Capítulo 2: Una visita inesperada

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Narrador Fernanda: 

Pasaron los años desde que Anakin y Padmé, se separaron a partir de una mentira que el consejo decidió crear para "salvar" supuestamente a la galaxia; pero yo no he estado de acuerdo con el consejo, desde que me incorporé al Templo Jedi, no como Jedi, pero sí como consejera de todos los ciudadanos de la República. El consejo y sus dichosas reglas, fueron los responsables, al igual que el Emperador Sidious, de hacer que Anakin se uniera al lado oscuro y provocar que la familia Skywalker se separara, ellos me pidieron que me infiltrara en el imperio como aliada, para poder espiar cada movimiento del Emperador y sus secuaces; pero no tenían en cuenta, que mi verdadero propósito es hacerles ver, que el amor es mucho más fuerte que sus ideales y sobre todo, hacerles ver que sus absurdas leyes ya no sirven en estos tiempos. Por lo que mi propia misión, sería hacer que el amor derrotara al mal haciendo cambiar de bando a Anakin, porque para mí Anakin nunca ha sido Darth Vader, porque él ha insistido en actuar como alguien que no es y de alguna forma u otra, lograré devolverle la felicidad que tanto anhela y necesita. 

Anakin/Vader: - General Fernanda, tengo que hablar con usted - odio cuando Anakin me habla de usted y sobre todo, que tenga que acatar las órdenes de Darth Sidious. 

Fernanda: - Dígame, Lord Vader, ¿qué se le ofrece? - dije con sarcasmo.

Anakin/Vader: - Al emperador, no le agradan sus métodos de actuar ya que piensa que puede estar intrigando contra su lealtad hacia el imperio - dijo sin ninguna expresión y ésa era mi intención, sólo que siempre disimulaba mis intenciones para no poner en riesgo la vida de todos.

Fernanda: - Pues dígale al Emperador, que mi intención no es esa, pero que no me pida actuar de otra forma, porque lo único que va a hacer es fastidiarme con sus quejas - dije con enojo, el emperador, lleva años exigiéndome que debo comportarme de cierta forma; pero como le doy el avión pues no me importa - y sobre todo, a usted le digo de una vez que no intente convencerme de nada porque es una batalla perdida y lo sabes.

Anakin/Vader: - Fernanda, ¿qué estás intentando hacer que te maten por no obedecer órdenes? - preguntó impaciente.

Fernanda: - ¡AH! Yo nunca he desobedecido las órdenes de tu dichoso maestro Anakin, pero bien sabes que me fastidia que tú le hagas caso cuando él es el verdadero enemigo y no me reclames nada, porque bien sabes que estoy diciendo la verdad; sólo que no sé porque no me haces caso - dije enfadada - y peor aún, que me exijan que lo haga a su manera. 

Anakin/Vader: - Ya basta de tus insultos, si estás aquí es para obedecer a mi maestro si no quieres morir y sobre todo, porque tú juraste lealtad hacia el Imperio, así es que te sugiero que no vuelvas a reclamar por las peticiones de mi maestro que también es tu maestro - dijo sarcásticamente. 

Fernanda: - Mi maestro, siempre será Dios y nadie más ¿entendido?, creí que eso le había quedado claro, desde el día en que me conoció general Skywalker - dije con ironía y enfado. 

Anakin/Vader: - No vuelvas a llamarme así, ya te lo había dicho - se enfureció.

Fernanda: - Como usted ordene, ¡GENERAL!

Después de eso, me dirigí a mi habitación frustrada por esa conversación y después de 5 segundos, Anakin fue a mi habitación para hablar en privado. 

Anakin/Vader: - Fer, por favor, no quiero que mi maestro se atreva a hacerte daño por tus ideales y tu forma de hacer las cosas, te entiendo perfectamente, pero ahora tú eres lo único que me queda para ser feliz aunque lo disimule; pero necesito que te mantengas con vida para seguir vivo porque no quiero caer en las trampas del emperador - dijo con tristeza y seriedad.

Fernanda: - Anakin, bueno Vader, su felicidad no debe depender de una persona o de algo, eso depende de ti mismo; porque si tú no eres seguro de lo que haces, de nada sirven tus sacrificios porque debes demostrarlo en cuerpo y alma para que la felicidad sea completa - le dije eso, porque nunca ha sabido ser seguro de sus capacidades, porque los maestros del templo siempre lo criticaban de todo lo que hacía y eso, fue demeritando su autoestima; por esa razón lo regaño, para que pueda pensar por sí mismo y no dependa de las decisiones de nadie - yo entiendo, que muchas de las cosas que hizo fueron por voluntad propia y estaba seguro de eso pero también es necesario aceptar y reconocer ¿qué fue lo que hicimos mal?, para luego aprender de ello y que después los corrijamos. 

Star Wars: El amor lleva al arrepentimiento y al perdónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora