1972

682 71 32
                                        

"Pasa, por favor" Le dijo David a Jane.

Jane acababa de pasar por el portal de la nueva vida de David (Quien ahora se hacía llamar "David Bowie", o como su alter ego "Ziggy stardust"), su esposa, Ángela estaba jugando con su hijo Duncan, un hermoso niño de al menos dos años.

"Cariño, ella es Jane" Le dijo David a Ángela.

"Oh, mucho gusto... He oído que son muy buenos amigos, ¿No?" Ángela la miró con una amplia sonrisa y la mano extendida.

"Así es, y es un placer conocer a la persona que lo ha guiado en su vida artística, ya sabes como es David" Le sonríe Jane.

"Bien, esperame aquí, no tardaré" Le dijo David a Jane. Ambos irían a una discoteca pop.

Jane se sentó y esperó a David por más de media hora, pero eso no le importaba. Era la primera vez desde 1969 que no se veían en persona, Jane ya había escuchado del éxito de David Bowie y, además, le habían encantado las canciones de su último álbum, el cual lo acababa de llevar al éxito.

David salió a la sala, con un extraño traje de colores y unas llamativas botas rojas con plataforma y un maquillaje despampanante. Jane se quedó sin palabras al verle. Esta era la fase mas loca y extraña que había visto de David. Y eso le encantaba.

David sonrió al ver su expresión, se veía tan tierna como siempre. "¿Nos vamos ahora?" Le preguntó.

Llegaron a un club oscuro, con luces de colores y música alta. David se sentó con ella en una mesa y pidió un trago.

"¿Tienes las uñas pintadas?" Le preguntó Jane.

"Así es, aunque es sólo un brillo" Dijo, mirando sus manos. "¿Como es tu vida ahora?"

"Bien, sigo soltera, tengo una pequeña casa al norte de Londres y sigo escribiendo de vez en cuando..." Le respondió ella.

"Tus escritos deben ser hermosos, pues tu expresión en las cartas que me envías es excelente" Le dijo David, encendiendo un cigarro entre sus manos "Ahora tengo muchos fans que me envían cierta correspondencia, parece que tengo cierta influencia sobre ellos, muchas chicas e incluso chicos, me envían sus fantasías eróticas sobre mí y, bueno, te mentiría si te dijera que no las disfruto"

"Suena muy divertido" Jane le sonreía " Hay un chico, ya sabes, Paul pero la verdad es que nunca hemos... Ya sabes, es que no lo sé, quizás le tengo cierto temor a lo que pasará después"

En eso, un chico se acerca a David y le pregunta si era Ziggy, a lo que le respondió que sí, entonces el chico se abalanzó a darle un abrazo y luego un beso en la mejilla, a lo que David solo respondió con una risita.

"Siempre pasa" Dice David "Es divertido Jane, no tienes nada que temer..."

Jane rió, mostrando sus hermosos dientes y marcando los hoyuelos en su rostro.

Mas tarde, esa noche, después de un incidente en el club en donde estaban, ambos decidieron ir a la pequeña casa de Jane, al norte. Jane les sirvió un poco de vino y ambos se sentaron a hablar en el sofá.

"Claro que, bueno, me gustaría que me ayudaras a escribir una canción alguna vez... Bueno, mis canciones son algo extrañas si, pero la verdad es que he escrito algunas pensando en ti..." Le dijo David, con una sonrisa en los labios y la mirada baja.

Jane se ruborizó un poco. No sabía que había llegado a inspirar a David en una canción, también se preguntaba cual era, él escribía muchas cosas interesantes.

"¿Jane, recuerdas esa vez en el club cuando ambos..." Ella lo interrumpió.

"Si, lo recuerdo... Fue una noche muy extraña, fue, ya sabes, mi primer beso" Le confesó ella "Cada vez que lo recuerdo es como pensar en viajar al espacio, recuerdo que mirábamos las estrellas, así que te recuerdo como un hombre de las estrellas... Siempre ha sido así"

David sonrió, dejando ver sus desaliñados y amarillos dientes, todo lo contrario a Jane. Él siempre fue descuidado y ella muy cuidadosa. Norte y sur. Siempre fueron completamente opuestos y al mismo tiempo iguales.

Jane lo miró y no pudo evitar llorar un poco. David la miró fijamente, extrañado por su ataque de tristeza, ella no había bebido en toda la noche.

Él siempre había sido su mejor amigo, sólo eso, sólo el David bizarro, el que ella nunca iba a poder tener en sus manos. Sólo eso. Sólo amigos. Amigos espaciales, el hombre de las estrellas y la simple chica terrestre.

"¿Que tienes Jane?" Le preguntaba él, una y otra vez.

"David yo..." Rió al pensar en la situación y en lo que estaba a punto de decir "Yo creo que te amo"

David la miró, con emoción en los ojos y una sonrisa. La tomó en sus brazos y pasaba su mano por su cabello, tratando de consolarla.

David se repetía una y otra vez su carrera, su familia, su hijo y miró a Jane una vez más. Por él no había problema, pero nunca podría vivir a sabiendas de que destrozó la vida de Ángela y de Duncan, no, nunca. Él sabía que su muerte estaba entre sus brazos, Jane era su muerte.

"No ames a David, ama a Ziggy, él también te ama..." Le dijo David y Jane rió "David es sólo un desastre de ojos extraños"

"Entonces supongo que te amo, Ziggy" Dijo Jane, riendo "Y que tú me amas a mi"

The Stars Of The NightDonde viven las historias. Descúbrelo ahora