Capitulo 36

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CAPITULO 36

Quinn estaba recostada en el sillón junto con música clásica puesta bebiendo una copa de vino leyendo un libro, estaba haciendo tiempo porque en un rato más debía de ir a ver a sus hijos y tomar fotos de recuerdo por el baile de sus hijos.

En eso sintió como alguien comenzaba a tararear una canción y vio como Sam estaba en la segunda planta de la casa.

"pero que guapo, rubio". Aparecía Quinn y estaba viendo como un rubio se ajustaba su corbata frente al espejo, y este le respondió con una sonrisa.

"Gracias, así somos los rubios... Guapos". Y enseguida le guiño el ojo

"... y modestos". Agrego la rubia.

"Que yo recuerde tú también eres rubia..."

"... y guapa". Le interrumpió

"Y guapa". Le respondió riendo

"Gracias Sam, tu sabes que con los años mejoraste pero no puedo sentir nada por ti, eres prohibido". Se mofaba.

"Menos mal que lo tienes claro". Se seguía acomodando la corbata.

"Espero que disfrutes el baile". Bromeo Quinn.

"Solo hago esto porque Mercedes me lo pidió y lo que ella quiera... pues lo tiene... cuando se lo dije me refería a cosas materiales, pero me dice que no está conmigo por el dinero. Ella se compra sus cosas"

"Una mujer independiente, eso es bueno"

"Eso creo pero pago las consecuencias como tener que ayudarla a ser chaperón en el baile"

"Mejor así, porque sé que mis hijos estarán bajo la supervisión tuya... aun que pensándolo bien ellos estando tu o no hacen lo que quieran"

"Ja". Agrego el rubio sarcásticamente. "Ahora déjame en paz que tengo que ir por Mercedes, debemos de estar antes en la escuela y así aprovecho de estar con ella solos en la escuela"

XXXXX

Quinn tomo el auto y manejo hasta su antigua casa, toco el timbre y la persona que estaba frente a ella era Rachel, quien sonrió levemente e invito a pasar a Quinn dentro de la casa.

"Hola Quinn"

"Hola Rachel". Respondió la rubia.

"Toma asiento, Lucas ya está listo quien demorara será Kitty. ¿Te ofrezco algo de beber?". Pregunto la morena.

"Agua estaría bien". Respondió una vez ya sentándose en uno de los asientos. Sonreía mientras veía cada una de las fotos que residían en los muebles, en donde eran protagonistas ellos cuatro.

A pesar de todos los problemas que fueron apareciendo en el camino trataron por todos los medios de ser felices y de demostrarles a sus hijos aquello, pero la rutina y la falta de tiempo comenzó a menguar la relación familiar, no solo de pareja, sino también la relación que Quinn tenía con sus hijos.

Fue sacada de sus pensamientos cuando Rachel volvió con el vaso de agua que anteriormente le había ofrecido, esta lo tomo y vio como Rachel se sentaba frente a ella.

Rachel sabia de debía de darle alguna explicación por su comportamiento de la otra noche. Y como era ya costumbre la rubia no iba a pedirle las explicaciones para el caso, sino que al parecer estaba esperando que naciera de ella decirle.

Tomo aire para hablarle a Quinn luego de unos minutos de silencio cuando sintió como alguien bajaba las escaleras corriendo. Lucas bajaba para así darle la opción a su hermana de hacer una entrada triunfal por las escaleras de la misma casa. Ambas se levantaron de su asiento al ver como su hija, su primogénita baja esas escaleras. Para ambas era una sensación extraña, ver como su bebe ya era toda una mujer, que en un par de meses iba a ir a la universidad y dejaría el nido.

17 Otra VezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora