Family Business

Capítulo 27

Emma se quedo un rato más nadando en el arroyo para poder calmar su mente luego del beso con Killian. Sus emociones y sentimientos estaban tan mezclados, que lo mejor que podía hacer en ese momento era nadar para despejarse y descargarse. Una vez que estuvo satisfecha, o mejor dicho agotada, decidió volver a su casa. Por suerte la lluvia seguía siendo leve, por lo cual sus padres no tendrían que enojarse tanto por su retraso. Llegó a su casa y como esperaba, por supuesto, David y Mary Margaret la estaban esperando en el comedor.

- ¡Emma! ¡Al fin! ¡Estábamos muy preocupados! – Exclamó Mary Margaret haciéndose camino hacia su hija para abrazarla.

- Estoy bien, solo es un poco de lluvia. – Dijo Emma apartándose para no darle oportunidad a su madre de abrazarla.

- Pero como sabes las lluvias acá son peligrosas. – Dijo David, recordando como el primer día que ella llegó casi tuvo un accidente de ser aplastada por un árbol por culpa de una tormenta.

- Aparte la última vez que te agarró una lluvia te enfermaste y tuviste fiebre. – Agregó Mary Margaret.

- Si, lo recuerdo, aunque más bien lo recuerdo como el día que casi pierdo a Buttercup. – Dijo Emma de manera fría. – No sé para que lo traje, si total lo perdí de todas maneras. – Añadió cruzándose de brazos.

- ¿En verdad queres volver a tener ésta conversación? – Preguntó David frustrado. – Nosotros solo estamos tratando de cuidarte. – Justificó.

- Entonces no lo están haciendo bien. – Dijo Emma y se dirigió hacia las escaleras.

- ¿Qué se supone que significa eso? – Preguntó Mary Margaret siguiéndola.

- ¿Y que estabas haciendo en la competencia de skate? – Preguntó David agarrando del brazo a Emma para que no suba las escaleras.

- ¿Cómo saben que estaba en la competencia? – Cuestionó Emma soltándose de su padre.

- Regina nos dijo. – Respondió David.

- ¡Claro, me olvido que ella siempre sabe todo! – Comentó Emma molesta.

- Emma... - Comenzó a decir Mary Margaret.

- ¿Quieren saber por qué participe de la competencia? – La interrumpió Emma. – Porque quería ganar, quería la plata que le dan al ganador. – Dijo seriamente

- ¿Para qué ibas a querer trescientos dólares? – Preguntó David con una mezcla de confusión y curiosidad.

- Para irme lo más lejos posible de éste lugar. – Contestó Emma con sinceridad.

- ¿Te querías escapar? – Preguntó Mary Margaret horrorizada. - ¿Por qué? Nosotros somos tu familia Emma y éste es tu hogar. – Dijo con la voz llena de dolor.

- Toda mi vida quise tener una familia y un hogar. – Confesó Emma. – Había perdido las esperanzas de conseguirlo, pero ustedes me la devolvieron. – Dijo y se tomó una pausa para pensar bien lo que quería decir.

- ¿Entonces por qué querías irte? – Intervino David ante el silencio de su hija.

- Porque ustedes me lastimaron, me lastimaron peor que nadie. – Respondió Emma de manera acusadora. – Yo pensaba que ustedes me amaban. – Dijo con la voz temblorosa.

- Nosotros te amamos. – Aseguró Mary Margaret.

- ¡¿Cómo me podes decir eso cuándo dejaron que pierda a Buttercup?! – Preguntó Emma furiosa. – Sé que no lo van a entender, pero yo perdí demasiadas personas en mi vida. Ingrid, Lily, Neal, Henry... y ahora Buttercup. Y con cada perdida, pierdo una parte de mi ser. – Explicó con los ojos repletos de lágrimas. – A Buttercup lo perdí por culpa de ustedes y nunca les voy a perdonar eso. – Concluyó.