Capítulo 34: "Sustos y charlas inesperadas"

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Capítulo 35: "Sustos y charlas inesperadas"

Bostecé ruidosamente, había despertado hace 10 minutos y con despertar me refiero a medio levantarme de la cama y aún seguir entre dormida y despierta. Me había prometido a mi misma hace cinco minutos levantarme y dejar de ser tan floja pero hey, era domingo, muy extraño sería que me despertara. En fin, de todos modos tengo que bajar a ver si los chicos están y si no, prepararme yo mi desayuno a parte quiero ver a Luke. 

 Entré al baño y me cepillé los dientes lavándome con rapidez la cara mientras la barriga me imploraba comida. Bajé las escaleras y noté que la casa se escuchaba muy silenciosa, algo que no es normal así que es momento de preocuparse. Un poco dudosa entré con lentitud a la cocina pero no había nadie, seguramente habrían ido a algún lugar y decidieron dejarme aquí tirada por andar de floja y dormilona, aunque estar con mi cama no es tan malo. 

-Hola, Tn.-me sobresalté al escuchar a alguien decir mi nombre. Giré mi rostro y me encontré con la chica que días antes había buscado a Michael como loca. 

-Hey, hola.-la saludé sonriendo. No recordaba bien su nombre pero no tiene porque saberlo. Se sentó en la silla frente a mí, mientras mordía una manzana. 

-¿Cómo estas? ¿Qué tal va todo?-hizo un ademán con la cabeza, meciendo su silla hacia atrás. Su mirada era despreocupada y su actitud desafiante, parecía una chica ruda y complicada. 

-Bueno, todo está bien, los chicos salieron pero no se adonde ¿y tú?-me levanté para buscar unos panqueques en el microondas, haber SI ESTABAN ahí. Y sí, al parecer se acordaron de mí. 

-Estoy bien, aunque no puedo decir lo mismo de mi gallina.-dejó de mecerse para mirarme fijamente, bien, si esto no es una indirecta entonces no se qué es. Tosí un poco incómoda, sentándome en la mesa de nuevo. 

-Eh...¿panqueques?-sonreí vacilante. 

-No gracias.-negó con la cabeza, sonriendo. Suspiré agradecida, pensé que me golpearía por casi matar a su gallina. 

-Bien, más para mí.-murmuré con alegría, de verdad apreciaba la comida. 

-Eres una hambrienta.

-Gracias.

-No fue un cumplido.

-Lo fue para mí.-me encogí de hombros. La vi frunciendo el ceño, okey, mejor debí permanecer callada. 

Se detuvo y su cuerpo se tensó, sus ojos inspeccionaban mi cara detenidamente buscando rastro de algo que no podía descifrar. Por un pequeño momento tuve miedo pero luego recordé que soy Tn, y quién quiera pelear que pelee. Aunque no sepa mucho pelear sino me queda de otra, entonces a pelear. Tragué saliva con fuerza y luego puse una expresión seria, tratando de parecer intimidante, siempre pasando pena, Tn, siempre. 

-Me caes bien.-asintió mientras continuaba meciéndose en la silla con su manzana ya casi terminada. Suspiré y seguí comiendo tranquila, pensé de verdad que me golpearía. 

Comenzamos a hablar de diversos temas, le gusta la música rock y la electrónica, adora las motos y le encanta el negro. Odia a las zorras oxigenadas y le gusta ver películas. En tan poco tiempo, se sabe bastante. Habíamos hablado mientras yo limpiaba todo y me preparaba para salir, íbamos a ir a la heladería, ella me había invitado y no iba a decirle que no, me caía bien. 

-¿Y el niño rubio?-preguntó con curiosidad, dándome uno de los cascos de su moto. Si, tiene una moto. Lo único que la distingue de una chica mala es su ropa, ya que no usa chaqueta negra ni nada por el estilo, se viste normal. 

-Luke querrás decir.-la corregí sonriendo al verla rodar los ojos. Murmuró un "si, ese" para luego reír al ver mi cara de "no lo trates mal que es mi novio"

Una chica en 5sos (Luke Hemmings y Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora