Bonnie.
Luego de que Chica oyera el audio, me trató de animar toda la tarde, pero nada, tampoco quería salir, así que nos quedamos en casa hablando.
-Bon... Sabes que no lo voy a perdonar este vez ¿Verdad?- dijo mientras peinaba mi cabello. -No debes confiarte de la gente adinerada-
-En Fred si podemos confiar...- susurré sabiendo que ella me había escuchado.
-Todos confían en Freddy...- su tono de enamorada no se lo quita nadie. -Pero sabes que si le dices esto, correrá buscando a Frank y lo matará, es casi igual de celoso que tu hermano-Reí un poco y pude sentir que ella me dedicó una sonrisa, me alegro que sea mi amiga, aunque más que eso, es como mi hermana.
-Entonces- dejó de peinarme y me hizo voltearme para mirarla. -¿Tomaste una decisión?-
Suspiré.
-No, sabes que me gusta mucho y en verdad que es doloroso todo esto, pero no quiero, realmente no quiero perderlo esta vez...- me abrazó mientras yo mordía mi piercing para no llorar otra vez.
Nos quedamos así varios minutos hasta que rompí el silencio.
-Es verdad... No puedo terminar con él porque no somos nada...- me separé de ella. -¿Qué mierda hago sufriendo aquí si podemos irnos de compras en este instante?- sequé mis lágrimas con las mangas de mi pijama y me levanté para irme a cambiar de ropa.
-Nos vamos de compras entonces- sonrió levantándose de mi cama. -¿Podemos invitar a Freddy? Antes salíamos mucho, siempre nosotros tres-Asentí, y cuando terminé de vestirme, salimos en dirección a casa de nuestro amigo.
No tengo que sufrir por Frank, voy a pasarla bien con mis amigos y voy a olvidar todo lo que pasó hoy en la mañana..
.
.
-¡Esperen! ¡No puedo correr más!- gritó Fred apoyándose en una de las paredes para descansar.
Acabábamos de estar en el supermercado y no se nos ocurrió nada mejor que subir a Chica a un carrito e ir destrozando cosas hasta que uno de los guardias nos vio y tuvimos que salir corriendo de ahí.
Estábamos en la quinta planta del centro comercial, justo en los lugares de comida.-Creo que de tanto correr me dio hambre- dijo Chica tocando su estómago mientras recuperaba la respiración. -Vamos a comer-
-Si, también tengo hambre, ¿Qué dice...? ¿Freddy?- el castaño estaba tirado en el piso hecho una bolita mientras la gente lo miraba como si fuese un vagabundo. Y claro, nosotros no aguantamos las carcajadas.
Al calmarnos, ambos lo tomamos de las manos y lo arrastramos hasta que decidió pararse.
Como ya no era hora de almorzar, decidimos ir directamente por los postres.
Donas, pastelitos, de todo.
Rodaremos felices por la vida.
ESTÁS LEYENDO
Diary Of A Guitarist 「Fonnie AU」
Fanfic«Esto NO es un diario, sólo las nenas hacen eso y yo no soy una, por lo tanto, esto es una maldita agenda» Todos los derechos reservados Copyright 2015©