Piezas de una misma historia /Yaoi/

Capítulo 7

El lunes volvió rápido, Miguel se levantaba todos los días más temprano que su hermano para tomarse el colectivo que pasaba primero y llegar a su universidad temprano, podría haberse anotado en la Universidad que también era secundaria donde su hermano estudiaba pero no tenían la carrera que él quería seguir.
Luego de desayunar el pelinegro prendió el celular de su hermano para que sonara la alarma que despertaría al menor. Sus padres aún estaban durmiendo puesto a que iban con Iván.
Subió al colectivo algo cansado, a estás horas el transporte estaba casi vacío a excepción de unas cuantas personas. Tragó en seco al ver quien era la chica que estaba sentada en el asiento de siempre, aún con el corazón en la garganta y aunque tuviera muchos lugares donde sentarse en vez de al lado de ella, la fuerza de la costumbre lo hizo ir hacia allí.
-Hola, Cam- saludó sentándose, tratando de desesperadamente de que su voz no delatara lo inestable emocionalmente que estaba. Ella volteó a mirarlo y le sonrió algo tímida, Miguel notó la pequeña bolsa de debajo de los ojos de la chica que denotaban que esa noche había estado llorando -¿Te rechazaron?- susurró. Su estado emocional no estaba para sutilezas, ella negó con la cabeza quitándose los auriculares.
-Somos amigas- murmuró -Creo que nunca realmente podré decirle lo que siento- dijo cansada. Ambos se miraron, los dos se veían igual de destrozados.
-Entonces ¿Por qué dejarme?- habló Miguel tratando de no mirarla a los ojos, sabía que la que había sido su amiga por tanto tiempo era una persona realmente sincera y jamás haría algo solo para lastimarlo.
-No te merecías alguien que viera a otra persona además de ti, tu... tu te mereces más que eso- las ultimas palabras salieron casi estranguladas de la chica mientras miraba hacia sus manos -Mucho más que eso- levantó la mirada con sus ojos cristalizados, lo que menos había querido era que sus sentimientos cambiaran, lo que menos había querido era lastimar al que fue su amigo y novio por tanto tiempo.
Miguel trató de mirarla a los ojos sintiendo esa presión tan conocida en los ojos, solo esperaba que ella no empezara a llorar porque él también empezaría a hacerlo y eso ya sería rayas lo patético.
-Hay que tratar de seguir adelante- susurró el chico, ella lo miró asintiendo.
-Sabes que yo jamás te haría daño a propósito, hubiera dado lo que sea para seguirte amando como lo hice en estos años- dijo realmente afectada.
-Ojala tengas suerte con esa chica- sonrió Miguel para calmarla -Yo aprenderé a superarte- murmuró tratando de no parecer tan destrozado como se encontraba, Cam le sonrió con tristeza.
-Lo harás, te prometo... te prometo que lograrás olvidarme de forma romántica, eres la persona más fuerte que conozco, Miguel- dijo abrazándolo. Miguel acarició los cabellos castaños oscuros de la joven mientras suspiraba,
Ahora solo quedaba olvidar.
.
Cuando llegué al aula Iván y Sebastián ya estaban en sus respectivos asientos, ambos estaban conversando de la tarea de matemáticas y cuanto les dio cada cuenta... ¡Mierda! ¿¡Había tarea de matemática!? Y para colmo, no tengo a nadie que pueda pasármelas. Con suerte logró hacer algunos ejercicios en el recreo.
Sin saludarlos camino hacia el banco que esta atrás del suyo, mi compañero de banco es un tal "Luciano" que hasta ahora había faltado la semana pasada porque se había ido de viaje con el equipo de natación hacia una competencia.
Poco a poco varios compañeros empezaron a llegar.
-¿Y de que me perdí?- dijo un chico de cabello castaño muy oscuro y algo largo parándose en frente de Iván, sonriendo se le formaba un par de hoyuelos algo adorables.
-Tenemos mucha tarea- le respondió.
-Yo también me alegro de verlos, chicos- dijo riendo mientras chocaba las palmas con Sebastián y asentía como saludo hacia Iván.
-Es bueno que volvieras- le respondió Sebastián sonriendo, él asintió antes de sentarse al lado mío y mirarme con curiosidad.
-¿Quién es el renacuajo?- preguntó en voz alta causando algunas risas, yo lo miré de mala manera.
-Si alguien es renacuajo aquí, eres tu- dije fríamente haciendo que algunos de los que estaban gritaran "Uhhh". Luciano me sonrió divertido.
-¡No te aguantas ni una broma!- dijo divertido mientras negaba con la cabeza.
-No me gustan las bromas- sisee enojado.
-Pues, señorito millonario ¡Estás sentado al lado mío! Si te molesta, puedes cambiarte- sonrió, Iván dejo escapar una risita y Sebastián negó con la cabeza.
-Deja de molestarlo, Luciano- sonrió, el chico que estaba a mi lado hizo un puchero pero se quedo callado obedeciendo al castaño, yo miré a Sebastián con el ceño fruncido pero él solo me sonrió antes de volver su vista al frente y entrelazar sus manos con las de su novio, Iván hizo un gesto como de querer soltarse pero Sebastián no lo dejo así que el más pequeño suspiró dejando de intentar soltarse.
Me pregunte si Liam y yo fuéramos pareja si seríamos así. Con algunos gestos de cariño pequeños, aunque lo dudaba, no sería bien visto que fuéramos pareja.
Si Liam hubiera nacido mujer no habría problema, podríamos salir y ser pareja normalmente, no era justo que por que él era un chico y yo también no tengamos el derecho a amar. Suspiré pensativo.
Ni siquiera sabía si Liam sentía algo por mi y dudaba realmente que lo hiciera, él trataba de ser el hijo perfecto, jamás le daría una oportunidad a algo que podría horrorizar a sus padres.
La primera clase fue normal, la profesora nos dejo varios kilos de tarea para la semana que viene, ella es un amor ¿No creen? ¡apenas estamos en Lunes!
Luego tuvimos a un profesor suplente en religión, no sé como salió el tema de la homosexualidad. El profesor era claramente alguien homofobico, empezó a decir que eso estaba mal, que personas como ellos no deberían existir, que sería muy horrible tener un alumno así, que Dios los iba a castigar, que irían al infierno, etc, etc y etc.
Yo no podía evitar mirar de reojo a Sebastián y a Iván quienes tenían el ceño fruncido, el castaño tenía la mano que no sostenía de manera sutil a la de su pareja hecha un puño. Mire a Luciano, él estaba muy serio y también tenía una clara desaprobación en su rostro.
-¿Dios habló con usted?- Sebastián fue el que rompió el monologo del profesor.
-¿Disculpa?- preguntó el hombre frunciendo el ceño.
-Esta diciendo que esta mal, que esto, que aquello ¿Dios habló con usted diciéndole todo eso? ¿Qué le dijo? "Hola, hijo mío ¿Sabes que la homosexualidad es mal?" o le dijo "acabas de llamar a la linea celestial, apriete el número uno para hablar con Dios"- respondió con sarcasmo, Iván apretó la mano de su pareja como pidiendo que se calmara pero parece que esa vez no dio resultado.
-¿Cómo te atreves a hablarme así?
-¿Cómo usted se atreve hablarme a mi así?- reclamó. Era la primera vez donde todos estábamos en un silencio sepulcral mirando la pelea de miradas con gran atención.
-Yo solo habló con la verdad, le pregunté si dios le dijo todo eso
-¡No puedes cuestionar la biblia!
-¡Y ahí dice "ama a tu prójimo como a ti mismo"! ¡y que Dios nada más puede juzgar! Hasta ahora no me ha llegado un mensaje celestial diciendo que estoy mal así que ¡Le agradecería que pudiera callar esa boca homofobica!- alzó la voz.
-Sebastián- susurró Iván, él tampoco estaba de acuerdo con lo que hablaba pero sabía que no era el lugar para discutirlo.
-Acompañame un momento- habló el profesor, Sebastián rodó los ojos pero se levantó. Cuando ambos salieron el lugar seguía silencioso. De pronto, una chica del fondo levantó su mano hacia arriba haciendo un gesto con la mano que no reconocí, unos segundos después todos estaban haciendo el mismo gesto con la mano y no entendía que querían decir. Era el único que no hacía ese gesto con la mano.
Luego todos la bajaron y se quedaron en silencio otra vez.
-¡No se preocupen! ¡los divergentes no pueden ser controlados!- exclamó de pronto Luciano asustándome un poco.
-¡Viva intrepidez!- gritó la chica levantando el puño y todos lo siguieron.
¿Alguna vez les ha pasado que todos hablan de algo y ustedes no saben de que? Yo me sentía de la misma forma, no entendía que pasaba.
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Miguel T.T
*El "gesto" que hacen los alumnos son los de los Juegos del Hambre XD
*Divergente/ Osadía es del libro "Divergente"
*Yo quiero una clase que les libros T.T