La Historia de un Amor No Correspondido {KageHina}

~Capítulo 14~

"¿Cuántas veces os tengo que decir que no corráis de esa manera? Por dios darme un respiro...", decía Daichi frotándose la cara con la mano derecha mientras su mano izquierda estaba apoyada en su cadera, poniendo una pose de cansancio. "Aun tengo pesadillas con la peluca del director", murmuró con un escalofrío recorriéndole la columna vertebral y deslizarse por cada una de las vertebras para llegar a cada extremo de su cuerpo.

"Bueno... Bueno...", intentaba calmarle Suga pero parecía que esta vez no iba a funcionar porque ni se enteró de que le había hablado.

Con cara de enfado, no, con cara de demonio cabreado Daichi no les gritó... cosa que era como mil veces peor, les habló de forma calmada. "Tu... Hinata no te van a lanzar ningún balón a no ser que sea en la recepción", el pelirrojo abrió la boca de tal manera que parecía que su alma intentaba escapar de su cuerpo. "Tu... Tanaka hoy van a venir Kiyoko y Yachi pero tú vas a estar con una venda en los ojos", su cara empalideció de tanto que parecía el pelo de Sugawara. "Tu... Nishinoya...", se quedo pensativo durante unos segundos con la mano derecha en la barbilla aquella mirada fija ya era suficiente castigo. "Asahi", le llamó haciendo que Noya levantara la cabeza rápidamente.

Se encaminó al lado del capitán algo asustado y éste le dijo algo al oído que solamente él escuchó. "N-No puedo decir eso Daichi", se negó haciendo que éste se callara y pensase durante unos segundos.

"Pues tu también estas castigado", dijo sin más moviendo la mano derecha con un aura irrefutable. "Vamos a ver... vas a dar 100 vueltas al gimnasio, pero por fuera", habló como si se tratara de nada... pero ni el mismísimo Jesucristo podría hacer eso. En el momento en el que se iba a quejar Daichi como todo un mago diabólico se le adelantó sabiendo con certeza las palabras que estaba pensando. "A ellos no les pongo ese castigo porque cien vueltas para ti no es nada, ¿a que no hombretón? Ala, empieza", le dio una palmada en la espalda que por poco le saca el omoplato y no le pudo discutir.

Daichi se frotaba la barba como todo un villano de Disney mientras miraba a los que quedaban, Nishinoya y Kageyama. Sabía que castigo ponerle a Kageyama pero no se lo estaba pensando porque era demasiado cruel por lo que siguió con Noya. "Tu... no vas a poder decir rolling thounder en lo que llevamos de semana ni nada por el estilo y si lo haces dormirás con Tanaka en lugar de con Asahi", el libero se quedó con la boca abierta tras oír lo que dijo. Y ahora era el turno de Kageyama que parecía que sudaba hielo de lo frio que estaba. A Daichi le dolía lo que estaba a punto de decir pero si no se ponía duro de vez en cuando no le harían caso nunca. "Hoy no vas a hacer nada más que dar bebidas y no te puedes quejar", Tobio puso la misma cara que Noya y tenía el doble de ganas de decirle lo que pensaba pero al capitán no se le puede negar nada. Esta vez si que le habían enfadado.

"Daichi... ¿no te has pasado un poco?", le preguntó Suga para intentar disminuir esos castigos.

"AH... ¿Me refutas?", preguntó con indignación y una sonrisa adelantándose hacia él. "Pues tu también estas castigado. Ya verás esta noche", dijo dándole una palmada en el culo.

Todos los integrantes del equipo saltaron al oír aquello, no los anteriores de Karasuno sino los que casi no conocían los de primero. "¿¡¿Como!?", se exaltaba uno. "No puede ser, ¿¡¿verdad!?!?", decía otro. "¡Suga~sama!", repetían su nombre de forma demasiado formal su club de fans; porque era cierto Sugawara tenía un club de fans, se formó nada mas entrar a la universidad... lo cierto era que el peliplateado no comprendía la razón pero era mas que obvia... ¿Quien no ama a Suga?

"Oy... Capitán ¿que les pasa a esos?", preguntó Hinata poniendo cara de Bokuto.
"Nada... Son sus fans", hablaba Daichi con cara una cara que pondría los pelos de punta a cualquiera.

El pelirrojo comenzó a temblar y retroceder mientras miraba aquella terrible expresión. "¿T-Tu estas bien... c-capitán?", preguntó no con miedo sino con algo peor.