Autofilia

3 Parte. Narrada por Alice.

Luego de la comida, todo fue normal no los volví a ver, tome el autobús y llegue a casa, no había nadie como era de esperarse, mama llegaba tarde, Charlotte tenía entrenamiento de porristas en la universidad, y los pequeños estaban en el colegio, así que me serví cereal con leche y me fui a mi habitación, pasaron las horas y ya estaban todos en casa, cenamos en un silencio profundo, hasta que Lucy comenzó a hablar de su día en el colegio y a pelear con Lucas, termine de comer y me levante de la mesa, mama me miro, pero no le di importancia ya que no se preocupaba de mí, desde que papa murió, me decía que le recordaba mucho a él y me odiaba un poco o así lo sentía, la relación de ellos nunca fue muy... solo era una relación complicada.

Subí las escaleras me metí en el cuarto y dormí hasta el otro día... los últimos días de clases habían sido normales, hasta que un día llegando a la escuela, vi a Clara correr hacia mí, me apretó tanto el brazo que me dieron ganas de romperle la cara, pero era mi amiga y no podía hacerlo... aunque a veces me sacaba de mis casillas.

– Auuchh!!! Ey crees que los brazos se regalan o qué? Casi me lo sacas chica – ella me miro con cara de "lo siento" y dijo.

– ouu, no me había dado cuenta – y soltó mi brazo alisando la tela de mi blusa y siguió hablando – ha llegado un chico nuevo, es raro, demasiado raro a decir verdad, pero es lindo, al parecer le gusta el negro, como a otra persona que conozco – yo la quede mirando con cara de "no jodas ahora" y le puse la mano en la cara para golpearle la frente, pero no lo hice, me miro y puso su cara de coqueta moviendo sus cejas, a decir verdad no notaba el movimiento, con sus ojos chinitos eran difícil de mover.

Aaah sii? – dije y ella me miro - explica eso de raro si? Que me imagino a un tipo con ojos de vidrio y cara cortada – síp, mi imaginación era bastante loca – soltó una carcajada y dijo...

– estás loca eh!! Bueno no es raaaro, pero no habla con nadie, vi a Mia tratando de hablarle, quizás dándole la bienvenida y le ha dejado hablando sola, eso sí es raro, casi nadie deja hablando sola a la princesa Mia y me ha dado un poco de risa también– Mia era la más popular de la escuela, y catalogada también como la más linda, era raro ver a alguien resistirse a ella, y más con el cuerpo de barbi que tenía.

Jaaaa!! Al fin alguien con un poco de cerebro – dije y empuje a Clara a clases, no quería llegar tarde, algo tramaba cada profesor para aquel burro que llegara tarde, entramos y nos sentamos, luego entro el profesor y un momento después entra un chico todo sudado por la puerta, lo mire y le dije a Clara.

– Pobre tendrá que hacer algo para poder entrar – el profesor lo miro con malicia y le dijo...

– Simón, al parecer te gusta bailar merengue – todos en clase rieron... el pobre siempre llegaba tarde, Simón era alto con cabello castaño claro y corto, tenía unos ojos color miel y usaba anteojos.

Pero de pronto alguien atrás de Simón dijo – Ey que esperas!! No estaré parado toda la hora – Simón lo miro y lo dejo pasar.

– El profesor lo miro y dijo – Aaah el chico nuevo... mmm James verdad?, si me dijeron que vendrías a esta clase, Simón toma asiento, hoy no bailaras – mientras Simón caminaba a su asiento y mis compañeros volvían a reír, el profesor le dijo a ese tal "James" que se presentara.

El chico lo miro un poco feo (bueno bastante feo) – Eeeh okaay.... Me llamo James, vengo de indonesia... – todos en ese momento empezaron a murmurar y yo... Bueno pensé en mi mente que si no se podían callar, pero al parecer lo dije más fuerte de lo pensado.

– ey no ven que aún está hablando? Idiotas!! – todos en la sala me miraron, hasta Clara con cara de asombro y en ese momento me di cuenta que lo había dicho en voz alta, y me maldije por ser una estúpida que no puede pensar en voz baja, o simplemente no pensar.

James me miro y yo corrí la vista hacia la ventana... el chico siguió hablando un poco de su vida, al parecer pasaría el último año aquí... Clara me contaba que después de hacer callar a todos en clases no dejo de mirarme – Aaah chica, de verdad ese chico sí que no dejaba de mirarte, y tú la muy tonta mirabas para afuera.

Baah las plantas estaban más interesantes que esa aburrida clase de literatura – ella me miro y sonrió hacia la entrada de la cafetería y yo seguí su mirada, ahí estaba él, parado con sus converse negras unos pantalones negros y una camisa blanca, el pelo rubio lo llevaba revuelto y miraba en nuestra o mejor dicho mi dirección.

– Mire a Clara y le dije – ni se te ocurr.... – pero no alcance a terminar mi adorada frase, porque Clara ya le había hecho señas al chico para que se sentara con nosotras, la mire con odio, y lentamente le saque el dedo medio, ella solo rió y en el momento que el chico se sentó al lado mío y dijo – Hola - vi en sus ojos que muchas cosas cambiarían y que nada volvería a ser como antes.