Capítulo 27.

36 2 0
                                    

Teníamos el mash-up para el concurso. Ya sólo quedaban la canción donde se pudiera bailar y otro solo. Al menos, tenía una ayuda para saber qué bailar. Christina.
Chris había pedido a su profesora de la academia de baile la sala donde preparaban las coreografías para planear el número del concurso.
-Chris, de verdad que no sé qué hacer.-dije ya deseperada. Llevaba pensando en qué podía hacer para impresionar a los jueces desde las audiciones.
-Tranquila... Se nos ocurrirá algo. Dame unos minutos...
Mientras Chris andaba por la sala pensando, yo empecé a calentar para empezar a bailar. Me acordaba de que cuando era pequeña, como con 5 años, mi madre me apuntó a baile contemporáneo. La verdad era que no se me daba nada mal. Pero después mi profesora se fue de la academia en la que estaba apuntada y lo dejé un poco abandonado...
-Ann, tú hacías contemporáneo cuando eras pequeña.
-Sí, ¿y?-pregunté. ¿Me leía la mente?
-Podrías bailarlo para el concurso. Cuando a una persona le dicen que tiene que bailar, casi todos intentan convertirse en Beyoncé. Si haces algo distinto a eso, sorprenderás. Ya verás como casi nadie hace algo parecido.
-Eso no se sabe Chris. ¿Y si todos han pensado como tú?
-La mayoría cree que impresiona más bailar algo rápido y robótico. Algo lento y delicado como el baile contemporáneo no se suele apreciar de esa manera.
-Bueno... ¿pero qué canción podría cantar? Además, te recuerdo que me gustaría no morir ahogada en un escenario.
-Tranquila-dijo riendo-, tienes buenos pulmones. En cuanto a la canción... ¡Ya sé!-dijo después de pensar unos segundos-Hay un grupo llamado Hooverphonic, no muy conocido que tiene una canción llamada Gravity. Es muy bonita, y seguramente no te sea muy difícil compaginar el baile con la canción.
-Seguiré tu consejo, maestra.
-Bueno, pues levanta el culo y pongámonos a ello.
Estuvimos las siguientes dos horas practicando. "Levanta más el brazo", "Estira más la espalda" o "Flexiona más la pierna", eran los comentarios que más hacía Chris hasta me caí de culo mientras bailaba.
-¡Ay!-dije levantándome lentamente masajeándome la zona dolorida.
-Anda torpe, ya seguiremos ensayando otro día. No vas tan mal.
-Para nada, la verdad es que me he caído muy bien al suelo.
-Ya lo creo, deberíamos de incluirlo en la coreografía.-dijo Chris riendo conmigo.
Me pasó el brazo por encima de los hombros y volvimos a casa.
-Tú ensaya la canción en casa siempre que puedas. O con Dan. O con quien quieras. Pero ensáyala.-me dijo Chris mientras caminábamos.
-Sí, mamá.-reí.-Por cierto, lo de la acampada de parejas, ¿cuánndo es?
-Estamos pensando en hacerlo este fin de semana. Es decir, en dos días.-dijo poniéndose un poco seria.
-¿Qué pasa? ¿No tienes ganas?
-Es que Sam y yo...
-¿No funcionaron las tortitas?
-Sí, sí lo hicieron. Pero hoy hemos vuelto a discutir. No creo que duremos mucho, Ann...
-No seas tonta.-dije abrazándola por la cintura.-Ya verás como en la acampada todo se arregla.

***

-¡Mamá! ¡Lucy!-dije saludándolas por Skype.-¿Cómo estais?
-Muy bien, cielo.-dijo mi madre.-¿Por qué tienes la habitación tan desordenada?
-Hasta a distancia te das cuenta.-dije sacándole la lengua.
Estaba preparando la ropa. Ya era viernes por la tarde y estaba preparando la mochila para la acampada. Dan iba a llevarnos en el coche a Sam, a Chris y a mí, y se iba a quedar a dormir esa noche en casa para poder salir directamente por la mañana.
-Me voy de acampada con mis amigos mañana.
-¿Y con Dan?-preguntó mi hermana.
-Cotilla. Sí, con él también. Viene dentro de un rato, se queda a dormir. Podeis saludarle...-el timbre me interrumpió.-Aquí, está. Ahora vengo.
Bajé corriendo las escaleras y cuando abrí la puerta me lancé a sus brazos.
-Hola enana.-dijo dándome un beso en la cabeza.
Yo me puse de puntillas y le di un corto beso en los labios.
-Ven arriba, estoy hablando con mi madre y mi hermana por Skype y te quieren saludar.
Le cogí de la mano y subimos juntos las escaleras. Cuando entramos y nos colocamos delante de la web cam mi madre y mi hermana empezaron a saludar efusivamente a Dan. Él rió. Hablamos un rato más hasta que nos despedimos.
-No hagais cosas malas.-dijo mi madre riendo.
-¡Mamá!-me sonrojé.-Adios feas.-dije terminando la llamada.
Dan me ayudo a terminar la mochila y a recoger la habitación Después nos tumbamos juntos en la cama.
-Hoy cocinas tú.-
Me arriesgaba a morir intoxicada, pero la vida es dura.

-Recuérdame que no vuelva a pedirte que cocines en la vida.-dije apartando la tortilla francesa que había preparado.
-Aprenderé. Para la próxima te haré una comida que te morirás de lo rica que va a estar.
-No jures en vano...
-Calla.-dijo riendo.
Lavamos los platos que habíamos manchado y nos volvimos a la habitación.
-Sabes, hoy estás especialmente guapa.-dijo colocando sus manos en mis caderas.
-¿Ah, sí?-coloqué mis brazos alrededor de su cuello.-Demuéstramelo.
Terminamos con las distancia que nos separaba y unimos nuestros labios en un dulce y cálido beso. Sus manos acariciaban mis espalda y caderas. Empezamos a andar sin separarnos ni un segundo y caimos en la cama. Metió sus manos debajo de mi camiseta y siguió acariciando mi espalda hasta llegar al cierre de mi sostén. Separé nuestros labios.
-Yo...-dije nerviosa y tímidamente.
-Sh.-dijo colocándome bien la camiseta.-No pasa nada.-me dio un beso en la frente.-¿Dormimos?
Asentí, me abracé a él y me introduje en el mundo de los sueños.

***

A la mañana siguiente nos despertamos pronto y en poco tiempo ya estábamos todos metidos en el coche. Habíamos quedado en pasar por casa de Darren, donde nos esperarían los demás.

El viaje habría sido divertido de no ser porque Sam y Chris habían vuelto a discutir. Se podía sentir la tensión a kilómetros de distancia. Sin saber como, Sam y Chris se habían colocado en la parte de atrás del coche dándose la espalda.
Dan y yo nos mirábamos de reojo y a veces nos daban ganas de reir. La situación era un poco cómica, eran como niños. Aun así me preocupaba por la relación de mis amigos. Eran muy monos juntos y no quería por nada del mundo que dejasen de estar juntos.
En dos horas llegamos al bosque elegido. Aparcamos los coches y nos adentramos en él. Llegamos a un claro donde decidimos poner las tiendas de campaña. Cada pareja, Trevor y Lily, Darren y Kurt, Sam y Chris y Dan y yo, tenía una. Empezamos a montarlas cuando de repente Sam y Christina empezaron a gritar.
-Pues si no te gusta como la monto, ¡no mires!-exclamó Chris. Todos empezamos a mirarles.
-Christina es que si lo haces, hazlo bien. Para esto podrías hacer otra cosa, no sé, como bailar un poco.
-Pero, ¿de qué vas?
-De lo que quieras. Parece que nada de lo que hago está bien. A lo mejor estarías mejor sin mí.-no podíamos creer lo que estábamos oyendo.
-No me tientes Samuel. No quieres oir lo que puedo decir.-que dijese su nombre completo no era bueno.
-¿Me quieres dejar? ¡Pues hazlo!
-¿De verdad? Pues se acabó, ¡terminamos!
-¡Pues bien!
Chris siguió montando la tienda de campaña, pero con mucha furia. Y Sam se fue a pasear por el bosque con aire enfadado.
Sin duda esta acampada iba a ser la mejor de todos los tiempos.

UPS UPS... PROBLEMAS EN EL PARAÍSO. JEJEJJE :3 POR FIN LLEGAN LAS VACACIONES Y OS PODRÉ TRAER LOS CAPÍTULOS A UNA HORA NORMAL Y NO POR LA NOCHE. (Por lo menos aquí, en España) ME GUSTARÍA SABER DE DONDE SOIS, PEQUEÑAS PERSONITAS QUE ME LEEIS, ASÍ QUE, SI QUEREIS, DEJADMELO EN LOS COMENTARIOS! VOTAD SI OS HA GUSTADO Y MUCHÍSIMAS GRACIAS! AQUÍ ABAJO OS DEJO LA CANCIÓN QUE MENCIONO EN EL CAPÍTULO 😘

And Their Eyes Met.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora