Vacaciones Para Recordar

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-te quiero. Me dice y sonrió.
-también te quiero cariño. Le digo y me besa.
Nos sentamos a comer y comemos solo mi chico y yo.
Maria comerá en casa de una amiga.
Lucas ladra y yo le doy algo de mi comida.
-hoy podemos hacer algo, ya es fin de semana digo y el me mira.
-que quieres hacer? Me dice y bebo de mi coca cola.
-no se, podemos ir a casa de ivonne, o de compras..le digo y el sonríe.
-de acuerdo, iremos a comprar ropa para jeremy, dice mi chico y sonrió.
Terminamos de comer y mientras recojo la mesa mi chico se fuma un cigarro en el patio.
Echó agua y comida en los cuencos de Lucas y le agradece con un ladrido.
Me cambiare de ropa para ir de tiendas.
Me pongo un pantalón ajustado, una blusa y unas zapatillas de cordones.
Bajo las escaleras y mi chico esta en el sofá.
-oye nena de verdad crees que tengo que hablar con mi padre? Me dice y me acerco a el.
-izan no digo que tengas que darle toda tu confianza en una sola conversación, solo creo que tienes que escuchar aunque sea por lo hizo, que se explique porque se marcho..le digo y el bufa.
Mi chico se cambia de ropa y lo veo sexy.
Un pantalón de chándal negro, una sudadera y unos zapatos de deportes, la sudadera le queda algo ajustada por su crujiente cuerpo.
Pone sus gafas de sol y nos montamos en el coche.
-de todos modos tengo que hablarlo con mi hermana, a ella tampoco le har gran ilusión.
Dice y yo asiento.
Miro por la ventana y muchos pensamientos inundan mi mente.
De repente suena mi movil, es mama.
-mama? Hola que tal estas?? Le digo contenta de escucharla.
-hola cariño, estoy bien y tu? Como esta mi nieta? Dice y yo río.
-mama sera un niño, y se llamara Jeremy. Le digo y ella se alegra.
-un niño, siempre quise tener un niño. Dice y yo protesto.
-gracias mama te quiero. Le digo y ella ríe.
Después de un buen rato hablando con mama, izan aparca el coche y nos bajamos.
Entramos en la tienda y hay mucha ropa, me encanta toda.
La gente me mira y mira mi barriga.
Izan va directo a unos pantalones de chándal de niño.
-oh, me encantan, se ven tan pequeños. Digo y mi novio los mete en el carro.
Cojo unos deportes para mi niño, unos pantalones que parecen de hombre mayor, unos gorritos y ropa de recién nacido.
También unos baberos, biberones, hasta un plato con una cuchara para los cereales.
Terminamos de comprar y vamos a casa a guardar todo en su armario.
En principio dormira con nosotros como es lógico, luego terminaremos de arreglar la habitación de sus padres y haremos la suya.
Al llegar a casa entro corriendo al baño y hago pis.
Cuando salgo saco toda la ropa de mi niño y la subo a mi armario, que ahora es también suyo.
Cualgo toda la ropita en las perchas y escucho el timbre.