La Historia de un Amor No Correspondido {KageHina}

~Capítulo 7~

Writter's Pov

Ya eran las nueve y Hinata estaba en la azotea esperando a Yamaguchi. El frío del otoño inundaba todo el lugar. El pequeño pelirrojo estaba apoyado en una pared restregandose las manos cubiertas por guantes, mientras sus dientes tiritaban al compás que todo su cuerpo, divirtiéndose con el vapor que salía de su boca, hasta que el viento frío le provocaba daño en la garganta y nariz haciendo que guardara su cara en busca de la calidez de su bufanda.

Pasaron unos diez minutos y entonces se abrió la puerta dejando ver un mechón bailarín inconfundible.

"Uff...", sopló Yamaguchi intentando entrar en calor. "Siento llegar tarde no encontraba los guantes", dijo enseñando sus manos cubiertas por unos guantes negros mientras escondía todo lo que podía su cabeza en su bufanda.

"No pasa nada", contestó Hinata dejando escrito cada palabra en el manto del frío de la noche.

"Y bien... ¿Qué es lo que me querías decir?", pregunto el pecoso animado mientras movía su cuerpo para entrar en calor.

"Primero dime tu", dijo Shōyō con las mejillas rojas por el frío pero el ya no tenía frío. Su color era debido a pensar en la persona que quería, a no rendirse... a intentar enamorar a la persona que tanto amaba. El nerviosismo, el frío, los latidos de su corazón, Kageyama... todo eso, demasiadas emociones.

"A ver...", de repente Yamaguchi se sonrojó como en su vida, escondió su cabeza en su bufanda mientras negaba arduamente. Comenzó a tartamudear, no se le entendía absolutamente nada.

"Shh... Tranquilizate... Vo-ca-li-za", le intentaba tranquilizar Hinata cogiéndole de los hombros.

Yamaguchi se separó de su bufanda y mas rojo que el pelo de su acompañante intentó hablar coherentemente. "Tsukki y yo... em... Tsukki estaba... celoso y ...luego... emm... no se", el corazón le latía a mil por hora no podía articular una oración sin un emm de por medio o sin tartamudear. "Yo... emm... Tsukki... somos pareja", lo ultimo lo susurró de manera que ni si quiera él lo podía oir pero Hinata puso el oido.

Su cara demostraba sorpresa. "Pero ¿por qué mierda me sorprendo? Si yo esto ya lo sabía. Bueno no sabía que ibais a acabar juntos pero si que el estaba coladito por ti. Hombre había que estar ciego o ser muuuuy pero que muuuuuuy espeso para no verlo", comenzó a dar saltos de alegría mientras su pelo saltaba al compas que él. "Hahahah estoy muy feliz", decía aun dando saltos, de repente paró de dar saltos y lo miró con sus grandes ojos ladeando la cabeza, con la boca entre abierta. "Lo habéis hecho ya".

"¿Q-Que?", articuló Yamaguchi pareciendo una fresa por el color de su cara y sus pecas adornándola. "No llevamos saliendo ni un día entero como quieres-", fue interrumpido.

"No es por nada pero os conocéis desde... hace tanto que seguro que ni lo recuerdas", el pelirrojo alzó la mano cerrando los ojos. "No hace falta que comentes nada, ya se que recuerdas cada detalle de vuestras vidas", Yamaguchi sonrió avergonzado rascándose su mejilla con su dedo índice. "Pero el caso es que os conocéis prácticamente de toda la vida, no sería tan raro que lo hicieseis. Vamos digo yo...", hablaba Shōyō como si estuvuera hablando de naranjas. "Además se te nota que tu le tienes ganas y él a ti también", comenzó a irse por las ramas cambiando su tono de voz de uno normal a uno un poco mas perverso mientras le daba codazos al mas alto.

"Aghh...callate", dijo Yamaguchi dándole un pequeño empujón.

"Ey... asi pareces Tsukishima", se quejó Hinata haciendo un mohín.

"Vale, vale ...lo siento", se excusó intentando cambiar de tema... "Ahora si, ¿que era lo que me querías decir?" ...cosa que consiguió.

"Omp.. Heheh", su expresión cambió radicalmente, metió sus manos en los bolsillos de su abrigo. "Mmm... A ver, ¿como lo digo?", se preguntó a si mismo. "Yo, creo... Yo me voy a confesar", al terminar de decir eso un escalofrío recorrió su cuerpo, el miedo le invadió, tantos años de amor unilateral, tantos años con miedo... tantos años así y se había cansado, ¿quien no se cansaría si ves a la persona que te gusta todos los dias de tu vida? Quien sabe... quizas Kageyama se lo tome a taaan bien que corte con su novia con la cual lleva saliendo años solo por él... ¿En que mierda estaba pensando? El agobio invadió su cuerpo. "Uff...", suspiró. "Seguramente me diga que no pero ya no lo aguanto mas".