Se sentía maravilloso, al ver ese azul claro creí que estaba en el cielo, una sensación de paz recorría mi cuerpo, cuando una voz gruesa me saca de trance.
--Srta Florez. Me dice con esa voz tan penetrante y gruesa que estremece mis sentidos.
No puedo articular palabra alguna, es un hombre alto, cabello liso y su uniforme de Doctor lo hace ver muy sexy. Ya va ¿Doctor? ¿Que me ha pasado?
Tardo unos minutos en asimilar que estoy postrada en una camilla de un hospital y este apuesto hombre es mi doctor.
--Srta Florez usted ha sufrido un accidente, ha sufrido varias fracturas en el brazo derecho son pequeñas, tiene varios moretones debido al impacto con el suelo, soy su traumatologo el Doctor Chasis.
Me deja un tiempo sola para que asimile lo que me ha dicho, no puedo creer que me hayan roto el brazo, tendré que estar un tiempo con el yeso.
--Mi niñaaaa. Suena la voz de mi madre y mi padre al unisono.
--Hola mama, hola papa.
--Ya nos han informado de lo que te ha ocurrido, hoy te darán de alta pero hay que regresar en un mes. Esta vez es mi padre quien habla.
Un mes eso es mucho tiempo para volver a ver esos azules que me han estremecido hasta el fondo.
Salimos del hospital que no sabia que existía esta a unos 20 minutos de mi casa.
Al llegar a mi casa no sale de mi mente en que quiero que este mes pase volando, y en como haré para que Mi querido Doctor me heche una revisión profunda.
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Vicios.
AcakAlejandra con tan solo 17 años vive la vida como si no le importara nada ni nadie, se encontraba sumergida por el camino de las Fiestas, el Alcohol y la Promiscuidad. En un día común para ella, se topa con una persona que hace que su vida de un giro...
