Todos los muertos resucitan: Lily, James, Sirius...

Reencuentro familiar y visita a la enfermería

Harry Potter despertó con Ginny abrazándole. Se sentía bastante descansado y confuso. ¿Qué había pasado?

-Harry, cariño...-dijo una voz extrañamente familiar.

Miró a su alrededor y profirió un grito de asombro que despertó a todos en la habitación.

-¿¿¿Mamá???-interrogó Harry a una Lily que le sonreía a unos metros.

-Hola Harry-dijo James que estaba detrás de ella.

-Pa...papá

-Por favor, no me gusta que me discriminen-dijo Sirius que había aparecido en le marco de la puerta.

-Sirius...

Harry no pudo contenerse. Se lanzó a abrazarlos a todos. Se sentía confundido. Dolorosamente feliz. ¿Estaba muerto? ¿Qué estaba pasando? Cuando el muchacho, sus padres y su padrino lograron tranquilizarse por la euforia del encuentro, Harry recordó a Ginny. Ésta miraba la escena desde la cama donde habían dormido. Se acercó a ella y la cogió de la mano, dispuesto a presentársela a sus padres.

-Papá, Mamá...ella es Ginny. Mi chica.

Ginny les saludó algo cortada y de manera educada. Harry le había hablado de ellos muchísimo y de cuánto les echaba de menos. Era extraño saludar a quien nunca creíste que fuera posible conocer.

Abrazó a Sirius quien había sido un buen amigo en los años de reuniones de la orden.

Albus Dumbledore apareció en los dormitorios unos minutos después. Había estado toda la mañana intentando solucionar las cosas que más urgían, entre ellas, había puesto al corriente en el Gran Comedor de la identidad de las personas aparecidas entorno al Elegido. La noticia de que los Potter y Sirius Black había vuelto de entre los muertos ya había llegado a oídos de "El Profeta" y toda la comunidad mágica estaba al tanto de tan sorpredente novedad.

-Lily, James, Sirius os agradezco que hayáis esperado aquí toda la mañana hasta ahora. Me he encargado de todo, ahora el único que necesita respuestas es Harry.

Albus puso al tanto al joven potter del hechizo que se había activado cuando éste había derrotado a Voldemort. Harry comprendió con una sonrisa en el rostro y sintiéndose plenamente feliz, pero recordó el rostro de Hermione, de Ron y todos los demás amigos y conocidos.

-¿Y los demás? ¿Dónde está Hermione? ¿Y Ron?-dijo Harry un tanto alarmado.

-Ron estará por ahí con Lavender y Hermione está en la enfermería ayudando a curar a los enfermos y haciendo compañía a Remus. Thonks, su mujer, ha muerto en la batalla y...-explicaba su chica hasta que Sirius la interrumpió.

-Espera, espera...¿Remus? ¿Estamos hablando de nuestro Lunático? ¿Mujer? ¿Qué me he perdido en estos dos años?

-Remus se casó con Thonks y tuvieron un hijo hace unos meses.

-Vaya, también padre, quién lo habría dicho-añadió James Potter.

-Pobre Remus, viudo y con hijo...-susurró Lily entristecida.

Harry la abrazó con fuerza para que su ánimo se avivara.

-Ahora que lo pienso eso me convierte en tío, el hijo de Remus y Nymphadora es sobrino mío-dijo Canuto.

-Sí y yo soy su padrino-explicó Harry a los presentes con orgullo.

Mientras en la enfermería...

Remus abría los ojos poco a poco. Le dolía todo el cuerpo, pero una sola persona giraba en su cabeza: Thonks. Se incorporó con rapidez y volvió a caer abatido sobre la almohada. Cuando volvió a enfocar la vista se encontró con unos ojos de color miel, observándole preocupados.