-¡Hola mi amoooorrrr! - me tocó una teta. Era evidente que iba muy borracha.- ¿Dónde estabas? Creí que estabas con el rubio guapetón...
-¡Qué va, que le jodan a ese gilipollas! Yo he estado bebiéndome unas cervezas con aquellas guapuras de allí -señalé donde se encontraban los chicos.
-Joder. ¿Slash y Axl Rose? ¿Qué haces tu con esos dos?
-Axl me ha tirado mi cerveza así que le ha tocado invitarme a otra...
-Que hija de puta eres... Ah, Fe se ha pedido un taxi para ir a casa, el otro chico la ha acompañado... No la he querido decir nada porque ya es mayorcita, pero sabemos a lo que iba...
Lo peor de eso es que Pau llevaba razón. Fe ya era mayorcita para saber lo que hacía y lo que no. No somos su madre para decirla lo que debe o no debe hacer. Pero somos sus mejores amigas. Es nuestra mejor amiga y es lógico que nos preocupemos, ¿no?
-¡Ey, pequeña!- Axl me sacó de mis pensamientos de madrecita.- Te había perdido de vista...
-Estaba aquí, con Pau...
-Uuuuy ¿no me presentas a tu amiga?
Pauline se puso como un tomate. ¿Desde cuándo ella se sonrojaba con un chico? Bueno, siempre pero no mientras estaba ebria...
-Soy Pauline pero puedes llamarme Pau...- me quitó la frase de la boca.- Slash, ¿verdad?
-Ajá, el mismo. Chicos ahora venimos. Vamos a por algo de beber.
Y allí nos quedamos Axl y yo. Mirándonos sin decirnos nada, hasta que él me sonrió, y yo claro, le devolví la sonrisa...
-¿Te ha molestado que te diga "mi chica"? Es que era un puto perro baboso en celo...
-No, no te preocupes jajaja. Me ha hecho mucha gracia, en verdad.- no me importaba que me llamase así, ni que llevase toda la noche invitándome, ni que me hubiera agarrado la mano. Eso último me había puesto de los nervios. Mucho. Creo que sólo había estado tan nerviosa en mi primera vez con Adrián, mi primer novio... Total, para que me hubiera salido rana. Igual que Marcos. Esos dos hijos de puta me habían amargado la existencia. Me habían utilizado a su antojo como a un puto trapo de mierda.
Paré mis pensamientos en seco. ¿Y si Axl sólo quería follarme y dejarme tirada como todos? No podía ser así... ¿O sí? Joder.
-¿Te quedas siempre así? Mirando a la nada, en blanco jajaja.- Estaba seria de repente y el lo notó, obviamente.- ¿Te preocupa algo, verdad?
¿Se estaba preocupando por mí? Sí, estaba preocupándose por una tía a la que acababa de conocer... Y de repente veía borroso. Me salieron las lágrimas solas, sin poder evitarlo. ¿Por qué?
Me miró tierno y me abrazó, apretándome contra él, tratando de calmarme.
Me cogió de la mano otra vez y me llevó fuera del pub. Seguimos caminando de la mano vasta que encontró su coche.
-Siéntate atrás, ¿vale?- abrió la puerta del piloto, puso la calefacción y volvió atrás conmigo. Y yo seguía llorando. Tratando de parar, sin éxito.
-Shhhh... Ya está, tranquila
Puso mi cabeza en su pecho y empezó a acariciarme el pelo. Despacio. Calmándome, a mi y mis nervios, mis indecisiones, mis sentimientos... ¡Estúpidos sentimientos!
-Sea lo que sea que te preocupa, estoy contigo, ¿de acuerdo? Tranquila...
Levanté la cabeza y lo miré, directamente a sus bonitos ojos azules, confiada de lo que iba a hacer.
Y se lo conté. Todo. ¡TODO!
