Después de hablar y desahogarme con Savka, solo tenía que saber cómo llegar a Alice o eso me había dicho la chica del helado, fui donde Clara y le pregunte algunas cosas.
- Sabes que cosas le gustan? Comida, pasatiempos no lose, quiero disculparme por lo de esta mañana - me miro sonriendo y me dijo todo con lujo de detalles.
- Es muy lindo de tu parte que hagas eso James, y más sabiendo que fue ella la que lo hizo peor, peeero así es ella se vuelve loca cuando las cosas se ponen mal - aun no entendía del porque estaba tan evasiva esa mañana.
- Que fue lo que la puso de esa manera, no logro entender, porque sé que lo del beso no fue -
- Se ha enterado de algo horrible esta mañana - miro hacia todos lados y siguió - es algo relacionado con su padre, pero por lo que más quieras no digas nada o me matara. -
La mire y asentí con la cabeza, me despedí de Clara y camine a casa, a medio camino recordé que había olvidado unos libros en mi taquilla, me di la vuelta y comencé a caminar hacia la escuela, pero alguien se interpuso en mi camino.
Oh lo siento! - dijo esa voz dulce que me encantaba y me ponía como loco, mire hacia abajo y ahí estaba ella, respondí algo cortante y luego me di cuenta, hubo un silencio incómodo, mire hacia la calle y hoy su voz decir mi nombre.
James? - centre mi atención en ella y comenzó a hablar, pidiéndome disculpas por cómo se había comportado conmigo, bajo su cara algo avergonzada.
Luego de disculparnos uno con el otro, la invite a comer tacos, Clara había dicho que era su comida favorita, pedí la orden, la camarera se retiró y Alice me pregunto lo que más temía.
Yo sabía quién era la persona que si podía hacerla feliz y claramente esa persona era YO.
Después de varias preguntas me dijo - -Ah sí? Y quien según tú? - me entro el coraje de Hombre alfa y respondí...
- YO! - me miro algo sonrojada y no le salían las palabras de esa hermosa boca suya.
- Pe...pero c...como si vienes llegando ahora, como puedes decir eso James -
- Porque rayos Alice, desde la primera vez que te vi, sentí algo por ti, tu manera de hacer callar a los demás y después ignorarme, no lo entendía, luego la apuesta, me pase todo el maldito día mirándote mientras me hacías pasar el ridículo, y cuando me entere de lo del beso con Simón, sentía que iba a explotar de rabia, sabes porque? Porque él pudo tocar esos labios y yo no puedo. - termine de decir todo, necesitaba sacarlo, ella me miraba tratando de averiguar si era una broma o lo que le decía era real.
- Yo... - no alcanzo a terminar, necesitaba tocar esos carnosos labios, así que la bese. Pensé que no seguiría con el beso pero lo hizo y mi corazón latía mil por hora, era una sincronía perfecta, sus labios con los míos una combinación extraordinaria, no podía parar de besarla, pero nos tuvimos que separar para tomar algo tan común como el O2.
La mire aun con fuego por dentro, ella me miro algo asombrada por como había reaccionado, pero luego me sonrió de una manera tan tierna que me derritió totalmente el corazón.
- Eso lo tenías planeado? - me pregunto algo dudosa, la mire algo confundido por su pregunta.
- No, no tenía idea de que hoy iba a ser el gran día de poder besarte - mi respuesta la hizo sonreír nuevamente y me prometí que solo la haría reír y seguiría sacándole más sonrisas como esas.
- Eres un tonto James! No puedes venir y besarme, no somos nada - lo último lo susurro, pero seguía sonriendo.
- Claro que lo somos - me miro y su sonrisa se transformó en confusión.
- No James! No somos nada, te gusto y me gustas, per... - mis ojos brillaron al oír eso salir de su boca, mi sonrisa se ensancho y Alice alarmada se golpeó la cabeza con su mano reiteradamente.
- Ey! No hagas eso, nos gustamos que tiene de malo? -
- Que yo no creo en estas cosas, solo hacen sufrir a las personas -
- Alice, yo nunca te haría sufrir, de verdad eres alguien importante en estos momentos, por favor permíteme hacerte feliz si? -
4
ESTÁS LEYENDO
Autofilia
Genç KurguPrologo ° Esta es la historia de una chica solitaria, sensible, y destruida... luego de momentos que marcaron su vida y la cambiaron totalmente, quitando su aspecto rudo y sarcástico, ella decidió no confiar en nadie nunca más, pero su promesa se v...