y los otros 10 meses qué?, pudo vivir sin mi perfectamente.

--Lo único que tienes que saber es que ese chico haría lo que sea con tal de tenerte, tener tu amor.

Salgo del baño y las dos voltean a verme, Aurora se levanta de la cama, de los bolsillos de su sudadera saca unos cigarros, los levanta haciendo una señal rara y sale por la puerta.

Me acerco a Noa y ella toma mi mano.

--Evan, acercate...

Sus palabras me dejan helado por un momento, pero al fin me acerco.

Su nariz, esta junto a la mía y puedo sentir su cabello haciendo me cosquillas en la frente, suelta mi mano y toma mi cara.

De la nada sus labios estan junto a los míos, su beso me arranca el aliento y lo único que puedo hacer es corresponderle, besa mi labio inferior y lo muerde como si quisiera hacerme daño.

Se separa de mi.

--Gracias, no puedo odiarte, pero tampoco puedo quererte--.Sus ojos estan llenos de lágrimas que no derrama y por un momento puedo ver a la Noa que deje hace diez meses.

No sé como reaccionar, quiero besarla de nuevo pero se que no estaría bien, quiero besarla hasta hacer que le duelan los labios.

Beso su mejilla, beso la comisura de su boca y deposito un pequeño beso en sus labios.

--Te amo, Noa y no me voy a descansar hasta que sientas lo mismo.

Ella no muestra emoción alguna. Aurora entra me toma por la mano y dice.

--Te lo devuelvo en un rato pelirroja.

Noa asienta con la cabeza.

Salimos y en el pasillo Aurora comienza a llorar y toma mi mano.

--Tienes que llevartela.

Mi ceño se frunce y la duda me carcome.--¿A donde?,¿por que?

--¡Si no te la llevas de mi lado, nunca va a ser feliz y ya la he manchado con toda mi jodida mierda!, simplemente tienes que llevartela, no soportaría el hecho de perderla.

--Me va a odiar si me la llevo de tu lado--.Me mira y se limpia las lágrimas.--Lo va a entender, solo cuídala, por favor.

--Te lo prometo.

Aurora besa mi mejilla y corre fuera de mi vista. Noa va a matarme, de seguro va a matarme.

Abro la puerta, me acerco a Noa y le digo.

--Cuando salgas de aquí vendrás a mi departamento,conmigo.

Se aleja un poco de mi y sus ojos se tornan más grandes.

--Estás más que loco si crees que voy a ir contigo, tengo mi casa, junto Aurora.

No quiero volver para hacerla llorar, pero en casos extremos, medidas extremas.

--¡No esta a discusión vienes conmigo o vienes conmigo!, esa chica solo es una piedra en el camino.

Se sienta en la cama y se pone a la defensiva.

--¡Esa piedra en el zapato a sido mi única familia durante diez meses,¡Esa piedra en el zapato me dio un hogar!, ¡Y lo mejor de todo fue que no me dejo sola cuando más lo necesitaba.!

Noa esta más furiosa que nunca y sus palabras me hieren más de lo que debería.

--¡Enfermera!, ¡Enfermera!

No me dejas opción.

--Si te opones a venir conmigo, pongo una orden de restricción contra Aurora y no vuelves a ver a tu amiguita.

Eres un idiota, la perdiste para siempre.

--Te odio, como nunca pense en odiar a nadie.

Prefiero tu odio a vivir sin ti.

La enfermera aparece en nuestro campo de visión y pregunta.--¿Todo esta bien?.

Noa cierra los ojos limpiandose las lágrimas.

--Todo esta, esta bien, no hay ningun problema.