Los viajes a la playa deberían ser los mejores, y lo son hasta que una zorra se presenta como novia de tu supuesto novio.
Después de las discusiones que han tenido Rose y Ryan a lo largo de lo que se podría llamar relación, ella decide variar un poco y en vez de hacerle frente, se hace la indiferente.
Durante todo el día tuvo que aguantar el que esa zorra no se separase de él. Casi tienen un momento para hablar pero la zorra lo llamaba y el acudió, quizás eso fue lo que más le dolió a Rose, ¿O fue el verlo con la zorra y un niño en la feria?
Rose no puede estar más confundida, las cosas iban bien y al segundo era todo un desastre...como siempre. Volvieron en coches diferentes y cuando llegaron a la casa ella no le hablo y mucho menos comió.
Ya en su habitación, no la de Ryan, no podía dormir. Tristemente tenía que admitir que el no dormir con él era una autentica tortura. Escuchó voces en el pasillo, era Ryan. Habían ingresado a su abuelo.
Rose podía haberse comportado como una perra durante el día pero en ese momento supo que tenía que salir con lo que llevaba puesto y estar al lado de Ryan. Aunque se hubiese montado la tercera guerra mundial entre ellos, ella lo seguiría acompañando.
Cuando llegaron al hospital, Ryan estaba paralizado y Rose se enteró de que el abuelo de Ryan había sufrido un problema cardiaco.
Ahora solo quedaba esperar.
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Llevábamos en el hospital dos días, o eso creo. Era domingo por la noche cuando vinimos y hoy es lunes a las 3:23 am, es decir la madrugada del martes. Al abuelo de Ryan lo están operando en este momento y no ha podido visitarlo todavía.
Ryan lleva sin moverse desde que llegamos, todavía tiene su abrigo y mi abrigo por encima y la palidez de su piel no desaparece. Le he comprado cafés, agua, comida y aunque no se lo termina nunca por lo menos come.
Algunos parientes de otras familias nos miran con pena, las enfermeras no paran de preguntarnos si necesitamos algo, yo niego todo el rato y se lo agradezco luego miro a Ryan y pienso que quizás el necesita algo. No le he soltado la mano en ningún momento a excepción de cuando iba a preguntar o a buscar comida.
Los padres de Ryan vienen de camino, hoy me han enviado un mensaje diciendo que llegarían por la mañana. Estaban en un viaje en Venecia cuando les tuve que dar la noticia ya que el hospital no lograba contactarles. No sé cómo los médicos anuncian la muerte de un ser querido a sus familiares porque a mí ya me costó decirles que estaba ingresado.
Suspiro y miro a Ryan. Sigue mirando al frente aferrando mi mano lo más fuerte que puede. Como puedo me pongo de lado y le acaricio el pelo. Ahora mismo lo veo como un niño pequeño, no sé qué hacer así que solo apoyo mi cabeza en su hombro mientras muevo mis dedos en su mano para acariciársela.
Los chicos ya saben que estamos en el hospital, han enviado mensajes por el grupo de la casa y yo se los leo, también hay algunas bromas pero él ni se inmuta.
Como podemos dormimos en los asientos de la sala de espera. Dejo que Ryan se tumbe y se apoye en mi regazo que hacen de almohada, luego coloco los abrigos como manta y cuando cierra los ojos sé que es cuando yo puedo cerrar los míos.
Ryan no está en el mejor momento y cuando escuche lo que le había pasado, no dude en ir con él y estar con él hasta que su abuelo estuviese bien. Le quiero y aunque paso eso de la zorra en la playa, el sentimiento no se borra de un día para otro. Estoy cansada de estar rodeada de odio así que si esto que tenemos no funcionase, esperaría que pudiese seguir siendo mi amigo aunque esto no lo sabremos hasta que hablemos.
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Fraternidad mixta...¡UNA MIERDA!
Fiksi RemajaTras descubrir la infidelidad de mi padre y la indiferencia de mi madre, decido dejar atrás el caos familiar y cumplir mi sueño: cambiar de universidad y empezar de cero. Al inscribirme en una fraternidad, esperaba finalmente encontrar paz y tranqui...