Capítulo 11

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Al llegar al refugio Hoodie estaba sentado en los escalones. Me costó reconocerlo con aquel pasamontañas raro. Era completamente negro con una cara triste dibujada en rojo. Solamente supe que era él por su sudadera amarilla.

¿Que clase de color es el amarillo para una sudadera de todas formas? Da asco.

Denna se sentó a su lado y yo seguí de largo, entrando en el refugio.

Estaba aburriéndome.

Demasiado.

Pasa el tiempo y llegaron los demás cuando ya estaba anocheciendo. Me dejaron la primera guardia a mí. Luego debería despertar a Denna.

Pues nada, vamos a hacer la primera guardia.

Salí afuera y me apoyé en la pared, colocándome en esa posición que comenzaba a ser tan habitual en mí últimamente.

Me quedé mirando las estrellas y pensando hasta que ya fue hora de despertar a Denna.

Me estaba dando sueño.

En cuanto salió yo ocupé su lugar y dormí casi instantáneamente.

Hace mucho que no descanso apropiadamente.

Los días pasan y me han mantenido al tanto de la situación. Al parecer debemos asesinar a una doctora del pueblo o algo así. Se llama Clara García y aparentemente ya tenían todo el plan realizado.

No se si seré yo quien dé el golpe de gracia, pero no me importa si lo soy.

Si los demás no quieren hacerlo yo no tengo problema en hacerme cargo.

De todos modos, ni siquiera le conozco.

Mañana es el día y de alguna manera notaba a algunos de ellos algo nerviosos, especialmente Denna.

¿No que ellos hacen esto regularmente? No me digas que aún no se han acostumbrado a quitar vidas ajenas.

Tampoco es que sea la gran cosa.

En fin, que con toda esta conmoción es insoportable estar adentro.

De repente estos días he estado yendo siempre al mismo árbol para sentarme a su sombra. Es un poco lejos del refugio pero es silencioso y fresco en estos días de calor, y al no estar tan visible puedo permitirme el quitarme el abrigo de vez en cuando. Ya que no puedo hacer eso dentro del refugio si no quiero que todos los demás se abalancen sobre mí y me bombardeen con preguntas al respecto.

Al llegar al árbol vi una máscara en el lugar en el que suelo sentarme. Era completamente negra con los rasgos en rojo.

-¿Qué significa esto?-Dije enfadada tomando la máscara en mis manos. - Será broma ¿No?

-¿Qué pasa?-Kate llegó corriendo, con la boca llena y la máscara en su cabello.

-¿Qué hace esto aquí? ¿Quién de vosotros ha sido?- Agitó la máscara en mi mano, enfadada.

No hay manera que yo use máscara.

-No ha sido ninguno de nosotros. Tu ya sabes quién ha sido.- Intervino Hoodie con su tono de siempre que me da asco.

Si será hijo de puta el cabron.

Monstruo de pacotilla. Como si yo fuera uno de tus títeres.

Tiré la máscara al suelo con toda intención de partirla.

-No deberías hacer eso, Lucy. Yo tendría cuidado.- Ya me tiene harta.

-Me da igual lo que tú harías, Hoodie.- Completamente rabiosa voy decidida a partir la condenada máscara, pero justo antes de que mi pie toque esa cosa, un dolor insoportable inunda mi cabeza. Obligándome a poner el pie en el suelo para no perder completamente el equilibrio.

¿Como me convertí en esto? (Lucy)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora