模糊

i love you.

—¿Estás Bien?—pregunta por milésima vez el cazador, ante su pregunta vuelvo a asentir —Para solo estar en una semana de reposo mejoras rápido.

  —Si Daryl, me alegro que te preocupes por mi pero si salimos ahora mismo llegaremos a tiempo para cenar junto con Carl y Merle —digo ya un poco mas desesperada al notar que el cazador no esta dispuesto a moverse.

  —Tu me estas usando de pretexto, anda ve hablar con tu amado—responde cruzándose de brazos—mientras mas te muevas sera mas rápido la salida.

Soltando un suspiro pesado camine por esa calle para después tocar la puerta donde antes vivía, sin embargo al hacerlo esta se abrió, enarcando una ceja me adentre al lugar;—¿Rick?—pregunte pero como era de esperarse. nadie contesto

Subiendo las escaleras inspeccione una por una pero no había rastro de él, aprovechando la oportunidad que se me presento saque aquello que me dio Pete, pero en el instante en que escuche que la puerta fue cerrada de golpe, observe rapidamente lo marcado para después tirarlo a la basura.

Saliendo del baño, un Rick con la mirada agachada subía las escaleras, en el momento en que alzo su mentón su mirada choco conmigo, sus ojos azules estaban apagados al igual que debajo de ellos se le marcaban varias ojeras;—Estas aquí.—dice con una sonrisa de oreja a oreja.

—Daryl me dijo que querías hablar conmigo vine y entre el baño eso es todo perdón no fue bueno entrar sin asegurarme que estabas.

—Es tu casa también. Se que no tengo cara para pedirte perdón pero aún así lo hago siempre te amaré a ti ¿Escuchaste?—asentí para que después desesperado buscara algo en su bolsillo—Si quieres perdonarme y volver a intentarlo sólo ponlo de nuevo en tu dedo... Por favor—extendió sus manos, y acepte el anillo—Te Amo.—Tomándolo roce nuestros dedos un poco provocando que tan solo con ello, volviera el calor en mi cuerpo. Con una sonrisa asentí para después pasarlo de largo, bajando las escaleras note su mirada penetrante y antes de llegar al final de estas: —¡Te necesito en mi vida!—exclamo.

Con una sonrisa en mis labios salí de aquella casa para después caminar hacia Daryl, este al verme me dio una mueca;—Vez no fue tan malo—comenta provocando que sonría ampliamente.

Rick seguiría siendo mi perdición.