Mientras Alice tomaba su ducha, pedí el desayuno, sonó la puerta y el camarero me entrego el carrito con la comida, le di dinero y se marchó, Alice salió envuelta en una toalla y con su pelo totalmente suelto, la mire un buen rato.
- Que tanto miras acosador? – sonreí y me acerque a ella.
- Solo miro la belleza de usted, dama – Alice rodo los ojos y rio.
- Dúchate, te esperare con el desayuno servido – me dio un beso en la mejilla y camino hacia el cuarto.
- Le he pedido a Clara que me diera una mochila con algunas prendas, están al lado de la cama – ella me miro y me agradeció.
Entre y me duche rápidamente, me cambie de ropa y tomamos desayuno con Alice. Lo que resto del día fue genial, salimos a pasear en el coche y cuando ya eran las 6:00 de la tarde, fui a dejar a Alice a su casa, nos despedimos con un beso.
- Nos vemos el lunes – me dijo y yo le pregunte...
- Y porque no mañana? –
- Sabes tengo una idea, quiero mostrarte un lugar, pasa por mi mañana a las 4:00 de acuerdo? – asentí y me volví a despedir, me puse en marcha y fui a casa.
Ahora tenía que ir a devolver el auto y después me iría a casa caminando.
Fui a casa del amigo de mi madre, golpee y me abrió 2 minutos después.
- Ey! Como te ha ido? Con esa sonrisa, vaya que me lo dices todo amigo. – sonreía como un bobo.
- Ten! Gracias por el préstamo de coche, nada de rasguños, como lo pediste – reímos y este me invito a pasar, pero necesitaba irme a casa. – Para la otra si? Nos vemos! Gracias bro – le di un abraso y me fui caminando, llegue a casa y mi madre me entrego un paquete que me había llegado, no tenía remitente ni nada, lo abrí algo extrañado, dentro de la caja venia una foto de Alice con una nota "Se te acabo el tiempo, después no digas que no te lo advertí James (4)" no podía creer lo que estaba pasando, es que querían cagarme mi día?, pues no lo lograría, mientras Alice estuviera conmigo no le harían daño.
Subí a mi cuarto, y comencé a escuchar música, jugué un rato con mis pequeños y traviesos hermanitos y cenamos.
El día domingo fui a buscar a Alice y fuimos a su lugar secreto, era un parque abandonado, bueno antes era un zoológico o eso entendí de su explicación.
Caminamos un rato y luego nos pillamos con un rio, me contaba que cuando estaba triste o enojada, se venía aquí, y que eso lograba tranquilizarla, la mire atentamente mientras me contaba todo, en eso me miro y yo le pregunte...
- Aquí no viene nadie? Además de ti claro – ella asintió con la cabeza – entonces si nos tiramos no nos vería nadie verdad? – ella me miro con una sonrisa y comenzó a sacarse la ropa.
- el que se mete último, paga las palomitas – grito y yo comencé a sacarme mi pantalón, era obvio que ella ganaría solo traía puesto unas sandalias y un vestido.
- Eso es trampa, tú no te demoras nada en sacarte ese vestido -
Siguió riendo y la mire mientras corría hacia el rio, se tiro y luego yo, estábamos nadando y se acercó, comenzamos a besarnos y la pasamos toda la tarde metidos en el rio, de repente apareció una nube negra sobre nosotros y comenzó a llover, reíamos sin parar, fue un día genial.
Nos salimos del agua y fuimos en busca de nuestra ropa, pero antes tome de la cintura a Alice y esta quedo frente a mí, la mire y le tome un mechón que tenía suelto, se lo puse detrás de la oreja, y la bese lentamente.
Nos separamos en busca de aire, mientras aun caía la lluvia, de seguro nuestra ropa estaría totalmente mojada.
- Vamos! – me dijo y tiro de mí, corrimos hacia su casa, que no quedaba para nada cerca, pero mientras íbamos corriendo, nos deteníamos para darnos unos cuantos besos.
Llegamos a casa de Alice y estaban todos, su madre la miro, rodo los ojos y lo único que le dijo fue – Te resfriaras lo sabes? – y salió a la cocina, Alice le dio igual y fuimos a su cuarto, nos secamos y cuando se detuvo la lluvia me fui a casa, ya eran las 8:00 pm.
- Adiós Te Quiero si? Nos vemos mañana... - Alice me dio otro beso y me fui de ahí.
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Autofilia
Teen FictionPrologo ° Esta es la historia de una chica solitaria, sensible, y destruida... luego de momentos que marcaron su vida y la cambiaron totalmente, quitando su aspecto rudo y sarcástico, ella decidió no confiar en nadie nunca más, pero su promesa se v...