Capítulo 19.

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Una pesadilla me despertó. Las palabras de mi padre resonaban en mi cabeza. "Niña molesta". "No tienes talento". "No sirves para esto". Sentía mis mejillas húmedas.
Salí de mi habitación y bajé al salón, donde estaba Daniel.
Había colocado unas sábanas encima del sofá, y estaba tumbado, apoyando la cabeza en uno de los cojines que lo adornaban, con una manta tapando su cuerpo.
Con cuidado, me acerqué a él y agité y hombro. Se sobresaltó.
-¿Qué ha pasado?-dijo incorporándose.
-Nada. Yo...-le respondí.-No puedo dormir.
Me miró fijamente, se hizo a un lado en el sofá y levantó la manta, ivitándome a tumbarme con él. Así lo hice, y sentí como su brazo envolvía.
-Gracias.-murmuré antes de caer en un profundo sueño.

***

Al día siguiente fue el funeral. Decidimos no ir. Queríamos dejar todo atrás de una vez. Mis abuelos y mis tíos se habían quedado a dormir en nuestra casa, así que cuando se levantaron les presenté a Daniel. Mi abuela le cogió de los mofletes y le dijo:
-Pero que guapetón que eres.
Daniel solo se rió.
Antes de la hora de la comida, toda mi familia ya se había marchado, no sin antes darme un fuerte abrazo de despedida, no sabía cuando les iba a ver, si pronto o dentro de un tiempo. Nos quedamos en casa mi madre, mi hermana, Daniel y yo.
Estábamos sentados en el sillón viendo la televisión, yo con la cabeza apoyada en el hombro de Daniel, cuando unos fuertes golpes en la puerta nos sobresaltaron. Me levanté y abrí la puerta.
-¡Ann!-exclamó Christina entrando en casa, abrazándome muy fuerte.-Siento muchísimo no haber podido venir ayer, nuestro coche se estropeó.
-No pasa nada.-respondí sonriendo.
-Mi más sincero pésame Gabrielle. Lo siento mucho pequeña Lucy.-dijo mientras pasaba su mirada sobre las personas que había sentadas en el sillón.-¿Daniel?-dijo percatándose de que él también estaba en casa.
-Hola, Chris.
-¿Qué haces aquí?
-Sabía que algo iba mal.-posó su mirada en mí.-Tenía que venir.
Chris le miró y después me miró a mí. Me cogió por el codo y tiró de mí hasta la cocina.
-Ann, ese chico tan guapo que está sentado en tu sofá te ama.
-No... ha venido a apoyarme como cualquier otro amigo.
-Ann, ha venido desde Santa Barbara. Trevor, Darren o Kurt también son tus amigos, pero no han venido hasta aquí. Sé que él no te quiere para una amistad nada más. Y sé que tú tampoco.
-Ay, Chris. De verdad que hoy no es el día.
-Ann, él te quiere. Te ha ayudado a vencer, más o menos, uno de tus miedos.
-Pero, ¿y si me rechaza?
-El no ya le tienes.
-Chris, no sé...
-No estoy diciendo que vayas y le digas que le amas ahora mismo. Pero deja de intentar ocultar que le quieres.

***

Nos quedamos todos juntos viendo películas en casa. Me senté entre mi madre y mi hermana. Me estaba quedando medio dormida cuando Chris gritó.
-¡Arriba ese ánimo chicos! Salgamos.
-No sé Christina...-dijo mi madre.
-Gabrielle, anímate. Las tres debeis de olvidaros de ese... de una vez. ¡Vamos a la bolera! Y cenamos una hamburguesa allí.
-¡Sí, a la bolera!-exclamó mi hermana.
-Chris, sabes que no se me da bien jugar a los bolos.-reí.
-Yo te enseño.-me ofreció Dan soriéndome.
-¿Puedo invitar a Jackson, mamá? Por todo lo de ayer al final no le vi...
-Anda, llámale.-dijo mi madre sonriendo.-Pero que sepais que os estaré vigilando.
Lucy le sacó la lengua y fue a su habitación.

Cuando ya estuvimos todos listos, nos montamos en el coche de mamá y fuimos al centro comercial donde estaba la bolera. Decidimos jugar primero a los bolos y luego cenar tranquilamente.
Llegamos a la bolera, donde Jackson nos esperaba, y después de pagar nos pusimos los zapatos. Jugaríamos todos en la misma pista. Yo era la primera. Cogí la bola menos pesada.
-Venga, yo te ayudo.-me dijo Daniel acercándose a mí.
Puso su mano sobre la mía y me ayudó a tirar. Nos quedamos mirando como rodaba la bola hasta que golpeó los bolos. Sorprendentemente, hice pleno.
-¡Bien!-exclamé abrazando a Daniel.

Daniel jugaba muy bien. Nos ganó por bastantes puntos. Jackson y Lucy estaban tan embobados el uno con el otro que raramente tiraban algún bolo.
Era el turno de Lucy, pero Jackson tiró de su mano y se alejaron un poco de nosotros.
-Mirad, mirad.-dijo Chris.
Vimos como Jackson, delicadamente, cogía la cara de mi hermana y le daba un corto beso en los labios.
-Mi pequeña se me hace mayor.-susurró mi madre.

Cuando terminamos la partida, nos fuimos a una hamburguesería que había al lado. Mi madre me dijo que la ayudase a pedir. Nos acercamos y esperamos en la cola.
-A Daniel le gustas.
-Mamá...
-He visto como te mira.
-Mamá...
-Le tienes loquito.
-¡Mamá!-ella rió.
-Normal que esté así. Estas guapísima.-dijo acariciándome la espalda.
-Te echo de menos, mamá.
-No te haces a la idea de mucho que yo te echo de menos.

Ya con las hamburguesas en la mesa, empezamos a comer.
Tenía muchísimo hambre. Mordí mi hamburguesa y sentí que todos me miraban.
-¿Qué?-rieron.
-Te has manchado la nariz de ketchup.-dijo Lucy, riéndose.
Intenté limpiarlo llevando la lengua a la punta de la nariz, pero no llegaba, lo que causo aún más risa.
-¿Cómo vais a pasar nochevieja?-nos preguntó Daniel.
-Nos quedaremos las tres aquí, juntas.-le respondió mi madre.
-¿No viene nadie a pasarla con vosotras?
-Mis padre se quedarán en su pueblecito celebrando con los vecinos. Y mi hermana la pasará con la familia de su marido.
-Venid conmigo.-sugirió Daniel.
-¿Contigo?-pregunté.
-Sí, seguro que mi madre no tiene ningún problema. Además te adora, Beth. Así conocereis al resto de mi familia.
-No queremos molestar...-dijo mi madre.
-No molestareis. A mi madre le encanta cocinar de más, así que la comida no será un problema. Y desde mi casa hay una buena vista de los fuegos arificiales de Año Nuevo.

La emoción me envolvió. Iba a terminar este año y a empezar uno nuevo con la persona a la que amaba.

EL SIGUIENTE CAPÍTULO ES DEMASIADO ASDFGHJKL 😍 TENGO MUCHAS GANAS DE QUE LO LEAIS 😘 ESPERO QUE ESTE OS HAYA GUSTADO 😊😊😊

And Their Eyes Met.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora